La salvaje cala virgen de agua cristalina que está en España: un paraíso natural sin chiringuitos ni cobertura

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La salvaje cala virgen de agua cristalina que está en España: un paraíso natural sin chiringuitos ni cobertura

Ofrece una experiencia única para quienes buscan desconectar del mundo. 

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En la isla balear de Menorca, existe un rincón que parece ajeno al paso del tiempo y al turismo de masas:Cala Escorxada. Esta playa virgen, situada en la costa sur del municipio de Es Migjorn Gran, es uno de los secretos mejor guardados de España para quienes desean disfrutar del mar sin aglomeraciones, chiringuitos ni cobertura telefónica.

Para acceder a este paraje de aguas cristalinas y arena blanca no basta con aparcar cerca y extender la toalla. El acceso a Cala Escorxada es uno de los aspectos que la convierten en un lugar tan especial: solo se puede llegar caminando a través de rutas de senderismo que atraviesan bosques y acantilados, o en barco desde otras calas cercanas. Esta dificultad para acceder filtra a los visitantes y garantiza una experiencia más tranquila y respetuosa con el entorno natural.

Según se detalla en la web oficial de turismo de Menorca, Cala Escorxada está completamente libre de construcciones, bares o servicios. Tampoco hay cobertura móvil, lo que obliga al visitante a desconectar de forma literal. El silencio solo es interrumpido por el vaivén de las olas, el canto de las aves y el sonido de la brisa entre los pinos.

La ruta más habitual para llegar parte desde la playa de Santo Tomás, una caminata de unos 50 minutos que serpentea entre sombra y sol por la costa sur. A pesar del esfuerzo, muchos aseguran que el paisaje que espera al final del trayecto lo compensa con creces: una bahía escondida de aguas turquesas poco profundas, perfecta para nadar, hacer snorkel o simplemente relajarse lejos del ruido urbano.

Además, esta cala forma parte del Área Natural de Especial Interés (ANEI), por lo que cuenta con protección ambiental. Esto significa que está prohibido acampar, hacer fuego o alterar el entorno de cualquier forma. Se recomienda llevar agua, algo de comida y, por supuesto, todo lo necesario para regresar con los residuos generados.

Este tipo de enclaves refuerzan la identidad de Menorca como reserva de la biosfera y destino de turismo sostenible. Esta cala es, sin duda, una joya para quienes buscan disfrutar de la naturaleza en estado puro.