El presidente Pedro Sánchez, esta mañana en un mitin del PSOE en Cáceres.

El presidente Pedro Sánchez, esta mañana en un mitin del PSOE en Cáceres. Europa Press

Política

Sánchez en campaña contra los obispos por opinar que España necesita cuestión de confianza, moción de censura o urnas

Sánchez anima al presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, a que "se presente a las elecciones con la ultraderecha".

Bolaños le acusa en una carta de "romper la neutralidad de la Iglesia" y le exige que "respete al Gobierno".

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Las claves

El Gobierno critica al presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, por sugerir que el bloqueo institucional en España puede resolverse con cuestión de confianza, moción de censura o elecciones.

Pedro Sánchez y varios ministros acusan a la Iglesia de romper su neutralidad política y le piden abstenerse de hacer pronunciamientos partidistas.

El arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, advierte sobre la prudencia al hablar en nombre de la Iglesia y defiende el reconocimiento de los derechos nacionales de Cataluña.

El obispo Argüello aborda además temas como las relaciones entre Iglesia y Gobierno, la inmigración y la necesidad de combatir las causas de las migraciones en origen.

El Gobierno lanzó este domingo una ofensiva contra el presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, por decir en una entrevista que sólo ve tres salidas al actual "bloqueo" de las instituciones: "cuestión de confianza, moción de censura o dar la palabra a los ciudadanos" en unas elecciones.

Tres fórmulas, puntualizó Argüello en declaraciones a La Vanguardia, que "prevé la Constitución" para resolver una situación "singular" como la actual, en la que el Gobierno no tiene mayoría para aprobar leyes ni presupuestos.

En un mitin del PSOE celebrado en Cáceres, el presidente Pedro Sánchez animó al obispo Argüello a que "se presente a las elecciones con la ultraderecha".

"Que se presente, a ver qué resultado saca", comentó en tono jocoso.

Y le recordó que "el tiempo en el que los obispos interferían en la política terminó cuando empezó la democracia en nuestro país".

Sánchez pronunció estas palabras en un momento en el que el PSOE está asediado por los escándalos de acoso sexual (que ya salpican a seis dirigentes socialistas) y de corrupción.

A continuación, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, envió una carta al presidente de la Conferencia Episcopal, en la que le acusa de "romper la neutralidad política de la Iglesia" por su entrevista a La Vanguardia, y le exige que se "abstenga" de hacer este tipo de "pronunciamientos partidistas".

En su escrito, que Moncloa remitió a la agencia Efe, Bolaños interpreta que Argüello desea el "fin del actual Gobierno".

Y especula con que seguramente se sentiría mucho más cómodo con un Ejecutivo de "la derecha y la extrema derecha", que sería "más comprensivo hacia las posiciones de su organización", dice sobre la Conferencia Episcopal.

"Le pido expresamente que se abstenga de romper su neutralidad política y actúe con respeto hacia la democracia y el Gobierno", indica la carta de Bolaños remitida al presidente de la Conferencia Episcopal.

El ministro Bolaños también reprocha al jefe de los obispos que, en su entrevista a La Vanguardia, hable de "el Valle de los Caídos", sin tener en cuenta que tras la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática ahora se llama oficialmente "Valle de Cuelgamuros" por decisión del Gobierno.

En concreto, el obispo Argüello se había lamentado de que "en los últimos meses, las relaciones con el Gobierno han estado marcadas sólo por dos asuntos: el Valle de los Caídos y la reparación a las víctimas de abusos de la pederastia eclesial".

"Muy a nuestro pesar", añadía, porque a los obispos les hubiera gustado abordar con el Gobierno otras cuestiones "cruciales", como "la educación, constantemente desafiada y sobre la que se necesita un pacto de Estado".

A preguntas de Enric Juliana, el jefe de la Conferencia Episcopal se había mostrado convencido de que no rompe "neutralidad alguna" con sus declaraciones: "Respondo remitiéndome a la Constitución y a los mecanismos que ésta prevé" para salir de la actual situación de "bloqueo" político.

El ministro Félix Bolaños también se pronunció sobre la polémica en la red X: "Le pedimos a la Conferencia Episcopal neutralidad política y que disimulen un poco su querencia a PPVox", ha escrito.

Por su parte, el arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, advirtió al jefe de la Conferencia Episcopal que debe ser más "prudente" al hablar "en nombre de la Iglesia".

Planellas consideró que las palabras de Argüello pueden chocar con la Constitución Pastoral Gaudium et Spes del Concilio Vaticano II, según la cual, "la Iglesia no puede identificarse con ninguna opción política concreta y no está ligada a ningún sistema político".

La "nación catalana"

Con todo, el arzobispo de Tarragona coincidió en que "la situación política está más bloqueada que el pasado julio, con una legislatura que está sin presupuestos y con un gobierno mucho más débil y una situación mucho más precaria".

En declaraciones recogidas por Efe, Planellas también afeó a Argüello que, al hablar de la Constitución, dé por hecho que "la nación española es la que tiene la soberanía", sin tener en cuenta "la existencia de la nación catalana, que exige una adecuada estructura jurídico-política que haga viables los derechos nacionales que tiene Cataluña".

Otros ministros y dirigentes del PSOE se sumaron este domingo a la ofensiva del Gobierno y se hicieron eco de las palabras pronunciadas por Pedro Sánchez en Cáceres.

"Como mujer de la Iglesia progresista, le pido al presidente de la Conferencia Episcopal que apostate de 'el que pueda hacer que haga'", ha escrito la vicepresidenta María Jesús Montero.

La titular de Hacienda sugirió así que el obispo Argüello se ha limitado a secundar el llamamiento realizado por el expresidente Aznar para derribar al actual Gobierno.

Al menos, en algo coinciden Pedro Sánchez y el presidente de la Conferencia Episcopal. En la entrevista, Argüello confiesa que le ha gustado mucho el último disco de Rosalía: "Desde el punto de vista artístico es potente", afirma.

La inmigración ilegal

También se refiere al fenómeno de la inmigración: "Debemos defender el derecho de una persona a no tener que salir forzado de su propia tierra".

Por tanto, añade, es necesario "combatir las causas de las migraciones en su origen, ya sea por cuestiones de guerras o por cuestiones económicas".

"La Iglesia tiene claro que no se puede traficar con carne humana y que hay que abordar la cuestión de las mafias", señala el obispo Argüello, quien considera que los Estados tienen "derecho a regular sus flujos migratorios".

No obstante, indica, una vez el inmigrante llega a nuestras costas, "hemos de acogerle, promoverle, integrarle".