La locura en la celebración en Canaletas: los aficionados del Barça se echan a las calles para festejar la Copa del Rey

El Barça ha vuelto a recuperar su trono en la Copa del Rey después de cuatro años tras imponerse al Real Madrid en una final épica que se decidió en la segunda parte de la prórroga con el gol de Jules Koundé. Con el pitido final de De Burgos Bengoetxea, la euforia se desató sobre el terreno de juego de La Cartuja y también en las calles de Barcelona.

La consecución del segundo título de la temporada tras la Supercopa de España -ganada precisamente ante el Real Madrid- provocó que los aficionados azulgranas acudieran a la fuente de Canaletas para celebrar el triunfo. Más de un centenar de personas se concentraron en unos de los lugares más emblemáticos de la ciudad en lo que fue una noche larga en la ciudad condal.

Después de que Ter Stegen y Araujo, capitanes del Barça, levantaran el título de la Copa del Rey al cielo de Sevilla, inmediatamente Canaletas no tardó en llenarse recordando las etapas de mayor éxito del equipo culé. Tras unos años complicados, con Hansi Flick bajo la dirección técnica, los azulgranas han puesto la directa hacia la consecución del triplete.

La celebración se llevó a cabo sin ningún tipo de incidente, por lo que no se precisó de la actuación policial. Los aficionados celebraron eufóricos el título número 32 de la Copa del Rey, agrandando el palmarés de un club que ya de por sí es el más laureado de la competición.

A lo largo de su historia, los azulgranas han logrado levantar el título el 74% de las veces que ha llegado a la final. La última la perdió en la temporada 2018-19 ante el Valencia de Marcelino García Toral, mientras que el último partido contra el Real Madrid en la final copera se produjo en 2014 y terminó con victoria para los de Ancelotti.

[De Burgos y González Fuertes acertaron en el partido lo que erraron ante la prensa: el penalti que pudo ser un error histórico]

Esta edición de la Copa del Rey, además, traía una novedad histórica: el club campeón se quedaría en propiedad con el trofeo original, tras la modificación anunciada por Rafael Louzán, presidente de la RFEF.

Hasta ahora, los clubes campeones debían devolver el trofeo tras unos meses y recibían una réplica, salvo que lograran tres títulos consecutivos o cinco alternos. Pero desde esta edición, el Barça, flamante vencedor, tendrá en su museo de manera definitiva el trofeo auténtico, una pieza que pasa a formar parte de su historia para siempre.

El objetivo de la RFEF es que se reconozca al campeón como se debe y que la entrega del trofeo de la Copa del Rey no sea un mero simbolismo, sino que sea algo real e importante al pasar a formar parte directamente del club ganador.