El camino del RCS está siendo lento, suponemos que también seguro. Esta nueva mensajería lleva un tiempo pujando por tener su espacio en nuestros smartphones, y poco a poco lo está consiguiendo. Promete convertirse en el estándar dentro de Android para un SMS que está camino del retiro. Bazas tiene, soporte por parte de las empresas también. Poco a poco.

La mensajería RCS está incluida en la aplicación de mensajes de Google y es compatible con un grupo creciente de operadoras. Una buena parte de las marcas apoyan el estándar, algunas como Samsung y Huawei (Apple o Xiaomi se quedan fuera). También operadoras como Vodafone, Orange o Telefónica. Ahora solo falta que otras empresas también apoyen este sistema de intercambio de mensajes: Google permite ya que las empresas lo utilicen.

Podremos recibir un RCS con el billete para subir al avión, los detalles de nuestro último pedido…

La idea detrás del estándar RCS es que no solo se permita el intercambio de 16o caracteres, como hace el SMS, sino que nuestro número de móvil acceda directamente a la mensajería de la operadora con las mismas posibilidades que aplicaciones como WhatsApp, Telegram o Messenger. Dado que sabemos el número de móvil de un contacto, podremos mandarle una foto, un archivo, un texto largo… sin necesidad de que ambos tengamos la misma aplicación de mensajería.

Con el nuevo movimiento de Google, el de abrirle la puerta a las empresas que deseen utilizar la mensajería RCS, dichas empresas tendrían una manera mucho más completa de comunicarse con sus clientes. Dado que la mensajería instantánea le ha ganado la batalla al SMS, ¿por qué no recuperar la hegemonía integrando las funciones de las apps en los mensajes nativos? De esta manera la empresa que gestiona el envío de nuestro pedido podría enviarnos la factura del mismo en una foto y utilizando el sistema RCS. Un sistema que sería nativo de la operadora y de nuestro móvil.

Son pocas las empresas que han empezado aprobar los mensajes RCS. Algunas de las que ya están son Booking.com, Subway o DHL, por ejemplo; y de momento en Estados Unidos (algunas también en México, como en el caso de DHL). Google asegura que irá expandiendo esta mensajería a todo el mundo, también que aumentará los acuerdos con empresas, operadoras y fabricantes.