Pau Esteve con el Goya por su fotografía en Caníbal y fotogramas de películas donde ha trabajado.

Pau Esteve con el Goya por su fotografía en Caníbal y fotogramas de películas donde ha trabajado. E. E.

Cultura

Uno de los directores de fotografía más solicitados del cine español vive en Málaga: así es Pau Esteve

El artista catalán ha trabajado en películas como 'El buen patrón' o 'Caníbal', cuya participación le valió un Goya, o series como 'La peste'.

16 febrero, 2022 03:33
Málaga

Noticias relacionadas

Pau Esteve Birba (Barcelona, 1981) se ha convertido en uno de los directores de fotografía más solicitados del cine español en los últimos años. Su último trabajo en El buen patrón, vencedora en los premios Goya 2022, le mereció una nominación. Kika de la Rica le arrebató el cabezón por su labor en Mediterráneo. Sin embargo, Esteve está "muy orgulloso" de haber colaborado en el equipo de "la película del año".

El director de fotografía, afincado en Málaga desde hace cinco años, atiende a la entrevista antes del rodaje de un anuncio en Asturias. "Formar parte del equipo me ha encantado. Me ha hecho mucha ilusión", declara orgulloso Esteve, que piensa que los premios son lo de menos. "El regalo de esta profesión es que con cada proyecto te enfrentas a una nueva aventura y creas un mundo distinto", destaca. 

El profesional catalán es el responsable de la creación artística de la imagen de la película, además de coordinar al equipo de fotografía (cámara e iluminación). En su oficio está expuesto al cambio constante. "Así como hay gente que le gusta la rutina, yo soy lo opuesto. A mí me gusta siempre hacer cosas nuevas. Esta profesión me permite en cada proyecto embarcarme en una aventura distinta", insiste.

-¿A cuántos proyectos ha tenido que decirle que no?

-Eso es lo más difícil. Hay mucho trabajo. Escoger cada película es sin duda lo más complejo. Muchas veces te llegan proyectos muy chulos, pero se pisan con otros. Nunca sabes si has tomado la decisión correcta. 

Esteve ha colaborado con algunos de los directores más prestigiosos del panorama nacional como Fernando León de Aranoa y Manuel Martín Cuenca (con él ya ha repetido: Caníbal y El autor). "Cuando trabajas con personas como Fernando o Manolo, gente que vive su oficio con auténtica pasión, es muy fácil. Son directores que lo tienen muy claro el tipo de película", recalca el director de fotografía de Adiós, Tiempo después o la serie Arde Madrid.

Al profesional le gustaría trabajar con Icíar Bollaín en una película tras rodar con ella un anuncio. "A ver si lo conseguimos", declara juguetón. El artista admira mucho a los directores. "Yo sería incapaz. Un director debe saber de todo. Le va a preguntar los de maquillaje, sonido, vestuario, montaje. Los actores, el músico. Yo me defiendo en lo mío", zanja.

Mudanza a Málaga

Esteve vivía en Barcelona con su pareja, la directora Violeta Salama (Alegría). Cuando tuvieron a su primera hija, Lea, empezaron a buscar ciudades y "por calidad de vida" eligieron la provincia andaluza. "Estamos encantados. Vivimos en Chilches, al lado del Rincón, cerca de la playa. Tiene una gran ventaja: nos permite desconectar de la industria. Si vives en Madrid o en Barcelona, siempre hay cosas o estrenos", admite.

Para el director de fotografía con dos hijos de seis y cinco años, "la conciliación familiar es sin duda lo más difícil" de su profesión. "Estamos súper a gusto. Aquí tengo mi rutina con los niños. Los llevo al cole. Cuando tengo trabajo, viajo. Mi profesión es muy absorbente", se sincera el profesional que no tiene redes sociales ni Whatsapp (y está en la gloria).

Entre sus trabajos más alabados por la crítica y el público fue su labor de fotografía en la serie La peste. Tuvieron que rodar con una luz muy particular porque emulaban aquella época tan oscura. "Lo que hablamos desde el principio con el director, Alberto Rodríguez, es que queríamos ser muy realistas y que el espectador se sintiera en la época. El proceso de investigación fue muy chulo", relata.

Influencia del arte

El equipo llegó a la conclusión de que para ser los más fieles posibles tenían que reproducir en la mayor medida posible cómo vivían ellos: con velas y con lámparas de aceite. "El 80% del rodaje estuvo hecho así", subraya. Gracias a su fotografía, el tenebrismo de Caravaggio emerge en numerosas escenas. "Mi trabajo bebe bastante del arte plástico. Muchas veces probablemente de forma inconsciente. Esas cosas están ahí", reconoce mientras menciona a Goya.

Frente al tenebrismo de la serie de Movistar+, Esteve ha trabajado luego en películas más coloridas como Alegría. "Era un proyecto especial y muy personal. Llevábamos muchos años trabajando en el proyecto. Cuando Violeta consiguió levantarla y pudimos rodarla fue muy chulo. Lo pasamos muy bien", cuenta. 

El catalán ganó el Premio Goya 2014 a la mejor dirección de fotografía por su impresionante trabajo en Caníbal. Ahí entró en escena esa luz granadina tan particular. "El caso concreto de Caníbal fue un regalo. Le dabas una patada a la cámara y el cuadro que te sale es bonito. Lo rodamos casi todo en la Carrera del Darro. Era súper agradecido. Fue una maravilla. Además, rodamos en invierno, que para mí es cuando la luz es más bonita", recuerda entusiasmado.

Después volvió a Granada, esta vez a su provincia, para rodar Intemperie de Benito Zambrano. El particular reto de esta película pasaba por el paisaje tan árido. "El chaval está en medio del desierto perdido, y debíamos intentar con la cámara transmitir esa calor y esa pesadez. Luz muy brillante, casi quemado. Un poco la voluntad era que vieras la película y dijeras: "Necesito beber agua", declara. 

España, el Hollywood europeo

Pedro Sánchez tiene en mente convertir a España en el "Hollywood de Europa". Le preguntamos si cree que sería posible con una apuesta económica decidida. "España es ya un poco el Hollywood europeo. Hay muchas producciones extranjeras que vienen a rodar aquí justo por eso. Es un país que tiene muchos tipos de paisajes distintos a poca distancia, en especial Andalucía", subraya.

El director de fotografía piensa que "para rodajes de época tenemos maravillas aquí". "Mira los de Juego de tronos. Ridley Scott ha venido varias veces. Tenemos todas las herramientas y los profesionales. Hay una cantera de gente muy buena. Yo no sé si llamarlo Hollywood. Suene pretencioso. Podría ser una buena plataforma para la industria. Hay mucha tradición desde hace muchísimos años y gente muy preparada", asegura.

A Esteve, que forma parte de una generación de profesionales formados en escuelas de cine, siempre le había gustado la fotografía. Tenía su propia cámara y no paraba de ponerla en uso siendo muy joven. Uno de los puntos de inflexión fue ver Lost Highway con 16 años. "Al verla afloraron sentimientos. "Todo esto que me transmite y que se hace en ella me gustaría hacerlo a mí", pensé. Después la he revisionado y no me ha gustado tanto", hace memoria. 

"Lo mejor para aprender este oficio es rodar"

Cuando Esteve empezó a estudiar en la Escuela Superior de Cine y Audiovisuales de Cataluña iban con unas cámaras súper pesadas y caras. "Ahora sacas un teléfono y puedes contar lo que quieras con un mínimo de calidad. Lo mejor para aprender este oficio es rodar", aconseja el profesional que cuando termina un filme y va a talonaje (proceso de corrección de color), se da cuenta de los errores que ha cometido. "Para la siguiente ya lo sé. Vas aprendiendo y creciendo en cada proyecto", dice humilde.

Antes de las plataformas, "la televisión no era tan cinematográfica", opina Esteve. "Antes en la televisión se hacía cosas con calidad muy baja. Eso ya se cuida mucho ahora. En una serie o miniserie puedes desarrollar una historia de forma diferente. Dispones de más tiempo. Ambos formatos son muy interesantes mientras se aborden desde una concepción cinematográfica y una calidad mínima", reflexiona el artista que le puede lo de ver proyectada la película en pantalla grande.

Al director de fotografía le gustaría hacer próximamente una road movie. "Es algo que siempre he visto y me ha gustado. Hice un wéstern con Benito, pero haría otro encantado. Y también una futurista. Estuvimos intentando levantar con un director una así y se me quedó la espinita", reconoce al profesional, que le gusta hacer de todo un poco. Por lo pronto está con un anuncio en Asturias. "Hay mucho trabajo. Ahora estoy esperando al siguiente desafío", se despide.