La extensión de la sexta ola de coronavirus en Alicante se ha disparado con el arranque del año. En solo una semana la presencia de la Covid ha aumentado en un 28 %. Así lo recogen los datos del sistema City Sentinel con que trabaja el Ayuntamiento con Aguas de Alicante.

El estudio de las aguas residuales se hace mediante la detección en ellas del nivel de concentración que hay de la carga genética del coronavirus. En el caso alicantino, con las estaciones depuradoras de Rincón de León y Monte Orgegia. De esa cifra, además se saca el promedio para reflejar de manera más adecuada lo que sucede en la ciudad según la proporción de habitantes en cada zona.

Los datos del último informe de City Sentinel marcan récords absolutos en esta media. Este sistema, que se aplica de este modo en Alicante desde principios de octubre, presenta los resultados del rastreo genético de las aguas residuales. El documento, fechado la víspera del Día de Reyes, marca un tope histórico en los registros de 2.972.275 unidades de genoma del coronavirus por litro.

Los incrementos semana a semana durante diciembre han dibujado una línea ascendente que ahora vuelve a mostrar la dureza de estos números. Si estos casi tres millones de unidades marcan un aumento brusco, del 28 % en este caso respecto al anterior, peor fue la primera semana de diciembre. Los datos sanitarios del fin de la quinta ola anticiparon lo que venía con esta sexta.

Y llegó ómicron

De la última semana de noviembre a la primera de diciembre, las tablas de datos de City Sentinel reflejan el cambio. La estación depuradora Rincón de León pasó de la segunda cifra más baja, 3,3 millares a 2,4 millones. En la media ponderada, se tradujo en un salto de 47,3 a 919,8 millares. Y peores cifras estaban por venir.

El informe de City Sentinel explica que del análisis de las aguas residuales pudieron comprobar que el 2 de diciembre ya estaba presente la variante ómicron en la estación Monte Orgegia. Una semana después, justo en el puente de la Constitución, ya estaba en ambas. Ahí se había incrementado un 68,7 % la presencia de unidades de genoma en ese promedio.

Las PCR cuantitativas que utiliza este sistema de control por las aguas residuales había encontrado antes que los otros canales la llegada de ómicron y su rápida extensión. A mediados de diciembre fue cuando las autoridades sanitarias avisaron del primer caso registrado que tenían en la Comunidad Valenciana. El virus ya llevaba dos semanas circulando, según los resultados de City Sentinel.