Image: Las cartas de Goya a Zapater: ¿amor o amistad?

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Arte

Las cartas de Goya a Zapater: ¿amor o amistad?

5 diciembre, 2018 01:00

Carta de Goya a Martín Zapater. s/f (2 agosto 1794?)

Una misiva escrita por el pintor muestra una posible relación entre el pintor y su amigo Martín Zapater. El texto forma parte del Volumen II del Catálogo razonado, presentado por la Fundación Botín y el Museo del Prado.

"Con tu retrato delante me parece que tengo la dulzura de estar contigo, ay mío de mi alma no creyera que la amistad podía llegar al periodo que estoy experimentando", escribía Francisco de Goya en diciembre de 1790 a su amigo de la infancia Martín Zapater. Lo hacía de su puño y letra en una de las cartas que reúne el primer tomo del Catálogo razonado de los dibujos de Francisco Goya que esta mañana ha presentado el Museo Nacional del Prado.

Publicada en colaboración con la Fundación Botín, el presente tomo, denominado Volumen II, recopila los dibujos de la primera parte de la carrera de pintor aragonés, comprendida entre 1769 y los primeros años de la década de 1790. Entre las cartas que componen estos libros es su propia voz la que, ahora, pone fin a años y debates sobre su inclinación sexual. Al menos eso se deduce de las investigaciones llevadas a cabo durante esta nueva catalogación, que demuestran que el pintor sentía algo más que amor fraternal por su íntimo "amigo" Zapater.

"El mayor bien de cuantos llenan (mi) corazón, acabo de recibir la inapre(ciable) tuya; sí sí que me avivas mis sentidos con tus discretas y amistosas producciones", escribe el genio maño en esa misma carta de diciembre de 1790.

Casado desde 1773 con Josefa Bayeu, con quien tuvo seis hijos, de quienes solo sobrevivió el último, Francisco Javier, en este nuevo acercamiento a su vida personal, que en lo artístico ha permitido además descartar seis obras que se le habían atribuido al artista, Zapater era más bien un "amigo amoroso", en palabras de Manuela Mena, experta en la conservación e investigación de la obra de Goya. De hecho, al poco de regresar a Madrid de un encuentro junto a él, en noviembre de 1790, el pintor selló una de las cartas que le envió con un corazón en llamas en lugar de la tradicional cruz.

Estas misivas, que no habían sido localizadas hasta 2007, fecha en que salieron a la venta en Londres, muestran a un Goya más personal y centran el interés, aunque sin alejarse de su valor artístico, en el lado más sentimental y amoroso del genio. El proyecto, fruto de un convenio entre la Fundación Botín y el Museo Nacional del Prado, iniciado en 2014, con el objetivo de llevar a cabo el catálogo razonado de los dibujos de Goya: 1.000 imágenes en 5 volúmenes, se completará con la edición de cuatro tomos más y se acercará al público por medio de una exposición temporal que se celebrará en el Prado en noviembre de 2019, que complementará a su vez la que ya tuvo lugar en el Centro Botín en 2017.