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Reportajes gastronómicos
Art deCocinas, obras de arte contemporáneo convertidas en pintxos
Durante 2014, la ciudad de Vitoria-Gasteiz es la Capital de la Gastronomía. Con motivo de esta condición, en la capital alavesa se han celebrado numerosos eventos con la comida como elemento clave.
Pintxos de alta cocina en puestos callejeros a ritmo de swing en “Con dos fogones y a bailar“, trucos de magia que acaban en el plato en “Truco o Trapo” o los cuadros del museo de arte contemporáneo convertidos en pequeños y deliciosos bocados en “Art deCocinas” han sido las actividades promovidas por Josean Merino, chef del restaurante perretxiCo y mente inquieta al frente de urbaniCo, “un proyecto de compromiso local y aires urbanitas. La intención de aunar conceptos como gastronomía y swing, arte, magia, fotografía o cultura. La firme creencia de que lo… que se disfruta moviendo el bigote, siempre acaba mejor. Un festival gastronómico para morros finos a pie de calle y con indumentaria de batalla. Un programa lleno de eventos que sacan las mejores cocinas, bodegas, productos locales y cracks de todo tipo de disciplinas a la vía pública para saciar la curiosidad y el hambre de la parte más gastrópata e inquieta de Gasteiz (y de todos aquellos que se hagan eco del sarao que vamos a montar y del que esperamos te sientas parte)“. En definitiva, una apuesta por llevar la cocina de calidad a pie de calle y a todos los públicos en un proyecto cargado de optimismo y de buen rollo, de esos que ya sabéis que nos encantan en Cocinillas.
Por eso, cuando hace unos días nos llegó una invitación para asistir al evento “Art deCocinas“, para el que casi una veintena de chefs de reconocido prestigio han elaborado un pintxo inspirado en una obra pictórica o escultórica del museo Artium (Museo de Arte Contemporáneo de Vitoria-Gasteiz), nos faltó tiempo para meter la cámara en la mochila y poner rumbo a tierras alavesas con la intención de no perdernos ni un detalle.
Obras de arte, cocineros y pintxos
A lo largo del evento, los dieciocho chefs que han colaborado, divididos en tres grupos han reinterpretado seis de las obras de la colección del museo. Y no creáis que se lo han puesto fácil, pues la inspiración les tenía que llegar sí o sí de la obra que previamente les había sido asignada por la organización. De esta manera, para cada una de las seis obras de arte se han podido degustar tres interpretaciones diferentes de la mano de otros tantos chefs.
Por cuestiones de tiempo, solo hemos podido probar las creaciones de dos de los grupos, que son las que os mostramos a continuación. En algunos casos, los chefs han optado por crear pintxos totalmente nuevos y con una enorme similitud visual con la obra original, en otros, han preferido adaptar algún plato en el que ya habían trabajado con anterioridad. En ambos casos, ha sido muy interesante comprobar cómo una misma obra puede dar lugar a sabores tan diferentes en algunos casos.
Dista. Pintura de José Ramón Amondarain.
Tuvimos ocasión de probar la propuesta de Mikel Fiestras, chef del restaurante La Huerta de Vitoria-Gasteiz, que reflejaba a la perfección la estética de la obra mediante una mousse de nata y otra de fresas y grosellas salvajes en el pintxo dulce “Dulces pinceladas de fresa y nata”.
También probamos la propuesta de Íñigo Elorriaga, del restaurante Boroa de Amorebieta (Vizcaya), que nos deleitó con un “Volcán de tomate y remolacha con carabinero ligeramente marinado y ensalada micro”. Con una combinación de sabores muy acertada y visualmente muy atractivo.
Serie Pacífica En busca del continente más tranquilo del planeta. Pintura de Aldo Iacobelli.
Iñaki Moya, chef del restaurante Ikea de Vitoria-Gasteiz, nos sorprendió con un “Corte de bakalao con bizkaina y pil-pil de vainilla con cebollino”. Un plato que actualmente forma parte de la carta de su restaurante y que fue de mis favoritos.
Desde Donostia, Rubén Trincado del Mirador de Ulía nos propuso “La historia de la cabra, el tomate, el pepino, el ajo y las hierbas”, una ensalada en miniatura sobre una base de queso de cabra que evocaba las pequeñas islas en el cuadro.
Besarkada I. Escultura de Eduardo Chillida.
Desde Villabuena de Álava, Juan Carlos Ferrando del Hotel Viura, interpretó el abrazo de la escultura de Chillida como un “Pan brioche al vapor con panceta thai y pepino/yozu”. Ya conocéis mi adoración por los sabores de Tailandia, así que no hacen falta más explicaciones.
E Ignacio Echapresto, chef del restaurante Venta Moncalvillo en Daroca de Rioja (La Rioja) vio el mismo abrazo como un tiernísimo y delicioso “Txipirón encebollado sobre pan crujiente y Trompeta de la muerte”
1094. Pintura de Luis Feito
El restaurante Portalón de Vitoria-Gasteiz con el chef Michael Santos al frente se acercó a la obra con gran fidelidad visual preparando un “Bacalao a lo feito”.
Curiosamente, Sergio Bastard, chef de La Casona del Judío en Santander, eligió también el bacalao como ingrediente principal para interpretar el cuadro con el pintxo “Un café en Noruega” .
Fotografía de Xoan Anleo.
Para esta obra dos propuestas radicalmente distintas pero con gran similitud visual con la fotografía a reinterpretar. Por un lado, “Tempus fugit”, la propuesta de Josean Merino del perretxiCo de Vitoria-Gasteiz, que consistía en un turrón de foie con yogur colado, sésamo negro y caléndulas deshidratadas que es una adaptación de una de las propuestas habituales en la carta de su restaurante. Otro de mis favoritos.
Por otro lado, Enrique Martínez, del restaurante Maher en Cintruéñigo (Navarra) optó por un “Ceviche de alcachofa” de sabor sorprendente y con una puesta en escena espectacular.
Biológico. Pintura de Iñaki Cerrajería.
El equipo del restaurante Laua de Langarika (Álava) trajo al Artium una creación llamada “Biológico y Cefalópodo” que juntaba una melosa boloñesa de chipirón con una delicada espuma de hongos, una mezcla de sabores intensos que también fue de mis favoritas.
Aipea Oihaneder, del restaurante Xarma en Donostia plasmó la pintura en su pintxo “Camarón sobre arena de mar y bombón líquido de salmorejo”, otro de mis favoritos.
marmitaCo
A día de hoy, marmitaCo es un espacio para pensar, una cocina cerrada al público para abstraerse en la que Josean Merino y su equipo trabajan en las nuevas ideas que van surgiendo y donde nacen sus nuevas creaciones. En un futuro es posible que también sea un aula para cursos y eventos similares.
Durante este fin de semana hemos podido visitarlo y charlar un ratito con Josean sobre su fascinación por la cocina en miniatura y su interés por ir más allá de los fogones sacando la cocina a la calle y poniendo al alcance de todos lo que durante mucho tiempo era solo privilegio de unos pocos.
No es tarea fácil, ofrecer una cocina en miniatura de altísima calidad requiere mucha precisión durante el proceso de elaboración ya que en tamaños tan pequeños es de vital importancia respetar las cantidades exactas de las distintas elaboraciones a la hora de emplatar y resulta mucho más difícil mantener las temperaturas.
perretxiCo
Las ideas que nacen y se desarrollan en marmitaCo, tienen como fin llegar a la cocina de perretxiCo (San Antonio, 3 bajo, 01005 Vitoria-Gasteiz. Teléfono: 945 13 72 21), una taberna del siglo XXI, pero con el encanto y la calidez de las tascas de toda la vida. Abierta durante todo el día, en la que se puede empezar el día con un completísimio desayuno al más puro estilo #desayuno_cocinillas o tomar un brunch a media mañana, unos pintxos a la hora del aperitivo, comer, merendar o cenar.
Y, como no podía ser de otra manera, nos acercamos a la hora de comer a ver qué se cocía por allí y de paso dar buena cuenta de unos cuantos platos de la carta. Esta vez, no pudimos resistirnos a repetir con el Turrón de foie, curry, almendra y rocas de tomate (versión original del pintxo con el que interpretaron la obra del Artium), Dunkin Duck (un brioche al vapor tostado y relleno de tartar de pato), Ravioli de txangurro con sopa de lima y coco con níscalos y aguacate, Sopa de rabo de toro con cantarelus, acelgas rojas y fideos de patata, Pizza de Euskaltxerri (una pizza de masa finísima con puerros y panceta), Secreto ibérico con cebollitas glaseadas y puré de chirivía y, de postre, “Leche, cacao, avellanas,…”
(Perdonad la mala calidad de las fotos que vienen a continuación pero en ese momento la batería de la cámara estaba agotada y tuve que usar el móvil 🙁 )
Restaurante Ikea
Intentamos aprovechar cada minuto en la capital alavesa y no quisimos perdernos la oportunidad de hacer una visita relámpago al restaurante Ikea ( Portal de Castilla, 27 01007 Vitoria – Gasteiz), uno de los más famosos de la ciudad. Diseñado por Javier Mariscal, el restaurante es una obra de arte en sí mismo. Me atrevería incluso a decir que es uno de los mejores ejemplos de arquitectura orgánica de interiores que he visto en España.
Al frente de la cocina están Iñaki Moya y Asier Urbina y después de probar su propuesta para Art deCocinas y el Carpaccio de gamba con vinagretas que tuvimos ocasión de probar durante la breve visita que les hicimos, Ikea se ha convertido, sin lugar a dudas, en un local que desde ya pasa a formar parte de nuestra lista de restaurantes para conocer a fondo en una próxima visita a la ciudad.
