Fernando Alonso en el Gran Premio de Imola 2025

Fernando Alonso en el Gran Premio de Imola 2025 Reuters

F1

Aston Martin resucita en Imola: por qué es tan importante el paso adelante de Alonso pese a no haber sumado ningún punto

La escudería de Silverstone se reconcilia con su ambición tras meses de oscuridad, aunque la fortuna sigue esquiva a Fernando Alonso.

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El Gran Premio de Emilia-Romaña en Imola supuso para Aston Martin un soplo de aire fresco en una temporada hasta ahora plagada de frustraciones.

Pese a que el equipo británico se marchó sin puntos, el rendimiento mostrado a lo largo del fin de semana confirmó una recuperación técnica esperada desde hace meses.

Por primera vez desde comienzos de 2023, las mejoras introducidas funcionaron y permitieron a Fernando Alonso y Lance Stroll pelear, al menos por un día, en la zona noble de la parrilla.

Una nueva era

Lo más importante del fin de semana no estuvo en la tabla de resultados, sino en el origen y funcionamiento de las piezas nuevas que Aston Martin llevó a Imola.

Fue el primer paquete aerodinámico diseñado, desarrollado y validado íntegramente en las instalaciones del nuevo Campus Tecnológico de Silverstone: el túnel de viento, el simulador y los procesos de desarrollo han sido ejecutados por completo en la estructura renovada que Lawrence Stroll puso en marcha para revolucionar el proyecto.

Andy Cowell, director del equipo, lo resumió con claridad: "Hemos traído mejoras que nos han hecho más rápidos en todas las curvas de un circuito tan exigente como este".

Aunque no se logró convertir esa mejora en puntos, para la escudería este paso es el inicio real del proyecto ambicioso que desde hace dos años prometía dar el salto definitivo al grupo de cabeza.

El sábado en Imola devolvió a los aficionados del equipo verde una ilusión casi olvidada. Alonso clasificó en quinta posición, Stroll en octava, y por primera vez en la temporada ambos coches entraron en la Q3. Fue un soplo de esperanza tras semanas anclados en las últimas posiciones.

La estrategia fue arriesgada: usar tres juegos nuevos de neumáticos medios, más competitivos que los blandos C6 en este trazado, para maximizar el rendimiento en clasificación.

Pero esa decisión dejó muy limitada la estrategia en carrera, obligando a ambos pilotos a afrontar el domingo con neumáticos poco competitivos o ya muy usados.

VSC en el peor momento

Fernando Alonso había arrancado bien la carrera. Mantenía la quinta posición y seguía de cerca a Lando Norris. Sin embargo, una parada temprana y un coche de seguridad virtual (VSC) provocado por el abandono de Esteban Ocon destrozaron por completo el plan.

El asturiano paró antes de tiempo y el VSC permitió a sus rivales entrar en boxes "gratis", regresando a pista por delante con neumáticos más frescos.

"En 100 escenarios posibles, 99 nos daban puntos hoy. Tocó el único que no", lamentó el bicampeón del mundo. Alonso acabó la carrera undécimo tras una remontada en las últimas vueltas, pero sin recompensa tangible.

"Va a ser una tortura. ¡Soy el piloto con la peor suerte del pu** mundo!", gritó por radio durante el Gran Premio.

Paso firme

Aunque la frustración de Alonso fue evidente, el análisis técnico del fin de semana permite mirar con optimismo hacia adelante.

Aston Martin sigue lejos del ritmo de Red Bull, Ferrari, McLaren y Mercedes, y tampoco ha alcanzado aún a una sorprendente Williams que lidera la zona media, pero el paso adelante es real.

La distancia entre el monoplaza de la factoría de Silverstone y la cabeza se redujo al 0,9%, un dato que no se alcanzaba desde el final de 2023.

Recuperaron casi un segundo por vuelta respecto a Miami, y mejoraron especialmente en las curvas rápidas, algo que durante meses había sido una debilidad estructural del AMR25.

Andy Cowell y Fernando Alonso, durante la pretemporada de Fórmula 1 2025 en Baréin

Andy Cowell y Fernando Alonso, durante la pretemporada de Fórmula 1 2025 en Baréin Aston Martin

Una evolución medible

Aston Martin no ha cambiado radicalmente su concepto de monoplaza. Pero lo importante es que por fin hay correlación entre los datos del túnel de viento, el simulador y la pista.

Según Cowell, la calidad de los datos recogidos en Imola permitirá acelerar la siguiente fase de desarrollo, crucial para 2026, cuando entra en vigor un nuevo reglamento técnico que podría redefinir la jerarquía de la Fórmula 1.

La mejora fue especialmente evidente en el sector central del trazado, donde en carreras anteriores se perdía todo el ritmo respecto a los rivales.

En Imola, Alonso consiguió ganar tiempo en tramos clave como Aqua Minerale y Rivazza, señal de que el nuevo paquete aerodinámico está funcionando como se esperaba.

Aunque no hubo puntos, la información obtenida en este circuito clásico y técnico es oro puro para el equipo. Imola ha sido siempre un buen banco de pruebas por su trazado exigente.

Cowell confirmó que en Barcelona habrá una nueva actualización del coche, esta vez con la oportunidad de validar aún más profundamente el rendimiento en un circuito aún más representativo.

"Mónaco será una pista particular, todo dependerá de la clasificación. Pero en Barcelona sí podremos medir cuánto hemos mejorado realmente", explicó el jefe de Aston Martin, que se mostró convencido de que los resultados llegarán si el equipo sigue esta línea de desarrollo.

Con una parrilla tan ajustada como la de este 2025, cada décima vale oro. Y Aston Martin, pese a seguir lejos de los cuatro grandes, ha demostrado que puede empezar a recortar terreno si continúa en esta dirección.

A veces, no sumar puntos no significa haber fracasado. Y en Imola, Fernando Alonso y Aston Martin confirmaron que, por fin, están saliendo del túnel.