La artista Eva Lootz ante su obra, creada para CNIO Arte en 2018. Foto: Amparo Garrido/CNIO

La artista Eva Lootz ante su obra, creada para CNIO Arte en 2018. Foto: Amparo Garrido/CNIO

Ciencia

Arte y ciencia, belleza y verdad, se exhiben juntos en Nueva York

El Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, el Instituto Cervantes y la Fundación Banco Santander muestran los trabajos que CNIO Arte ha producido durante cinco años

2 febrero, 2023 02:10

Una selección de las obras de CNIO Arte llega al Instituto Cervantes de Nueva York a partir de este 2 de febrero. En el proyecto de la institución que dirige María Blasco, nacido hace cinco años, han colaborado los artistas Eva Lootz, Chema Madoz, Carmen Calvo, Daniel Canogar y Susana con Margarita Salas (fallecida en 2019), junto al físico cuántico Ignacio Cirac; el paleoantropólogo Juan Luis Arsuaga, la bióloga computacional Sarah Teichmann y el epidemiólogo Pedro Alonso.

El papel del azar

En las obras creadas para CNIO Arte, Eva Lootz reflexiona sobre los orígenes de la biología molecular y la manipulación genética; Chema Madoz remite al papel del azar en el destino inspirado por la física cuántica; Carmen Calvo fractura recuerdos, como quizás aquellos que aún hay en los cráneos de homínidos encontrados en Atapuerca; Daniel Canogar se inspira con el Big Data. El arte y la ciencia generan ideas y conocimiento universales, y este principio impulsa el salto de CNIO Arte a Nueva York.

Un fértil diálogo

Iniciativa pionera lanzada con el apoyo de la Fundación Banco Santander (institución  que colabora también en la muestra neoyorquina), cada año, desde 2018, CNIO Arte pone en contacto a investigadores y artistas de primera fila internacional, para que los creadores puedan generar una obra inspirada en la ciencia. La artista Amparo Garrido ha sido la comisaria de CNIO Arte y Maria Blasco, la directora ejecutiva.

Para el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, cuando se unen las artes y las ciencias se acercan más que nunca a la verdad: “Ese escalofrío que alumbra y nos devuelve al camino de ser mejores seres humanos, aunando siempre, como quiso el poeta, belleza y verdad”.

Los temas del siglo XXI

Según Blasco, “científicos y artistas siempre hemos mirado de frente a lo desconocido, a la oscuridad y no hemos temido adentrarnos en ella con la mente abierta, para así poder ver más allá. Tanto el arte como la ciencia necesitan creatividad, libertad, reflexión, curiosidad. En el CNIO estos ingredientes se combinan para dar lugar a la mejor ciencia, y hemos querido poner las condiciones para que también se genere arte. Los grandes temas del siglo XXI de un modo u otro implican a la ciencia, y podrían ser inspiración del gran arte. Como escribió Susan Sontag en sus diarios, podría haber un nuevo movimiento artístico al mes solo con la lectura del Scientific American". Para la también investigadora, "se tipo de pensamiento creativo, innovador, desafiante es el que también alimenta el arte. Por eso, científicos y artistas podemos y debemos interactuar".

[Carmen Calvo: "Para dedicarte de pleno al arte tienes que estar sola"]

Interpretar el mundo

Para Rodrigo Echenique Gordillo, presidente de Fundación Banco Santander, la exposición “permite disfrutar de una selección de las obras creadas para CNIO Arte, iniciativa que buscar establecer conexiones entre científicos y artistas reconocidos, y que nace con un principio fundamental: tanto la ciencia como el arte son indispensables para entender e interpretar el mundo, y ambos pueden inspirarse mutuamente y dialogar”.

Exclusivo de nuestra especie

A Juan Luis Arsuaga, codirector de los yacimientos de Atapuerca, le hace feliz rodearse de la belleza, natural o creada: "Me estoy refiriendo a las artes plásticas, por supuesto, y en cierto sentido a la música. La danza y la escultura estarían cerca de mi concepto biológico del arte, porque se refieren sobre todo al cuerpo humano. Las artes escénicas y el cine incorporaran la voz y el pensamiento a la expresión corporal, y la literatura es pensamiento sin cuerpo". El arte, añade, aparece con nuestra especie y pertenece en exclusiva a nuestra especie: "Tiene que ver con nuestra capacidad de crear mundos imaginarios, pero compartidos, y vivir en ellos en comunidad. Son delirios consensuados, realidades inmateriales, pero sin las que no se concibe la vida humana. No hay, ni puede haber, humanidad sin arte".