Hassan Dashti, nutricionista y biólogo circadiano del Hospital General de Massachusetts

Hassan Dashti, nutricionista y biólogo circadiano del Hospital General de Massachusetts

Nutrición

Doctor Dashti, biólogo experto en nutrición: "Retrasar la hora de las comidas conlleva un mayor riesgo de mortalidad"

El retraso del horario de las comidas, especialmente del desayuno, se relaciona con el empeoramiento de la salud general.

Más información: Antonio Clavero, investigador: "El ayuno temprano, equivalente a saltarse la cena en España, es especialmente beneficioso"

P. Fava
Publicada

Un equipo de investigadores del Massachusetts General Brigham (Estados Unidos) ha vinculado el retraso de la hora de las comidas, especialmente del desayuno, con un aumento del riesgo de mortalidad en las personas mayores, que además suelen experimentar este tipo de cambios de hábitos a medida que envejecen.

Esto se relaciona con el hecho de que las personas con más problemas de salud, mayores dificultades para descansar por la noche o una tendencia genética a trasnochar también tienden a tener horarios más tardíos. Así, desayunar más tarde a medida que se envejece se asocia más fuertemente con un mayor aumento del riesgo de mortalidad.

El estudio, publicado en la revista Communications Medicine, ha identificado que la tasa de supervivencia a diez años es del 86,7 por ciento en el grupo de alimentación tardía, en comparación con el 89,5 por ciento de aquellos que hacen sus comidas más temprano. Esta investigación ha analizado los datos de 2.945 adultos de entre 42 y 94 años residentes en Reino Unido, a quienes se les ha realizado un seguimiento durante más de 20 años.

"Nuestra investigación sugiere que los cambios en el horario de las comidas de los adultos mayores, especialmente el horario del desayuno, podrían servir como un indicador fácil de monitorizar de su estado general de salud", afirma el autor principal, Hassan Dashti, nutricionista y biólogo circadiano del Hospital General de Massachusetts.

"Pacientes y médicos podrían prestar atención a los cambios en las rutinas de comida como una señal de alerta temprana para detectar problemas subyacentes de salud física y mental", subraya. Del mismo modo, Dashti insiste en que desayunar más tarde se asocia "sistemáticamente" con problemas de salud física y mental, tales como depresión, fatiga o problemas de salud bucal.

Esta práctica de comer más tarde se ha relacionado también con la dificultad de preparar comidas o con un sueño más lento. Además, las personas con predisposición genética a ser noctámbulas tienden a comer más tarde.

Hasta ahora se tenía un conocimiento "limitado" sobre la relación entre las comidas y la longevidad, prosigue el especialista, motivo por el que ha animado a los adultos mayores a mantener horarios de comida consistentes como parte de una estrategia "más amplia" para promover el envejecimiento saludable y la longevidad.

"Nuestros hallazgos ayudan a llenar ese vacío al demostrar que un horario de comida más tardío, especialmente el desayuno retrasado, está vinculado tanto a problemas de salud como a un mayor riesgo de mortalidad en los adultos mayores", explica.

Estos resultados refuerzan el dicho de que 'el desayuno es la comida más importante del día', especialmente para las personas mayores", ha señalado Dashti. Del mismo modo, ha resaltado los resultados de este estudio en un momento en el que la alimentación restringida en el tiempo y el ayuno intermitente están "ganando popularidad".