Las ciudades castellano-manchegas de Albacete, Cuenca y Guadalajara estarán este viernes, 25 de agosto, en riesgo por calor y podrán llegar a alcanzar hasta 36ºC.

Además, otras 10 provincias y las Islas Canarias estarán este viernes 25 de agosto en riesgo por el calor, cuando las temperaturas continuarán significativamente altas y los niveles de avisos serán naranjas en Córdoba, donde se alcanzarán los 40ºC, y en Gran Canaria, que llegará a los 37ºC, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

El resto de provincias estarán en riesgo amarillo y las temperaturas oscilarán entre los 30ºC y 39ºC. Jaén (39ºC), Granada, Málaga y Sevilla (38ºC); Teruel y Zaragoza (37ºC); Fuerteventura, Tenerife La Gomera, Lanzarote y La Palma (34ºC); Madrid, Navarra y La Rioja (36ºC).

Con estos valores, los niveles se mantendrán por encima de los normales en Canarias y en zonas de Navarra y del interior de la mitad sureste peninsular.

En cuanto a las lluvias, habrá probabilidad de tormentas localmente fuertes en el interior del tercio oriental peninsular y entorno del alto Ebro, por lo que la provincia de Zaragoza también estará en riesgo.

En el noroeste de Galicia y Cantábrico occidental se esperan cielos en general nubosos con posibilidad de alguna lluvia o llovizna ocasional, e intervalos nubosos matinales en puntos del litoral mediterráneo.

A partir del mediodía se formará nubosidad de evolución en zonas del interior del tercio oriental peninsular y entorno del alto Ebro, con probabilidad de chubascos o tormentas dispersos, localmente fuertes.

En el resto del país se esperan nubes medias y altas, salvo en Canarias donde estará poco nuboso.

El viento soplará de componente norte en Canarias, este en el área mediterránea y oeste o sur en el resto, siendo más intenso en horas centrales en el interior peninsular y con probables rachas fuertes en zonas de tormenta.

Como ya ha alertado la AEMET, a partir de este sábado la entrada de una frente procedente del Atlántico dejará chubascos fuertes y granizos por el interior peninsular y provocará un descenso drástico de las temperaturas.