El doctor Álvaro explica las diferencias de salario con un médico alemán. (Anastasia Shuraeva / Pexels)
Álvaro, médico español, sobre la diferencia de su salario con un doctor alemán: "Él cobra 5.000 € en su primer mes de trabajo"
El éxodo de médicos formados en España hacia otros países de Europa se basa en muchos factores, incluyendo la diferencia salarial.
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No es ningún secreto que, desde hace años, gran parte de los médicos formados en España viajan hacia otros países de Europa en busca de mejores oportunidades. Algunos lo hacen tras finalizar su etapa de formación especializada vía MIR, pero no son pocos los que inician una 'vía directa' y se trasladan directamente tras finalizar la carrera. Países como Alemania, Francia, Reino Unido o Suiza son solo algunos ejemplos de destinos para nuestros sanitarios.
La explicación a este éxodo es diversa, pero para muchos es conocida una de las principales causas: el salario base de un médico en España es muy inferior a la media europea. Su aumento se basa en hacer guardias y otros complementos, a diferencia de otros países como Alemania, Irlanda o Francia.
En este aspecto, recientemente Álvaro, médico residente de cirugía, conocido como @dr.alvarosalud en su canal de YouTube, ha querido hacer una pequeña reflexión sobre las diferencias salariales entre un médico español y un médico alemán:
"Estamos exportando médicos a Francia, Alemania, Suiza. Pero, ¿por qué pasa esto? [...] Una diferencia muy básica, y estoy hablando únicamente del salario, porque hay muchas más: salario base de un médico español, sin guardias, sin jornadas extras, son 1.200 euros por las 40 horas laborales semanales; salario base de un médico alemán, primer día de trabajo, 5.000 euros al mes, más las guardias que también están mejor pagadas".
Aunque Álvaro no va desencaminado en sus afirmaciones, cabe matizar algunos puntos: el salario base sin guardias en España al que se refiere sería el de médico residente en formación, y no al de médico adjunto, el cual suele ser superior pero depende mucho de la comunidad autónoma en la cual se trabaje.
Según los últimos datos, de promedio, este salario se sitúa en 49.139 euros brutos al año, sin guardias, para los facultativos que ya han finalizado su periodo formativo; es decir, en casos donde un médico ya es especialista y lleva entre 6 y 10 años de experiencia. Y la evolución de este salario depende significativamente de la especialidad médica y la comunidad autónoma.
La diferencia principal con Alemania es que este país inicia su salario con una media de 5.500 euros brutos al mes para su personal en formación, un salario que llega a los 7.300 e incluso más de 8.000 para los profesionales que ya han finalizado su periodo formativo y son médicos especialistas. Por tanto, las diferencias son claras, tanto en el periodo formativo como tras finalizar la especialización médica.
Algunos defienden que el coste de vida entre España y Alemania es diferente, algo que es cierto, pero con matices: tanto la vivienda como algunos servicios tienen un coste superior, pero aún así, el poder adquisitivo neto de un médico alemán sigue siendo superior en comparación al de un médico español. En este último caso, sin realizar guardias, algunas ciudades de nuestro país serían prohibitivas para vivir como ya lo son para gran parte de nuestra población.
Asimismo, la carga asistencial entre España y Alemania también difiere: la presión asistencial y la carga burocrática en España es constante y muy superior a la que se sufre en Alemania, donde también existe, pero en menor cuantía e intensidad. La organización de este país es más estructurada y con menor carga burocrática en comparación.
Finalmente, entre otros muchos potenciales aspectos, la formación continuada en España suele recaer en el propio médico o bien necesitar la financiación de laboratorios farmacéuticos externos y privados. En Alemania, gran parte de dicha formación está financiada e integrada dentro del trabajo, y su reconocimiento científico y académico suele tener más retorno profesional. El prestigio médico en este país es superior, y esto es otra clara diferencia a tener en cuenta.
En conclusión, el principal problema de España es que la formación MIR es superior a la de la mayoría de países europeos; sin embargo, nuestro país exporta gran parte de su talento médico al no ser capaz de otorgar a los profesionales motivos para quedarse. Los motivos van más allá del mencionado salario: estabilidad laboral, desgaste burocrático, condiciones de trabajo y dificultades para una adecuada conciliación personal y laboral tras una formación universitaria de 6 años junto a una especialidad médica de 4 o 5 años más.