Verdeliss no ha contado la parte más 'oscura' de su viaje a Los Ángeles en familia.

Verdeliss no ha contado la parte más 'oscura' de su viaje a Los Ángeles en familia.

Famosos REDES VS REALIDAD

Lo que Verdeliss no cuenta de su idílico viaje a Los Ángeles

La 'youtuber' ha compartido un nuevo vídeo en su canal de Mtmad en el que muestra más detalles de su aventura americana en familia. Pero no lo cuenta todo.

31 octubre, 2019 00:46

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Verdeliss (34 años) cumplió este verano uno de sus sueños. Lo que en un principio iba a ser un viaje de trabajo a la otra punta del mundo sola se convirtió en una aventura en familia en California que, como siempre, grabaron al detalle para compartirlo después en sus redes sociales y canales de Youtube y Mtmad. En las imágenes se puede apreciar una historia de película americana, en la que los nueve miembros de la familia son felices, hacen todo juntos e incluso van a las típicas lavanderías americanas y lo pasan en grande. Pero ha habido episodios de su rutina en Los Ángeles que la navarra no ha querido mostrar porque no son precisamente idílicos.

En su último vídeo de la plataforma web de Mediaset Verdeliss ha mostrado cómo ha sido la experiencia de hacerse su tatuaje más especial. Ella tenía claro que quería que fuera en Estados Unidos, porque aparte de que era su destino de ensueño desde que cumplió los 18 años, la pamplonesa tenía su propia razón de peso para poner tinta en su piel por profesionales americanos: "¿Por qué Los Ángeles? Porque es la cuna de los mejores tatuadores del mundo".

Guiada por este pensamiento, se informó sobre algunos de los mejores expertos en tattoos de toda California y se decantó por el estudio Ocean Front Tattoo. Debe su nombre a que se encuentra en pleno Venice Beach, extensa playa bañada por el océano pacífico. Su tatuador se llama Mikey, y es todo un profesional en los dibujos en miniatura, trazos finos y realismo.

Su traslado en coche desde la casa hasta Venice Beach, donde Verdeliss quería tatuarse.

Su traslado en coche desde la casa hasta Venice Beach, donde Verdeliss quería tatuarse.

La influencer encontró a su tatuador perfecto para ilustrar en su piel un homenaje a su numerosa familia. Pero precisamente esos ocho miembros del clan -su marido, Aritz, y sus siete hijos- tuvieron que 'soportar' horas de espera y de viaje para que la matriarca cumpliera su deseo.

Verdeliss fue la encargada de conducir desde la casa californiana que tenían alquilada hasta la zona de Venice Beach, un tiempo de media hora que se alargó por las largas caravanas que se forman oeste de LA en pleno verano. El calor era insoportable y el viaje en la furgoneta con capacidad para 12 plazas se hizo agotador. Además, al llegar a la playa, el viento empañó su cita con el mar. 

Pero Estefanía Unzu -su nombre real- solo pensaba en su tatuaje. Un dibujo muy meditado: "Es un conjunto de flores. Cada una de las flores representa el mes de nacimiento de cada uno de mis hijos. Es lo que yo les digo a ellos, que al mismo tiempo que nacieron, nació una flor".

Verdeliss durante la creación de su tattoo.

Verdeliss durante la creación de su tattoo.

Nada más entrar al estudio, Verdeliss tuvo que mostrar al tatuador un boceto del dibujo que quería y esperó hora y media a que él lo reinterpretara y creara la idea definitiva. Llegó el momento de la verdad y la propia navarra se arrepintió durante el proceso, pero "ya no me puedo echar atrás", dijo.

Además, tanto 'capricho' tuvo su precio, porque tal y como rezaba el cartel de entrada del estudio: "Los buenos tatuajes no son baratos y los tatuajes baratos no son buenos". El tattoo le costó 400 dólares, esto es, 360 euros, y tardó poco más de una hora en realizárselo.

La noche caía sobre el mar californiano. Los hijos de Estefi y Aritz no sabían ya con qué entretenerse y estaban tan cansados que solo pedían a su padre que les cogiera en brazos. Con la noche totalmente entrada, y Verdeliss dolorida por su tatuaje, la familia puso rumbo al coche. 

La pequeña Miren de solo siete meses de edad estaba más que dormida. Y sus hermanos corrieron a la ducha para asearse cuanto antes e irse a la cama. De hecho, al final del vídeo se puede percibir en sus caras e incluso en la de la youtuber el cansancio de todo el día.

Los hijos de Verdeliss disfrutando del Paseo de la Fama de Hollywood.

Los hijos de Verdeliss disfrutando del Paseo de la Fama de Hollywood.

Pero su agotamiento no solo era puntual, sino debido a los continuos días de turismo y organización constante que supone mover de un lado a otro a un extensa familia en la que siete de ellos son menores de edad. Las prisas a primera hora de la mañana, las colas en el baño, los líos de vestir a los más pequeños, las atenciones de Miren y los inconvenientes propios que trasladarse con un numeroso grupo allá donde vayan son problemas a los que se enfrentan los navarros pero que no muestran en sus vídeos.

Un viaje para 'salvar' su matrimonio

El pasado 7 de octubre Verdeliss anunciaba que se encuentra en mitad de una crisis matrimonial de la que "no remonta". Según la youtuber, lleva inmersa en una especie de depresión desde el verano: "Llevo unas semanas psicológicamente bastante mermada. Supongo que todos pasamos por 'crisis' y esta etapa se me está haciendo complicada. Presión, críticas, agotamiento...". Hacía hincapié en un problema real en su vínculo con Aritz: "Lo estamos pasando muy mal... Todo esto va a acabar con nuestra relación de pareja y de familia".

Aritz y Verdeliss no pasan por su mejor momento y están intentando remediarlo con desconexiones como la americana.

Aritz y Verdeliss no pasan por su mejor momento y están intentando remediarlo con desconexiones como la americana.

Por este bajón ánimico de la de Pamplona, su marido decidió que toda la familia volara con ella a California y así vivir unos días inolvidables. Con ese viaje el matrimonio ha querido reforzar su unión, algo que solo el tiempo dirá si lo han conseguido.

[Más información: Los dos años de 'crisis' de Verdeliss y su marido, Aritz: todos los motivos de su mal momento]