Unos filetes de lomo rebozados crujientísimos
Sin pan rallado y sin air fryer: el truco que uso para que los filetes empanados queden más crujientes y sin nada de grasa
Además, es una receta apta para celíacos, pues no contiene gluten. Queda deliciosa.
Más información: 3 recetas de rebozados crujientes sin gluten y sin harinas especiales
- Total: 10 min
- Comensales: 4
No es ningún secreto que conseguir un rebozado muy crujiente, sabroso y que no quede empapado en aceite puede ser todo un reto. Las cosas que crujen resultan adictivas, pero los alimentos grasientos en exceso resultan pesados y difíciles de digerir.
Por eso muchas personas optan por cocinar los rebozados en el horno o en la freidora de aire, aunque los resultados suelen estar bastante lejos de lo que todos esperamos encontrar cuando pensamos, por ejemplo, en croquetas o filetes empanados.
La clave para conseguirlo no está en freír sin aceite, sino en prescindir del pan rallado y sustituirlo por tortitas de maíz inflado, las que se venden en la zona de productos dietéticos del supermercado.
Un pequeño cambio, un resultado de 10
Este cambio, que puede parecer menor, transforma completamente el resultado. Las tortitas, convenientemente trituradas, aportan un crujiente espectacular que recuerda al panko japonés, pero con una textura aún más ligera y aireada.
Al freírlas, apenas absorben aceite, lo que da como resultado un empanado más ligero, menos pesado y mucho más agradable al paladar.
Otra ventaja interesante es lo mucho que cunden. Al estar hechas con maíz inflado, para una misma cantidad de filetes necesitamos menos cantidad de producto en peso que si usáramos pan rallado convencional.
Por este motivo, usar este tipo de tortitas para rebozar es también una opción práctica, económica y muy adecuada para los que buscan rebozados con menos carbohidratos o sin gluten.
Y lo mejor, en freidora de aire y en el horno también quedan mejor que los rebozados con pan rallado. Pero no hace falta recurrir a estos electrodomésticos, con una sartén y un poco de aceite, el acabado es impecable.
Por si alguien se lo está preguntando, he de decir que las tortitas de arroz no funcionan igual. Se empapan más y acaban absorbiendo mucho aceite, además, tienden a quemarse con facilidad.
Las de maíz, en cambio, tienen la textura ideal para lograr ese equilibrio entre crujiente adictivo y textura ligera que buscamos cuando queremos un rebozado perfecto sin complicaciones.
Filetes empanados crujientes
- Tortitas de maíz, 4 ud
- Huevo, 1 ud
- Filetes de lomo de cerdo, 8 ud
- Aceite de oliva, para freír
- Sal, al gusto
- Pimienta negra molida, al gusto
Paso 1
Trituramos las tortitas de maíz dietéticas. Para ello, las rompemos con las manos y las colocamos en un procesador de alimentos.
Paso 2
Trituramos durante unos segundos a velocidad máxima, hasta que los trozos tengan un tamaño aproximado al de medio grano de arroz.
Paso 3
En caso de no disponer de procesador, las introducimos en una bolsa resistente y las golpeamos con un rodillo o una sartén hasta obtener el mismo resultado.
Paso 4
Salpimentamos los filetes de lomo por ambos lados según nuestro gusto personal. A continuación, batimos el huevo en un recipiente amplio.
Paso 5
Pasamos cada filete primero por el huevo batido, asegurándonos de que quede bien cubierto, y luego lo rebozamos con las tortitas trituradas. Presionamos ligeramente con las manos para que el rebozado se adhiera perfectamente.
Paso 6
Calentamos una cantidad moderada de aceite en una sartén amplia, lo suficiente para cubrir parcialmente los filetes, sin llegar a sumergirlos por completo. Cuando el aceite esté caliente pero no humeante, freímos los filetes por tandas.
Paso 7
Freímos los filetes hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados, dándoles la vuelta con cuidado. Debemos vigilar que no se quemen.
Paso 8
Retiramos los filetes y los colocamos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Otros rebozados muy crujientes sin pan rallado
Las tortitas de maíz como ingrediente para hacer empanados crujientes no son la única opción, sino que tenemos varias más:
- Copos de avena molidos. Triturar ligeramente copos de avena da como resultado una cobertura rústica y crujiente. Es ideal para rebozar verduras, pescado blanco o pechugas de pollo. Funciona muy bien en el horno o en freidora de aire, ya que se doran sin absorber mucho aceite.
- Harina de garbanzo. Usada como cobertura o mezclada con especias, forma una capa fina y sabrosa que se dora muy bien. Es perfecta para rebozar verduras como calabacín o berenjena. Queda bien en sartén con poco aceite o al horno.
- Copos de maíz sin azúcar. Triturados en trozos gruesos, ofrecen un rebozado muy crujiente y visualmente atractivo. Son ideales para pollo, nuggets caseros o tiras de pescado. Dan buen resultado tanto fritos como en freidora de aire.
- Semillas (sésamo, girasol...). Aportan una textura crujiente, sabor tostado y nutrientes. Funcionan muy bien para cubrir pescados grasos como el salmón o el atún, así como tofu o quesos. Se recomienda cocinar estos rebozados a fuego medio en sartén o al horno para que las semillas no se quemen.
- Sémola de maíz. Forma una cobertura ligera que queda especialmente bien en pescados, croquetas o fingers de verdura. Al freír o cocinar en horno, queda crujiente sin absorber apenas grasa.
- Quinoa inflada. Da un toque crujiente y dorado. Funciona especialmente bien con vegetales cocidos y tofu. Se puede hornear o usar en freidora de aire para mantener su textura sin exceso de grasa.
