Elvira Vega, Directora General de Fundación MAPFRE
‘Estar donde más se nos necesita’: la filosofía que ha guiado 50 años de Fundación MAPFRE
Elvira Vega, Directora General de la organización, repasa medio siglo de compromiso y solidaridad en el que la organización ha transformado la vida de millones de personas en todo el mundo
Este 2025, Fundación MAPFRE celebra medio siglo de compromiso social, cultural y solidario. Desde su creación en 1975, la organización ha invertido más de 1.140 millones de euros, llegando a 179 millones de beneficiarios en cerca de 30 países, una cifra que refleja el impacto real de una organización que ha sabido evolucionar sin perder su esencia: estar donde más se la necesita.
A lo largo de estas cinco décadas, ha respondido ante 30 crisis humanitarias, ha promovido la educación integral de miles de niños y niñas en situación vulnerable y ha acercado el arte y el conocimiento a millones de personas.
Con motivo de este 50 aniversario, hablamos con Elvira Vega, Directora General de Fundación MAPFRE, para conocer de cerca los hitos alcanzados, los aprendizajes de este recorrido y los nuevos desafíos que la organización afronta para seguir construyendo una sociedad más justa, solidaria y humana.
- Fundación MAPFRE cumple medio siglo de vida. Si tuviera que resumir su propósito en una frase, ¿cuál sería?
- Nuestro propósito se resume en estar donde más se nos necesita para construir una sociedad más justa y solidaria. Esa ha sido nuestra razón de ser durante 50 años y lo seguirá siendo en el futuro.
- ¿Qué valor o principio considera más representativo de la Fundación?
- Sin duda, la solidaridad. Es el hilo conductor que une todo lo que hacemos: abrir oportunidades y acompañar a quienes más lo necesitan. También la responsabilidad, porque sabemos que detrás de cada proyecto hay vidas reales que dependen de nuestro compromiso.
- ¿Qué hitos considera más decisivos en la historia de la Fundación?
- Son varios los hitos que han marcado la diferencia en millones de vidas. Entre ellos, están los programas sociales internacionales que han promovido educación, salud y nutrición en 25 países y las acciones ante crisis humanitarias con respuesta en 30 emergencias globales, incluida la pandemia por la COVID-19 y la actuación ante la DANA.
- Además, hemos desarrollado campañas de sensibilización sobre salud, seguridad vial y bienestar financiero. Otro de nuestros hitos son la difusión de cultura y la inclusión laboral. También destacaría nuestro Centro de Investigación Ageingnomics, los Premios Sociales y los Premios de Innovación Social.
- ¿Cómo ha evolucionado la organización desde su creación en 1975 hasta hoy? ¿Y cómo han ido cambiando su trabajo en ámbitos como la educación, la salud o la inclusión laboral?
- Hemos pasado de ser una fundación con alcance nacional a convertirnos en una organización global, presente en cerca de 30 países. La educación sigue siendo nuestro eje central, pero ahora la entendemos como un proceso integral. En salud, hemos apostado por la promoción de hábitos de vida saludables y la divulgación de las maniobras que salvan vidas. En inclusión laboral, por su parte, trabajamos para conectar la formación con las oportunidades reales del mercado, como hacemos con programas como Taller de Aprendices.
- La organización ha invertido más de 1.140 millones de euros y ha beneficiado a 179 millones de personas. ¿Cómo se traduce ese impacto en la vida real de las personas?
- Detrás de cada cifra hay una historia: jóvenes que han tenido la oportunidad de estudiar y hoy son profesionales, familias que han recuperado la esperanza tras superar una crisis o personas vulnerables que han accedido a un empleo digno.
- Ese es el verdadero impacto: transformar vidas y generar oportunidades allí donde antes no existían.
- ¿Cuáles diría que son los retos sociales más urgentes a los que se enfrentan ahora mismo?
- La desigualdad sigue siendo uno de los grandes desafíos junto con el envejecimiento de la población. También la necesidad de garantizar una educación inclusiva y de calidad porque sigue siendo la herramienta más poderosa para romper el ciclo de la pobreza.
- ¿Qué importancia tienen los programas de actuación ante crisis humanitarias y cómo se gestionan esas respuestas rápidas?
- Son esenciales. Hemos respondido a más de 30 emergencias en todo el mundo, desde catástrofes naturales hasta crisis sanitarias. La clave está en la colaboración: trabajar con entidades locales para actuar con rapidez y eficacia.
- ¿Cómo se prepara la institución para responder a las necesidades sociales emergentes?
- Escuchamos, analizamos y nos adaptamos. Apostamos por la innovación social y por alianzas estratégicas que nos permitan llegar más lejos.
- ¿Qué cree que ha permitido a la Fundación mantener su relevancia y compromiso durante cinco décadas?
- Nuestra capacidad de evolucionar sin perder la esencia. Hemos sabido adaptarnos a los cambios sociales, tecnológicos y económicos, pero siempre con la misma vocación: estar cerca de las personas y trabajar por su bienestar.
- Fundación MAPFRE es también un referente en el ámbito cultural y artístico. ¿Qué papel juega el arte en su misión social?
- El arte es una herramienta poderosa para transformar y unir a la sociedad. A través de nuestras exposiciones y actividades, acercamos la cultura a millones de personas, fomentando la inclusión y el crecimiento personal. Estamos convencidos de que el arte contribuye a generar bienestar físico y emocional, a través de abrir mentes y acercar culturas.
- ¿Qué nuevos retos y proyectos marcarán los próximos años de la Fundación?
- Queremos consolidarnos como una fundación de referencia en solidaridad, seguir apostando por la educación y la salud y afrontar desafíos como el envejecimiento poblacional. Nuestro objetivo es seguir siendo un agente transformador, trabajando en alianza con otros para construir un futuro más justo y solidario.