Miguel Ángel Gallardo, secretario general del PSOE en Extremadura.
Gallardo: "Entraré en la Asamblea cuando pase el 'caso de David Sánchez', que nadie piense que busco aforamiento"
"De Junts no espero que miren por el Estado. Es un partido nacionalista que va a por su interés".
"Si Sánchez no puede gobernar sin Presupuestos, Guardiola debería convocar elecciones".
"En Extremadura el talento es mayor porque hacemos un sobreesfuerzo para vivir en condiciones de igualdad y dignidad".
Miguel Ángel Gallardo es uno de esos personajes que parecían acotados a la política local, hasta que ha emergido como uno de los nuevos referentes del PSOE.
Fue alcalde de Villanueva de la Serena durante 21 años, mayoría tras mayoría, y llegó a la presidencia de la Diputación de Badajoz. Ahí decidió aspirar a ser el sustituto de Guillermo Fernández Vara al frente del PSOE de Extremadura y logró ganar las primarias.
En su breve primera etapa se convirtió en un barón crítico del PSOE, como Javier Lambán o Emiliano García-Page, censurando las concesiones de Pedro Sánchez a los independentistas, sobre todo en materia de financiación. Pero sólo nueve meses después de haber ganado las primeras, tuvo que enfrentarse a unas nuevas primarias contra una candidata más amable para Ferraz.
Las volvió a ganar, y esta vez con más apoyos. A pesar de las victorias, en su cara menos triunfalista, está investigado por contratar desde la Diputación de Badajoz al hermano del presidente Pedro Sánchez. Desde entonces, anda pegando saltos en las páginas de tribunales de la prensa nacional.
Con todo esto, es difícil imaginar un momento más oportuno para hablar con él.
Es secretario general del PSOE extremeño tras ganar unas primarias que se celebraron sólo nueve meses después de las anteriores, que también ganó. ¿Hacía falta repetir primarias tan pronto?
Bueno, la celebración o no de primarias depende de que un militante quiera presentarse a ellas. Si cuenta con los avales, en un partido democrático como el PSOE, son legales y legítimas. Otra cosa es si eran pertinentes en ese momento. En cualquier caso, el resultado tan amplio ha demostrado que los militantes se echaron el partido a las espaldas y eso ha fortalecido el proyecto que yo lideraba.
Se llegó a hacer la lectura de que Ferraz lanzaba a una persona afín.
Creo que quien toma la decisión es quien realmente tiene que asumir la responsabilidad. Honestamente, creo que para nada se puede implicar a la dirección del partido a nivel nacional. Es una decisión personal y la motivación de Ferraz no era que hubiera nuevas primarias.
¿Haber ganado la alcaldía de su ciudad durante tantos años y ganar las primarias dos veces consecutivas es un aviso interno para los que se han mostrado en su contra, tanto en el PSOE de Extremadura como en Ferraz?
Me siento más fuerte que nunca. Porque en los partidos democráticos la verdadera fortaleza te la dan los votos. He tenido el apoyo mayoritario en unas primeras primarias y ha sido reforzado en las segundas, eso nos tiene que congratular a todos. A los que te han votado y a los que no, porque nos reafirma como alternativa.
No olvidemos que los adversarios políticos no están en el partido. El adversario político es el PP y las políticas que ha desarrollado en Extremadura y que han supuesto un verdadero fracaso después de año y medio de María Guardiola.
Dejó la Alcaldía de Villanueva de la Serena para ser secretario general del PSOE, ¿ahora va a entrar en la Asamblea de Extremadura para hacer oposición a Guardiola?
Efectivamente, ese es mi compromiso. Lo haré a lo largo de esta legislatura para dirigir el grupo socialista y reforzar lo que para mí representa la política. La política no es tanto aquellos cargos que ocupas, sino posicionar al partido en la mejor situación para ser alternativa de gobierno.
Pero, para eso, habrá diputados que tendrán que dejar el acta.
Sí, tendría que dimitir un compañero y no entrar tres. Pero en mi partido tenemos la firme convicción de que lo importante no es el cargo, sino buscar la mejor forma de hacer oposición. Por encima de las personas está el proyecto y todos entendemos que debe ser así.
Tengo entendido que, cuando ganó esta última vez, le felicitó Emiliano García-Page. ¿Recibió algún otro mensaje de compañeros en otras federaciones como María Jesús Montero, Óscar López o Pilar Alegría?
Pues tengo que decir que todos ellos me han felicitado. No sólo Emiliano. He recibido felicitaciones de Pilar, de María Jesús, del propio Salvador Illa e, incluso, del compañero de la federación madrileña. También de otros que están pero van a dejar de estar, como Luis Tudanca, y otros que fueron, como Juan Lobato. Tengo que agradecer el apoyo de todos los compañeros.
A ver si dura luego el buen ánimo, que a veces su partido nos tiene acostumbrados a otras formas.
[Se ríe]
Le acusaban de no haber integrado las distintas sensibilidades del PSOE extremeño en su anterior Ejecutiva y las primarias fueron muy duras. ¿Hace autocrítica de su primera etapa?
Bueno, todos los cambios generan resistencias y esas segundas primarias vienen de esas resistencias. Pero también de errores propios. Probablemente no hice el esfuerzo necesario para integrar todas las sensibilidades. O no supe. O no pude hacerlo. Pero me quedo con lo fundamental: fruto de esa etapa hemos logrado integrar ahora todas las sensibilidades. Con el apoyo del 88% a la Ejecutiva, prácticamente todo el partido se siente representado.
Gallardo volvió a ganar las primarias del PSOE extremeño por segunda vez en nueve meses.
Sobre su entrada en la Asamblea de Extremadura a lo largo de la legislatura… ¿Influye en los tiempos el caso de David Sánchez?
No dejaría la Diputación sin que previamente termine ese procedimiento. Por una cuestión de saber y tener la seguridad de que nada de lo que he realizado a lo largo de mis años como presidente tiene ningún tipo de reproche penal. Pero estoy convencido de que quedará en nada. Es un tema que para mí es importante, pero también lo es acabar con todos los procesos orgánicos. No hay prisa.
Pero, por supuesto, el proceso judicial es uno de los elementos que determina mi incorporación a la Asamblea. No quiero que nadie pueda pensar que salto a la Asamblea por conseguir un posible aforamiento. Pero insisto en lo que vengo diciendo desde hace mucho tiempo: quien nada ha hecho, nada teme. Y yo estoy muy tranquilo.
Ha pedido el archivo de la causa y la jueza no lo ha concedido.
Sí, se ha pedido. Pero la jueza lo ha rechazado porque entiende que hay más diligencias que realizar. Pero bueno, absoluta normalidad. Al final, ni siquiera mi defensa consideraba que había que pedir ese archivo, pero como nos daba cinco días para poder pedirlo, se pidió. En cualquier caso, la jueza dice ahora que hasta que no se desarrollen esas nuevas diligencias no ha lugar al sobreseimiento.
Parece que la jueza se está interesando por la contratación de Luis María Carrero Pérez en la Diputación de Badajoz después de que este escribiera un correo a David Sánchez. ¿Puede aportar un poco de luz a ese asunto?
Empiezo a tener la sensación de que vamos de un sitio para otro. Aquellos elementos que se plantearon en la denuncia de Manos Limpias parece que se han caído y parece que hemos encontrado otros nuevos. No sé si en el ámbito de nuestra legislación es lo correcto. Pero bueno, confío en la Justicia y tengo la tranquilidad de que nada hice.
Con relación a lo de Luis Carrero… es un funcionario público. No se ha contratado a nadie. Está en una comisión de servicio, porque se necesitaba de apoyo para la corporación provincial y podía ser un perfil bueno. No hubo más candidatos y ahí está. Cuando se habla de la contratación parece que se crea una plaza para una persona, pero en realidad se está hablando de un funcionario público que cambia de administración.
Además, ese funcionario ni siquiera es trabajador de Moncloa. Su puesto principal está en la Junta de Extremadura.
"Es una causa general contra el presidente del Gobierno, no tengo ninguna duda"
Usted está en este proceso por una acusación popular. ¿Está de acuerdo en limitar esta fórmula, como propone el PSOE? Su partido la ha ejercido en numerosas ocasiones.
Lo primero que uno tiene que hacer es abstraerse de situaciones personales. Porque aquel que vive con tanta dureza la pena del telediario, sabiendo que es inocente, puede estar condicionado. Al margen de eso, creo que la modificación va en la línea correcta, aunque limitaría las posibilidades de mi propio partido para presentar acciones de acusación popular.
Lo que no puede ocurrir es que un procedimiento judicial se convierta en un procedimiento político, que es lo que nos ocurre con respecto al caso de la Diputación de Badajoz. Lo que se busca no es la verdad, se busca acabar con el prestigio de las personas y de las instituciones gobernadas por un signo contrario.
Es muy significativo que en el caso que nos ocupa haya seis acusaciones particulares de las cuales dos son partidos políticos, y que vengan acompañadas de esas organizaciones que todos conocemos y que sabemos cuáles son sus motivaciones. No hay una motivación de conocer la verdad, sino una motivación clara de desprestigiar al adversario político. Estoy convencido de que lo que estamos viviendo en Badajoz viene como consecuencia de una causa general contra el presidente del Gobierno. No tengo ninguna duda.
De todas formas, sorprenden el momento que ha elegido el PSOE para presentar esa proposición de ley. Si prospera, permitiría archivar los casos de David Sánchez y Begoña Gómez.
En cuestiones jurídicas de la propia norma no voy a entrar. Sólo voy a hablar de lo que conozco. ¿Es pertinente por las causas que se están produciendo? Pues sí, claro que sí. Estamos viendo como se quieren socavar los cimientos propios de la democracia a base de querellas, aunque sean nacidas de denuncias falsas que previamente se han fabricado con noticias falsas, detrás de las cuales a veces ni siquiera hay verdaderos medios.
Le puedo asegurar que es así en este caso que nos ocupa. Se fabricó todo con publicaciones falsas en las que se basó la denuncia. Y ahora nos hemos enterado de que esos pseudomedios los ha alimentado, con dinero público, la Junta de Extremadura gobernada por el PP.
Volviendo a la política extremeña, parece que había pactado unos Presupuestos para 2025 con Guardiola, pero saltó por los aires. ¿Qué pasó?
Eso habría que preguntárselo a la presidenta. Es el ejemplo más claro de la incapacidad para gobernar esta Región. Los Presupuestos estaban pactados en sus líneas básicas para que el PSOE los dejara pasar y, 24 horas antes del inicio del debate y de la aprobación, la presidenta hace una petición que sabía que los socialistas no podíamos aceptar: que renunciáramos a todas las enmiendas que se habían presentado en tiempo y forma. Eran más de 700.
Yo creo que, coincidiendo con el tiempo en el que se produce, lo que hay detrás es realmente una orden a la señora Guardiola para que no se rompa el discurso de la política nacional del PP.
Creo que el PSOE había sido especialmente generoso porque nos preocupa y nos ocupa Extremadura, y habíamos decidido sacrificar gran parte de aquello que pensamos con el objetivo de alcanzar un acuerdo que fuera bueno para Extremadura. Pero el PP decidió 24 horas antes sacrificar Extremadura en favor de sus políticas nacionales.
Gallardo se ha convertido en uno de los barones críticos del PSOE al posicionarse contra la financiación singular de Cataluña.
¿Hay posibilidad de volver a llegar a un pacto?
Depende de si Guardiola está dispuesta a presentar unos nuevos presupuestos, que parece que no, porque así me lo dijo personalmente. Hemos pasado de una presidenta que en el ámbito privado me agradece la posición de mi partido de corresponsabilidad a que, en el ámbito público, hable de cuestiones que tratan de salvar su propia incapacidad. Pero los socialistas siempre vamos a estar para dar estabilidad a Extremadura.
¿Se puede gobernar sin Presupuestos…?
Si aplicamos la doctrina que el PP ha venido defendiendo a lo largo de este tiempo, diciendo que Sánchez debería convocar elecciones porque no puede estar sin Presupuestos, pues Guardiola tendría que hacer lo mismo. Durante un tiempo ellos mismos se lanzaron a la posibilidad de que si no había Presupuestos para 2025 se convocarían elecciones.
La estabilidad de Extremadura no está garantizada sin Presupuestos y, lo que es peor, las políticas de crecimiento para Extremadura se van a ver frenadas como consecuencia de la inexistencia de Presupuestos. Por lo tanto, yo creo que lo único que cabe en este caso es que sean corresponsables con aquello que dicen.
Extremadura necesita proyectos para atraer inversiones, mayor financiación en diversas líneas, incluidos los servicios públicos. ¿Cree que el Gobierno central está desatendiendo algunas regiones para priorizar otras como Cataluña?
No lo creo, en absoluto. Y si lo creyera, lo diría alto y claro. Porque cuando se ha tratado de defender los intereses de algo, siempre hemos puesto como primera opción a la Región. Pero nunca antes se había invertido tanto en materia ferroviaria como con este Gobierno. Y eso son números y realidades.
Eso no significa que estemos satisfechos, porque mientras no haya una infraestructura que nos iguale al resto de España, seguiremos exigiendo a este Gobierno o al que venga justicia social. Queremos que nos ofrezcan las mismas oportunidades que al resto para poder competir en igualdad de condiciones.
"No estamos igualados al resto de España y exigimos a este Gobierno las mismas oportunidades para competir en igualdad de condiciones"
Cuando Extremadura cuente con las mismas infraestructuras que otras comunidades, podremos hablar de si somos más listos o más torpes que el resto. Porque cuando se está en desigualdad, difícilmente podremos alcanzar las mismas metas. Diría, incluso, que nuestro talento es mayor porque tenemos que hacer un sobreesfuerzo para vivir en condiciones de igualdad y dignidad. Hay que hacer un esfuerzo, mayor si cabe, para que regiones como la nuestra tengan una discriminación positiva, no sólo en infraestructuras, sino también en el proceso de industrialización.
¿Esas peticiones son compatibles con la financiación singular de Cataluña? La Ejecutiva del PSOE extremeño fue de las primeras en posicionarse en contra.
Ahí está la clave de nuestra credibilidad. Cuando hemos entendido que algo podía quebrar la justicia social o la redistribución de la riqueza, hemos alzado la voz. Creemos en un Estado fuerte que pueda redistribuir esa riqueza y que alcance a aquel que la necesita realmente. Yo creo en las singularidades de los territorios.
Mi comunidad es muy singular porque tiene muchos kilómetros cuadrados, pero muy poca población y muy dispersa. Esto encarece los servicios básicos, a los que tenemos derecho como ciudadanos, en comparación con otras comunidades como Madrid, que tiene a la población muy concentrada.
Y eso quedó plasmado en la ponencia marco del Congreso Federal del PSOE. Hicimos un gran trabajo, no sólo Extremadura, sino también Castilla y León, Castilla-La Mancha e incluso Aragón, para defender el sistema de financiación basándonos en esos principios de redistribución de la riqueza.
¿Pero eso cómo se hace? Si los recursos son limitados, ¿cómo se puede dar más a uno sin tener que quitarle a otro? Eso aún no se ha explicado bien.
Los recursos siempre son finitos, sí. Lo que hay que priorizar son los derechos que los ciudadanos tenemos. No tributan los territorios, tributan las personas. Y cada territorio ofrece unas cosas al conjunto. Extremadura ofrece, por ejemplo, energía para que otras comunidades, como la de Madrid, puedan funcionar. Si no hubiera energía de Extremadura, le garantizo que Madrid no podría ser la locomotora que es desde el punto de vista económico.
Y como los recursos son finitos, por eso hay que disponer de ellos para garantizar los servicios públicos, la sanidad, la educación, la dependencia… eso es lo que nos hace, en definitiva, ser iguales independientemente del lugar donde hayamos decidido vivir.
Quería preguntarle por una cuestión de actualidad. Sánchez dijo que no trocearía el decreto ómnibus y que no se tramitaría la PNL de la cuestión de confianza. Al final, ha sido todo lo contario. ¿Cree que su partido depende demasiado de Junts?
Bueno, cuando un Gobierno está en minoría, lo que tiene que hacer es hablar mucho y negociar mucho. Es el principio básico de la política y, en minoría, es una obligación. En ese sentido, yo me quedo con lo positivo: con el desbloqueo de un decreto que va a posibilitar que en mi Región 242.000 pensionistas puedan revalorizar su pensión, que 74.000 empleados puedan tener un SMI incrementado, que 72.000 personas que cobran la renta básica puedan disponer de mayores ingresos y que los jóvenes puedan disponer del transporte gratuito.
En ese ejercicio de corresponsabilidad, la oposición también tiene que hacer un esfuerzo si realmente cree en su país. No se trata de decir que no a todo porque se quiere echar al Gobierno de España. Votando no al decreto, lo que hicieron el PP, Junts y Vox fue decirle a 18 millones de pensionistas que no crecía su pensión. Lo lamentable no es haber llegado hasta aquí, sino que ahora el PP, habiendo establecido líneas rojas, lo vaya a aprobar. ¿De qué ha servido que votaran que no?
Gallardo está investigado en el caso del hermano del presidente del Gobierno.
De todas formas, a veces se pone el foco en el PP, que es oposición, y se deja de lado a Junts, que es socio de investidura y también votó en contra.
Lo sé, lo sé. Antes he dicho PP, Junts y Vox. Los tres son responsables. Lo que pasa es que a los partidos de Estado, y todavía considero al PP un partido de Estado, deberían mirar por el interés del Estado, por el interés de los ciudadanos. De Junts no espero que mire por el Estado, porque no es un partido de Estado, es un partido nacionalista que va a su interés e intenta defenderlo, bien o mal.
Pero el PP defiende mal los intereses de España cuando va contra los españoles y las españolas, y es un grave error. No se puede poner en riesgo el bienestar de los ciudadanos por ir en contra de un Gobierno.
Antes de terminar, le tengo que preguntar por otra de las noticias de la semana: ¿Qué sensación le produce un fiscal general del Estado yendo a declarar al Supremo como investigado?
Como tengo tan fresco el tener que declarar yo por cuestiones que creo que son absolutamente injustificadas, puedo decir que nos estamos fijando más en el fiscal general que en el que supuestamente cometió el delito, la pareja de Ayuso. De todas formas, tengo confianza absoluta en la Justicia y que sea la Justicia la que dilucide si hay responsabilidades. En cualquier caso, no nos debería sorprender que alguien vaya a un juzgado para esclarecer un hecho.