Mbappé, la última pieza del puzle de Xabi Alonso: un encaje en la doble punta y los retos para lograr la "calidad colectiva"

"Necesitamos la calidad colectiva para que los jugadores se beneficien". Esta frase ha sido una de las más repetidas por Xabi Alonso desde su llegada al Real Madrid. La idea de crecer como equipo para potenciar las individualidades.

Y es que calidad no le falta al conjunto blanco. Tampoco le faltaba el año pasado, pero lo colectivo se quedó muy lejos y los futbolistas no pudieron brillar en su máximo esplendor. Alonso ha traído una savia nueva. Conceptos novedosos para intentar darle un giro de tuerca al equipo.

De momento la muestra es únicamente de tres partidos, pero poco a poco están aflorando algunas de esas ideas del tolosarra. Un equipo más junto en sus líneas, dejando un único jugador en banda, haciendo uso de los tres centrales y con una doble punta en la que Gonzalo está teniendo un papel importante.

Gonzalo García celebra su gol contra el Salzburgo en el Mundial de Clubes. REUTERS

El delantero de La Fábrica está aportando mucho más que goles (lleva dos en tres partidos). Presiona y muerde en la salida de balón rival, sabe jugar de espaldas y caer en los apoyos, facilita la tarea a Vinicius... Unos intangibles que no se vieron el curso pasado con Ancelotti a los mandos.

Sin embargo, Xabi Alonso afronta ahora una nueva situación. Mbappé, que se ha perdido la fase de grupos por culpa de una gastroenteritis aguda, se estrenará a las órdenes de un nuevo técnico que deberá encontrarle su mejor hábitat.

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El rol de Kylian

Quizá, esa sea una de las tareas más importantes de la temporada. El Real Madrid tiene que potenciar y crear el mejor Mbappé. Su primer curso de blanco fue por lo menos notable, especialmente en el último tramo, pero todavía existe margen de mejora.

Eso sí, deberá cambiar su rol. Con Ancelotti, Mbappé ocupaba la punta de lanza del ataque y estaba prácticamente exento del trabajo defensivo del equipo. No tenía la 'obligación' de defender, algo que parece innegociable en la idea de Alonso.

Mbappé, junto a Vinicius durante un entrenamiento en el Mundial de Clubes. REUTERS

El entrenador vasco aseguró tras la victoria ante el Salzburgo que los once futbolistas que estén sobre el césped deberán trabajar sin balón. Una de las bases del concepto de "lograr la calidad colectiva" para potenciar a los individuos.

Xabi Alonso deberá convencer a Mbappé de los beneficios que puede suponer su implicación en defensa. Hacerle ver que será la primera piedra para construir un ecosistema con y sin balón que guíe al Real Madrid a ser de nuevo ultra competitivo.

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La conexión con Vinicius

Sin embargo, el papel de Mbappé irá mucho más allá de su trabajo sin balón. Será fundamental también para Xabi Alonso lograr que el galo encuentre una sinergia natural con Vinicius. Algo que no se vio en exceso esta última campaña.

La conexión entre los dos cracks del Real Madrid será vital. Que no ocupen los mismos espacios y se pisen, que se encuentren prácticamente de forma automática, que mejoren en la asociación... varios factores que se pueden arreglar desde la pizarra.

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Porque una vez se haga el orden, todo será mucho más fácil. Tanto Vinicius como Mbappé poseen una calidad futbolística innata. Si logran congeniar se potenciarán todavía más y tendrán todos los ingredientes para formar una de las mejores duplas del planeta fútbol.

Ante la Juventus puede llegar la primera prueba. Queda por ver si Mbappé está listo para ser titular, pero sí que parece seguro que tendrá minutos ante los transalpinos. Será una prueba de contacto entre el galo y Xabi Alonso, quien ya le habrá dado muchas indicaciones en los entrenamientos.