El comedor del restaurante.
El restaurante de un hotel de San Sebastián con vistas a la Catedral y tapas desde 3€ para comer bien a buen precio
El céntrico local cuenta con una amplia terraza al aire libre donde sirven recetas vascas diseñadas por el chef Íñigo Palma.
Más información: Este es el restaurante de San Sebastián donde a la chef Elena Arzak le gusta tomar el aperitivo.
San Sebastián es una de esas ciudades imprescindibles de España. Con menos vida nocturna y cultural que su vecina Bilbao, conquista a los visitantes gracias a su precioso casco histórico, su céntrica playa (considerada la mejor playa urbana de Europa) y su rica oferta gastronómica (es una de las ciudades con más estrellas Michelin por habitante de nuestro país: un astro por cada 19.000 residentes, aproximadamente).
Con un escenario tan idílico, podría decirse que emprender en restauración y hostelería en Donostia es una apuesta con muchas papeletas de éxito, sobre todo si se escoge una ubicación estratégica. De hecho, en 2022 la capital guipuzcoana era el destino urbano más rentable para los negocios hoteleros según el Barómetro de Rentabilidad y Empleo (aunque, por el momento, se ha paralizado la concesión de licencias para abrir nuevos hoteles y viviendas turísticas hasta 2026).
El hotel Villa Katalina (Calle de Hondarribia, 42), inaugurado en 2021, reúne muchas características para ser considerado uno de esos proyectos bien avenidos. Ubicado frente a la Catedral del Buen Pastor, con vistas a sus 75 imponentes metros de altura, el alojamiento es un remanso perfecto para los amantes del arte neogótico y para quienes busquen confort y tranquilidad (sólo disponen de 34 habitaciones distribuidas en cuatro plantas) sin renunciar a las ventajas de alojarse en pleno centro, muy cerca de los principales puntos turísticos de San Sebastián.
Una de las habitaciones de Villa Katalina con vistas a la Catedral del Buen Pastor.
El edificio histórico protegido que ocupa este hotel boutique de 3 estrellas fue construido entre 1895 y 1905. El estudio local Uzcanga Arquitectos se encargó de la rehabilitación de los espacios, respetando los elementos clásicos (miradores de madera, balaustradas de piedra, carpintería gris) y combinándolos con acabados modernos. El resultado es un equilibrio armonioso entre los siglos XIX y XXI que confiere personalidad y atractivo al conjunto.
Gastronomía vasca moderna en un paisaje neogótico
Pero la propuesta de Villa Katalina no sólo se limita al hospedaje: en julio de 2024 vio la luz Villano Bistró, un restaurante situado en la planta baja del hotel lleno de paredes acristaladas desde las que seguir disfrutando de la belleza de las vidrieras de la catedral más importante de Donostia.
El chef Íñigo Palma (antes jefe de cocina en el restaurante Bistroteka del ahora llamado Zinema7 Hotel) dirige la oferta culinaria del establecimiento, que reinterpreta la tradición vasca con técnicas de vanguardia y productos de temporada. Palma también ha perfeccionado su arte en reconocidos restaurantes de la región, incluyendo las cocinas de Sébastien Gravé en Bayona.
La terraza de Villano Bistró.
Disponen de platos a la carta, un menú del día por 26 euros (entrante, principal y postre), un menú degustación por 55 (con seis platos seleccionados expresamente por Íñigo) y diversas opciones de picoteo perfectas para degustar en su amplia terraza al aire libre, ubicada en la Plaza del Buen Pastor, entre la Catedral y el precioso edificio de Correos de estilo neorenacentista.
Saborea en Villano Bistró el clima oceánico de San Sebastián con una de sus gildas de anchoa de Yurrita, piparras de Ibarra y aceitunas gordal (3 €); una típica txistorra de Navarra (8,30 € la media ración), un pinxto de tortilla de patata con cebolla y pimiento verde (3 €), o la ensaladilla rusa con bonito pescado en sus costas (9,30 € la media ración). Tampoco puedes irte sin probar el ravioli de setas y hongos con salsa de queso Iraty y jugo demi-glace, de los mejores platos de su cocina (desde 7 €).
Dos platos de Villano Bistró.
Prueba también su presa Basatxerri asada con apionabo, chimichurri y emulsión de ajo negro y acompáñala de una copa de Txakoli Gañeta, de Bodegas Gañeta, elaborado con uvas Hondarribi Zuri y perteneciente a la D.O. Getariaki Txakolina. O un vaso de sidra Isategi Gorena.
Los cafés para tomar en sus mesas o para llevar son otro reclamo constante por parte de algunos clientes, muchos de ellos vecinos del barrio que acuden asiduamente al espacio, ya sea para desayunar, almorzar, comer, merendar, cenar o, simplemente, estar. En Villano Bistró caben todos los gustos.
Villano Bistró (Calle Urdaneta, 10), abre todos los días de 13:00 a 15:30 y de 20:00 a 22:30. La terraza y la oferta del bar-cafetería tiene un horario ininterrumpido de 12:00 a 23:00.
