Dos hombres han sido condenados por la Audiencia de Alicante a una pena conjunta de seis años de prisión por distribuir marihuana y hachís a terceros desde un club cannábico implantado en el municipio de Benidorm.

La sentencia, dictada por un tribunal de la Sección Décima, les considera a ambos responsables de un delito contra la salud pública de sustancias que no causan grave daño a la salud, así como de un segundo delito de asociación ilícita.

La distribución ilegal de la droga se produjo al menos entre julio y noviembre de 2019, según pudo certificar la Policía en las labores de vigilancia desplegadas sobre la actividad del club cannabico.

[Dos años de prisión para miembros de un club cannábico de Alicante por usarlo para vender droga]

En concreto, el tribunal considera demostrado que los dos procesados formaban parte de la directiva de la asociación cannábica ‘Cali 420’ inscrita desde febrero de 2019 en el registro nacional de asociaciones bajo el epígrafe “naturismo, medicinas alternativas”.

La asociación disponía de una sede con licencia municipal de apertura en trámite en la avenida de Europa de Benidorm de la que hacían uso para traficar y extender el consumo de sustancias estupefacientes a terceras personas, conocidas o desconocidas, “con apariencia de legalidad”, bajo el paraguas del club de fumadores de marihuana.

La sentencia apunta que, “bajo la cobertura formal de una asociación sin ánimo de lucro”, dicho club amparaba la libre circulación de la droga “ocultando así la realidad del ilícito tráfico de cannabis, marihuana y hachís” usando el local del club como punto de venta de sustancias estupefacientes al que podía acceder “cualquier persona y adquirir la sustancia y llevársela al exterior sin necesidad de ser asociado”.

[Condenados los fundadores de un club cannábico de Ondara por vender 'maría' incitados por su adicción]

De igual modo, establece que los agentes de la Policía Nacional desplegaron un segundo operativo de vigilancia y seguimiento, a partir de septiembre de 2019, posterior a otro desarrollado en el mes de julio del mismo año, en el que pudieron comprobar una gran afluencia de personas en la sede del club, en su mayor parte “turistas que acuden puntualmente durante su estancia en Benidorm”. Posteriormente, ya en la vía pública, a esos usuarios se les intervino la droga adquirida en la sede del club.

En diciembre de 2019, se practicó la entrada y registro de las instalaciones del club en las que se intervino 935 gramos de cannabis que habría alcanzado un valor de 4.754 euros en el mercado ilícito; otros 95,74 gramos de resina de cannabis, con un valor de 560 euros; y 76,41 gramos de cannabis con un valor de 446 euros, entre otras cantidades menores de las mismas sustancias.

El club

A la vista de la prueba practicada, el tribunal concluye que los dos procesados, presidente y tesorero del club, dirigían una asociación que “promovía y favorecía el consumo de cannabis y sus variedades a terceros y no meramente un cultivo compartido que se distribuye entre un reducido número de socios que aportan una cuota al efecto de consumir de forma privada la sustancia repartida con los límites de consumo establecidos por el grupo”.

Los acusados alegaron en el juicio que no se les vio realizar actos de venta. Con todo, la sentencia apunta que ambos ostentaban cargos directivos en la asociación y que ya estaban implicados en las diligencias judiciales previas iniciadas a partir de la investigación desarrollada en julio de 2019.

La sentencia impone al presidente del club la pena de un año y medio de prisión por el delito contra la salud y otros dos años por el delito de asociación ilícita. Por su parte, condena al tesorero a un año y medio de prisión por la venta de estupefacientes, al que añade un año de privación de libertad adicional por el delito de asociación ilícita.

La sentencia no es firme y cabe recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJCV) en el plazo de diez días desde su notificación.