El Museo Ludwig de Colonia presenta por vez primera "Los Alamos", una de las grandes series del fotógrafo norteamericano William Eggleston.

William Eggleston es uno de los grandes fotógrafos del siglo XX. La Documenta11 le dedicó el pasado año un espacio considerable en el marco de ese carácter tributario que caracterizó a la cita alemana. Eggleston mostró en Kassel una serie de imágenes, en color por supuesto, del sur de los Estados Unidos en los que representaba lugares comunes (aparcamientos, moteles de carretera, gasolineras, etc). A través de un uso excéntrico del color, estas imágenes perdían su aura convencional, convirtiéndose en visiones de motivos banales y efímeros transformados por el filtro poético del color.

Eggleston ha de ser considerado un gran maestro del cromatismo en fotografía. Nacido en Menphis en 1937, en 1976 el MoMa dedicaba una exposición individual de su obra. Hasta ahí todo bien. Pero cuando se vio que se trataba de un fotógrafo que utilizaba el color de una manera tan radical comenzaron a correr ríos de tinta. Hasta entonces, el método utilizado por el artista solo se había utilizado en ámbitos como la publicidad lo que provocó la ira de los críticos.

Es por esto que esta exposición del Ludwig Museum tiene, creo, gran interés. Presentadas aquí por vez primera, las imágenes de la serie "Los Alamos" fueron realizadas entre finales de los años sesenta y comienzos de los setenta con el mismo método de "teñido" que las que fueron expuestas en el templo neoyorquino. Eggleston habla siempre de su cámara "democrática", de una elección de sus motivos de modo ciertamente banal y azarosa. No es el motivo el protagonista de la obra sino la utilización del color a través del cual se obtienen significados paralelos, sensaciones adyacentes. En definitiva, un segundo nivel de interpretación de la obra. Un claro ejemplo es una de las obras más esclarecedoras de la serie, una imagen de una adolescente a la que solo se le ve desde el cuello hasta las rodillas. No debemos encontrar otra conclusión que la de que el resultado de la acción del color es el protagonista real de la imagen. En palabras del artista: "Me gusta la idea democrática de percibir. En realidad, nada es más o menos importante". No hay duda de que estas palabras caracterizan un modo muy particular de transcribir la realidad cotidiana. No es una cuestión de caracterizar el objeto, de describirlo, sino de extraer de él un sentimiento emotivo, gratificante y sumamente sugerente. "Los Alamos", serie inédita de William Eggleston, puede verse en Ludwig Museum de Colonia, Alemania, hasta el próximo 9 de junio.