Felipe González en el documental 'La última llamada'.

Felipe González en el documental 'La última llamada'. Movistar Plus

Política

Felipe González confiesa que pudo "eliminar" en Francia a la cúpula de ETA: "Vuelvo a tener dudas de si lo hice bien o mal"

El expresidente del Gobierno afirma en un documental que los terroristas estaban "perfectamente localizados y ubicados" en una casa.

Más información: Las víctimas de ETA denuncian que cada verano "se enaltece a terroristas" en las calles vascas: "Es una anomalía democrática"

D. Barreira
Agencias
Publicada
Actualizada

"Y dudé, claro. Dudé cuál era mi responsabilidad". Esa es la confesión que hace el expresidente del Gobierno Felipe González en el documental La última llamada, revelando que a principios de los años 90 pudo haber ordenado la eliminación de la cúpula de ETA, aunque finalmente decidió no dar luz verde a la operación

En la docuserie, que reúne el testimonio de todos los expresidentes vivos y que Movistar Plus estrena este jueves, González relata que en una ocasión le informaron "muy directamente" de que los líderes de ETA estaban reunidos en el sur de Francia "planificando los atentados".

Según su confesión, el expresidente socialista entre 1982 y 1996 recibió un informe que indicaba que los terroristas estaban "perfectamente localizados y ubicados" en una casa y que incluso se les podía "eliminar".

González, cuyo Gobierno impulsó una guerra sucia contra el terrorismo, asegura en la entrevista que dudó sobre si aprobar la operación, pero finalmente rechazó intervenir por todas las implicaciones que podía tener un acto de ese tipo, realizado además en territorio extranjero: "33 años después vuelvo a pensarlo y vuelvo a tener dudas de si lo hice bien o mal".

El también exsecretario general del PSOE admite que en ese momento tuvo dudas de cuál era su "responsabilidad" y pensó que quizá se podían salvar "50 o 60 vidas" en un momento en el que se producían multitud de atentados de la banda terrorista. "La gente no me perdona que lo dudara, incluso algunos compañeros", confiesa.

No es la primera vez que González se refiere a este episodio. En 2010, en una entrevista en el diario El País, ya desveló que tuvo la oportunidad de eliminar a la cúpula etarra, un momento que sitúa entre los años 1989 y 1990.

En ese momento, justificó, no existía posibilidad de detención y la única opción sobre la mesa era "volarlos a todos juntos" en la reunión. "La posibilidad que teníamos de detenerlos era cero, estaban fuera de nuestro territorio. Y la posibilidad de que la operación la hiciera Francia en aquel momento era muy escasa", indicó en la citada entrevista.

Atentados simultáneos

En el capítulo de La última llamada centrado en José Luis Rodríguez Zapatero -que estuvo en La Moncloa entre 2004 y 2011-, el expresidente relata otro episodio relacionado con ETA, en un momento en el que se estaban produciendo negociaciones entre el Gobierno y la banda.

En una de esas reuniones en Oslo (Noruega) en el año 2006 aparece el dirigente del aparato político de ETA, Francisco Javier López Peña, Thierry, y desplaza a quien hasta ese momento estaba liderando la negociación de parte de la banda, Josu Ternera.

"Un ciclotímico, tan pronto te decía que esto está hecho como te decía, sois como Hitler, no había forma de hablar con él", afirma en el documental el socialista Jesús Eguiguren, que era enviado del Gobierno en esa negociación.

Eguiguren dice que una noche a Thierry le llega un rumor de que el Gobierno quiere romper la negociación y le exige que le ponga al teléfono con Zapatero bajo amenaza de activar una serie de bombas en España al día siguiente. "Me dice que si se rompe la negociación España va a ser un Vietnam", recuerda el socialista vasco.

Zapatero rememora que el entonces ministro Alfredo Pérez Rubalcaba -a quien informaban los emisarios de Moncloa- le llama a la una de la mañana y le dice que "la cosa está muy complicada, muy mal", pero ambos convienen no rendirse al chantaje y "aguantar".

"Creo que es una de las pocas noches que he pasado en blanco completamente como presidente del Gobierno sin dormir nada, ni un minuto", dice el expresidente que, apunta, no se sintió tranquilo hasta pasadas las 9 de la mañana. Posteriormente, ETA rompió la tregua el 30 de diciembre de 2006 con un atentado en la T4 del aeropuerto de Barajas que causó dos muertos.

Por su parte, José María Aznar ratifica en la docuserie que tras los atentados del 11 de marzo de 2004 su Ejecutivo dijo "la verdad en todo momento" y rechaza que participar en la invasión de Irak fuese un error.

"En el final hay dos tipos de países o dos tipos de dirigentes políticos. Los que dan la vuelta alrededor de la mesa y ven cómo los demás deciden, o los que están sentados en la mesa decidiendo. La consecuencia de todo aquello es que España estuvo sentada en la mesa donde se tomaban las decisiones", afirma. La foto de las Azores, a su juicio, fue el momento que definió el "interés de España": "Y creo que no me equivoqué".