El Museo del Prado será el escenario en el que la bailaora y coreógrafa Patricia Guerrero (Granada, 1990), Premio Nacional de Danza 2021, dará el pistoletazo de salida a una nueva edición de Ellas Crean, que este año tiene como referente la memoria tanto en lo que se refiere a la inspiración como al compromiso con el futuro del arte.

Guerrero recoge el testigo con un montaje que, junto a la viola da gamba de Fahmi Alqhai, muestra dos fragmentos “profundos y de trance” de Paraíso perdido, obra que ya ha podido verse en escenarios como el Auditorio Nacional.

“Visito danzas antiguas, de los siglos XV y XVI, para traerlas a la actualidad”. Patricia Guerrero

En ambas piezas están involucrados dos pecados capitales: la envidia con una passacaglia de Biber y la ira con El fandango de Santiago de Murcia. Todo, a través de una puesta en escena muy sobria en la que Guerrero, ataviada con un vestido negro, pone “el punto de duelo íntimo” con el que intentará conectar con el público. El suelo, dorado, rematará visualmente la propuesta que la coreógrafa llevará este domingo, 6, a las dependencias del Museo del Prado.

“Digamos que visito varias danzas antiguas –reconoce a El Cultural–. Aparecen algunos movimientos de bailes de los siglos XV y XVI. La danza de los negros, los bailes españoles e incluso bailes de Palacio. Todo esto va desapareciendo y la música se transforma y llega a una estilización en la que no tiene cabida la danza. Lo que hacemos es llevar la interpretación de estas piezas al movimiento mío más actual”.

La música del pueblo

Es la Sevilla de 1600, donde las fiestas del pueblo, sus cantes y bailes callejeros, seducían a las clases pudientes, iniciativa muy censurada por los moralistas de la época. Entre la aristocracia se pusieron de moda las folías, canarios, chaconas o la obscena zarabanda, muchas de ellas procedentes del continente americano.

Son las danzas, los ritmos, los movimientos, que inspiran Fragmentos de paraíso, un patrimonio que, según Guerrero, está lleno de energía, fuerza y actualidad: “Es una apuesta de un nivel muy alto tanto en lo interpretativo como en lo técnico con el que solo puedes llegar con músicos como Fahmi”.

El violagambista sevillano es una pieza vital en estos Fragmentos que Guerrero exhibe como un privilegio: “Ya lo es interpretar cualquiera de esas piezas por separado pero dar forma a un espectáculo de principio a fin con una temática en la que caminamos por Marizápalos, Marionas y la Chaconne de Bach es un auténtico trance”. 

Las raíces flamencas de Guerrero no pueden ocultarse. Son muy profundas y están presentes en esa “memoria” que Ellas Crean ha elegido como línea maestra de esta XVIII edición, que recordará, ya en el apartado de "compromiso", a la escritora Almudena Grandes.

“El artista evoluciona individualmente. Hay algunos que tiran hacia un lugar concreto y otros que van en dirección contraria. Mi danza va hacia donde le apetece estar en cada momento y eso me gusta, porque acompaña mi evolución personal. Ahora mismo estoy camino de mi próxima entrega, Deliranza, una pieza cargada de surrealismo, tiempo y belleza que se estrenará en junio en Francia y en julio en el Festival de Granada”, explica la coreógrafa sobre su situación actual, sobre sus proyectos futuros  y sobre su presencia en Ellas Crean, certamen organizado por el Ministerio de Igualdad que reunirá también las coreografías de Leonor Leal, Sara Calero, Taiat Dansa, Paula Quintana, Paloma Hurtado, Léonor Zurflüh, Lucía Montes & Mado Dallery y la chipriota Evie Demetriou.