Image: Rosina Gómez-Baeza

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El Cultural

Rosina Gómez-Baeza

"LABoral es un lugar para el fomento de la creatividad"

23 octubre, 2009 02:00

Rosina Gómez-Baeza. Foto: Elena De La Puente

LABoral abrió sus puertas en marzo de 2007, a pocos kilómetros de Gijón, y hoy es referente internacional en cuanto a new media art se refiere. Su directora, Rosina Goméz-Baeza, nos desvela las claves del éxito.

Acaba de volver de Copenhage donde ha participado en un encuentro europeo en torno a la innovación y su incorporación a la vida cotidiana. Pasa en Madrid menos de 24 horas para volver a su despacho asturiano. Y es que Rosina Gómez-Baeza (Gijón, 1942) no para. Laboratorios y centros de todo el mundo cuentan con ella para este tipo de reuniones: "Viajo mucho más ahora que cuando inauguramos el centro", confiesa. Y eso es porque ha logrado que LABoral ocupe un lugar destacado en el mundo de las nuevas tecnologías, trabajando con centros importantísimos en este terreno, como el ZKM de Karlsruhe, Alemania, y contando con la colaboración de expertos internacionales, como Christiane Paul, del Whitney de Nueva York. "Efectivamente, esto es significativo y alentador", nos dice. Y todo esto a pesar de que LABoral ha tenido que hacerse un hueco en la sociedad asturiana, poco familiarizada con estos nuevos lenguajes que se mueven entre el arte, el diseño, la producción industrial o la creación digital.

-¿Cómo ha acogido Asturias un centro como LABoral, con una programación en muchos casos tan experimental?
-Ha despertado enormes ilusiones y expectativas. Respecto al público, somos conscientes de que es más difícil que se sienta inicialmente atraído por las nuevas formas de la creación artística. El objetivo de LABoral es iniciar, de la mano de artistas, docentes, críticos, científicos, investigadores, informadores, escolares, jóvenes, y el ciudadano de a pie, un camino que conduce a la comprensión del pensamiento creativo de hoy, un lugar para el fomento de la creatividad.

Formar, investigar, producir
-¿Cómo valora estos casi tres años al frente del centro?
-Se han organizado exposiciones singulares e innovadoras en colaboración con reconocidos expertos nacionales e internacionales. También se ha cumplido nuestro compromiso con la formación experta, celebrando talleres para profesionales, impartidos por prestigiosos docentes, cuyos contenidos se centran en la utilización de las nuevas herramientas tecnológicas al servicio de la creación. La investigación se ha hecho realidad con Creatic, Laboratorio de Creatividad e Investigación Tecnológica, donde jóvenes investigadores desarrollan proyectos relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación en un entorno artístico. Como Centro de creación y de recursos, desde el primer día se ha producido obra, tanto de artistas asturianos, como nacionales y extranjeros...

-Pero las exposiciones son, en muchos casos complicadas, para las que el público necesita cierta preparación, con piezas cercanas a veces a la robótica, otras a la ciencia, al videojuego... ¿nota cierta reticencia por parte de algunos públicos?
-La especialización es necesaria puesto que existen muchos museos y centros en España y es conveniente presentar una oferta novedosa y que refleje las distintas posiciones, tanto artísticas como críticas. LABoral aspira a despertar el interés de las personas más próximas al mundo de la creación contemporánea, interesar a los artistas, teóricos, docentes y demás profesionales. Pero también queremos que estas minorías puedan crear vínculos con el público general, estableciendo diálogos enriquecedores para la sociedad en su conjunto. Creo que es una cuestión de tiempo y que, poco a poco, lograremos vencer cualquier reticencia.

-La educación es primordial: ¿cuál es su fuerte en este sentido? ¿A qué le dan mayor importancia en Laboral?
-LABoral brinda una oferta educativa única en Asturias y pionera en España. El programa educativo gira en torno a dos ejes fundamentales: hacer accesible a todos los públicos el arte más emergente ligado a la más actual cultura audiovisual, y el apoyo a la creación y su difusión por medio de un programa formativo experimental dirigido a los profesionales del ámbito artístico y disciplinas derivadas. Simultáneamente, el programa público actúa como apoyo a esos objetivos de LABoral, con el objetivo de reforzar los vínculos con el entorno inmediato.

-Al calor de LABoral, ¿han observado un mayor movimiento artístico en Asturias?
-Asturias es una región muy vital y cuenta con una actividad cultural proporcionalmente mucho mayor a su tamaño y esto, lógicamente, también se refleja en la actividad artística.

-Pronto empezará a funcionar el Centro Niemeyer en Avilés: ¿demasiado centro para una comunidad tan pequeña?
-Para la cultura siempre hay sitio y además los objetivos no son los mismos. Niemeyer tendrá un campo de actividad distinto al de LABoral.

-Entre los objetivos del Centro está el de convertirse en referente internacional y, a la vez, proyectar la joven creación asturiana: ¿cómo lograr lo primero sin abandonar lo segundo?
-El diálogo entre los creadores asturianos, nacionales e internacionales es primordial. LABoral se define como un espacio de diálogo entre arte, ciencia, sociedad, creación industrial y nuevas tecnologías. Ese diálogo está presente en todas y cada una de las actividades que programamos. Estamos trabajando en un modelo en el que el apoyo a los artistas y a la producción de obra es esencial. Ese diálogo, presente también en exposiciones, permite también a los asturianos ampliar horizontes y medirse en un entorno internacional que genera sinergias muy positivas.

Mirar hacia el mercado
-Antes de llegar a Gijón y de dirigir la I Bienal de Canarias, fue 20 años directora de ARCO: ¿echa de menos el mercado?
-Siempre, tanto ahora como en el pasado, el artista ha vivido de su trabajo. No se trata de echar en falta nada, sino de reconocer su importancia. La mitología nos dice que los dioses no aman a quienes miran hacia atrás. Ya sabemos lo que ocurre si uno mira hacia detrás…

-Usted también llegó a la feria madrileña en época de crisis y logró darle la vuelta a las cifras: ¿qué les recomienda hoy tanto a la directora como a las galerías participantes para capear el temporal?
-No soy quien para hacer recomendaciones pero, en mi vida y en mi trabajo, siempre tengo presente la filosofía que se desprenden de esa sentencia que el director de Art Basel Miami, Marc Spiegler, pronunciaba hace sólo unos meses refiriéndose a la crisis: "Es probablemente un mal momento para los trabajos mediocres".

-¿Su futuro inmediato sigue en el Norte?
-He procurado, en mi vida, no perder el Norte.