Exteriores sustituye al embajador en Venezuela mientras Borrell busca negociar con Maduro

La ministra de Exteriores, Arancha González Laya, ha decidido sustituir al embajador español en Venezuela, Jesús Silva, justo en el momento en el que el régimen de Nicolás Maduro presiona para el reconocimiento internacional de unas elecciones legislativas, el próximo 6 de diciembre, que la oposición democrática rechaza por "la falta de garantías democráticas".

Hay que recordar que Silva tiene alojado al líder opositor Leopoldo López en su residencia personal en Caracas desde que el año pasado, López escapara de su arresto domiciliario de la mano del presidente encargado del país, Juan Guaidó, en la llamada -y fracasada- Operación Libertad. Fuentes diplomáticas confirman a este diario que Exteriores le ha dado garantías al líder opositor Leopoldo López de que "todo seguirá igual y podrá seguro residiendo en las instalaciones".

Aquella operación, como informó este periódico, contaba con el apoyo de Estados Unidos y Rusia para hacer salir a Maduro y sus gerifaltes del país e iniciar un proceso democrático en el país caribeño. Finalmente, los aliados de los demócratas dentro del Ejército y servicios secretos venezolanos se echaron atrás.

Este periódico ha confirmado la noticia de la destitución en contacto con portavoces del departamento de González Laya, que han atribuido la salida de Silva de su puesto a "una renovación de embajadores en la región que, en su mayor parte, ya habían cumplido el plazo". Exteriores aclara que junto a Silva, también serán relevados los jefes de las legaciones en Ecuador, Cuba, Jamaica, El Salvador y Colombia.

La decisión, en todo caso, se encuadra en la reciente polémica suscitada por el envío por parte de Josep Borrell, Alto Representante de la UE, de una delegación a Caracas para negociar con el régimen chavista un retraso en la fecha de las elecciones, supuestamente, para fomentar el diálogo entre el Gobierno y la oposición.

Esa misión no ha sido informada oficialmente ni comunicada a los gobiernos de los 27. La decisión de Borrell ha provocado la reacción del Partido Popular Europeo. Los más altos dirigentes del grupo popular en la Eurocámara han enviado una carta al jefe de la diplomacia europea en protesta por su iniciativa y recordándole que el interlocutor de la UE en el país "es el presidente encargado Guaidó".

La misiva la firman, entre otros, el presidente del grupo, el alemán Manfred Weber, el vicepresidente Esteban González Pons, la jefa de la delegación española, Dolors Montserrat, y Leopoldo López Gol, eurodiputado y padre del líder opositor perseguido por Maduro.

Exteriores, en todo caso, rehúye enmarcar el relevo de Silva en un giro en la posición española -o europea- respecto a Venezuela, como sugieren los líderes del PPE en su carta. En ella, incluso comparan la situación con la posibilidad de que "la Unión mandará una misión a negociar con Lukashenko de espaldas a la oposición bielorrusa".

Cabe recordar que, en una entrevista con este periódico la semana pasada, López Gil preguntaba expresamente a González Laya y a Borrell "si aceptan unas medio elecciones o una medio dictadura", para sentenciar que "o se es demócrata o se es tirano".