Pelé, con la camiseta del New York Cosmos. Reuters
El renacer del Cosmos 40 años después: un club que vio brillar a Pelé o Beckenbauer y busca volver a la élite en EEUU
El club histórico estadounidense regresará en 2026 a la USL League One lejos de Nueva York y jugando en el estadio Hinchliffe.
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El Cosmos vuelve a la vida. Tras décadas de nostalgia y silencio, el club más icónico del fútbol estadounidense prepara su regreso a la competición profesional. Será en marzo de 2026, cuando el Cosmos debute en la USL League One, la tercera división del país, con sede en el renovado estadio Hinchliffe de Paterson, New Jersey.
La noticia ha sacudido el panorama futbolístico de Estados Unidos. El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, y el alcalde de Paterson celebraron el anuncio como un triunfo colectivo. El regreso del Cosmos no solo implica la vuelta de un nombre legendario, sino también una apuesta por el desarrollo local y la identidad regional.
El estadio Hinchliffe, con capacidad para 7.800 espectadores, será el nuevo hogar del club. Renovado en 2023, el recinto se ha convertido en un símbolo de revitalización urbana y deportiva. Además, el proyecto incluye la creación de un equipo femenino y un museo dedicado a la historia del Cosmos, reforzando el compromiso con la comunidad y el legado del club.
La nueva etapa del Cosmos está impulsada por un grupo inversor que adquirió los derechos del club a Rocco Commisso, actual dueño de la Fiorentina. Entre los nuevos socios destaca Erik Stover, exejecutivo de los Red Bulls y del propio Cosmos en la era NASL, así como Giuseppe Rossi, exdelantero internacional italiano, que asumirá un rol clave en el área deportiva.
El objetivo es claro: devolver al Cosmos su mística y conectar con nuevas generaciones de aficionados. El club quiere ser un referente en el desarrollo juvenil y aprovechar el impulso de la USL, que avanza hacia un sistema de ascensos y descensos, algo inédito en el fútbol estadounidense.
El regreso del Cosmos llega en un momento clave para el fútbol en Estados Unidos. La USL busca consolidar un modelo más abierto y competitivo, y la presencia de una marca histórica como el Cosmos aporta prestigio y ambición al proyecto.
Leyendas y época dorada
Hablar del Cosmos es hablar de Pelé. El astro brasileño llegó a Nueva York en 1975, en una operación que revolucionó el fútbol mundial. Su fichaje no solo atrajo la atención de los medios, sino que convirtió al club en un fenómeno cultural y deportivo.
Pelé fue el primer gran embajador del fútbol en Estados Unidos y su presencia llenó estadios, atrajo patrocinadores y puso al Cosmos en el mapa global.
Pelé, durante su época en Cosmos. NYCOSMOS
Junto a a él, otras leyendas internacionales vistieron la camiseta del Cosmos. Franz Beckenbauer se unió al club en 1977 Su llegada reforzó la imagen de equipo galáctico y aportó liderazgo y calidad en el campo. Beckenbauer y Pelé compartieron vestuario y títulos, convirtiendo al Cosmos en el epicentro del fútbol mundial durante varios años.
El italiano Giorgio Chinaglia, el brasileño Carlos Alberto y el paraguayo Roberto Cabañas también forman parte de la historia dorada del club. Chinaglia fue el máximo goleador, mientras que Carlos Alberto, capitán de la selección brasileña campeona del mundo, aportó jerarquía y experiencia.
Caída y resurrección
Durante la segunda mitad de los años setenta, el Cosmos era sinónimo de espectáculo y glamour. El club ganó cinco campeonatos de la NASL (1972, 1977, 1978, 1980 y 1982) y se convirtió en un fenómeno mediático, reuniendo a futbolistas legendarios y celebridades de la música y el cine.
Sin embargo, el esplendor no fue eterno. Tras la retirada de Pelé en 1977 y la salida de Beckenbauer en 1980, el club comenzó a perder relevancia. La venta del equipo por parte de Warner en 1983 y la desaparición de la NASL en 1985 supusieron el final de una época dorada.
Durante décadas, el nombre del Cosmos evocó nostalgia y grandeza, pero también la fragilidad del fútbol profesional en el país. En 2010, el club fue relanzado y volvió a competir en la NASL, logrando algunos títulos y recuperando parte de su mística.
Chinaglia, Pelé y Beckenbauer con Cosmos. REUTERS
Sin embargo, la inestabilidad de las ligas menores y los problemas económicos impidieron consolidar el proyecto.
En 2017, la franquicia pasó a manos de Rocco Commisso, pero el equipo apenas disputó algunos partidos oficiales durante la pandemia de 2020. Desde entonces, el Cosmos fue más una marca histórica que un club activo, hasta que un nuevo grupo inversor apostó por su resurrección en 2026.
El regreso del Cosmos busca rendir homenaje a su historia, recuperando el logo clásico y apostando por el desarrollo juvenil, el fútbol femenino y la conexión con la comunidad local. Hoy, cuarenta años después de su época dorada, el club sueña con volver a ser relevante y escribir un nuevo capítulo en la élite del fútbol estadounidense.
