Montaje de Gerard Vázquez con una persona mayor buscando empleo en una imagen creada con IA.

Montaje de Gerard Vázquez con una persona mayor buscando empleo en una imagen creada con IA.

Sociedad

Un joven no da crédito a lo que cobra su padre jubilado con 43 años cotizados: “Un 26% menos de pensión”

Gerard Vázquez relata una situación que, además de a su padre, afecta a miles de españoles, que se vuelven “invisibles” para trabajar por su edad.

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Las claves

Gerard Vázquez denuncia en LinkedIn la reducción del 26% en la pensión de su padre tras jubilarse forzosamente a los 61 años.

El padre de Gerard trabajó 43 años en puestos directivos en empresas como Caprabo y Leroy Merlin, pero su pensión se vio afectada tras el cierre de su última empresa.

A pesar de su experiencia y logros, el padre de Gerard ha buscado trabajo sin éxito por más de un año, mientras otros colectivos disfrutan de jubilaciones anticipadas sin penalización.

Quien no da crédito a lo que le pasa a su padre se llama Gerard Vázquez. Y ha puesto el grito en el cielo por una situación que considera injusta. Porque, tras 43 años cotizados, la empresa de su progenitor cerró tras un concurso de acreedores sin haber llegado a la edad de jubilación.

¿Resultado? “A la calle junto a todos sus compañeros. Jubilación forzosa con un 26% menos de pensión”, clama a los cuatro vientos en la red social LinkedIn. Y añade: “Probablemente, es la historia de muchos españoles”.

Entre la rabia y la indignación, resume la situación de su padre, toda una vida trabajando, de la siguiente manera: “Ahora España le dice: ‘Gracias por nada’”.

Jubilado con 61 años

Gerard hace un breve recorrido por la vida laboral de su padre que se vio obligado a jubilarse con 61 años. Así, trabajó de director general de Caprabo. También fue director en Leroy Merlin. Y ocupó cargos directivos en Prenatal, Sita Murt, Party Fiesta...

“Sin estudios universitarios pero con algo que los títulos no dan: experiencia real, liderazgo nato y resultados demostrados. Ha llevado equipos de hasta 300 personas”, prosigue un hijo orgulloso de su padre.

“Ha abierto tiendas, cerrado otras, navegado crisis, superado objetivos. Ha formado a cientos de empleados. Ha pagado religiosamente sus impuestos durante más de 4 décadas. Y ahora España le dice: ‘Gracias por nada’”.

Fue en agosto de 2024 cuando la empresa en la que trabajaba cerró por concurso de acreedores. Y a la calle. “No por su culpa. No por incompetencia. Por la realidad empresarial”, subraya.

Y eso se ha traducido en que “es invisible en el mercado laboral español. Da igual tu experiencia, tus logros, tu potencial. La edad es una sentencia”.

Por eso, su pensión se ha visto recortada un 26% de por vida. “¿Sabéis lo que es un 26% menos al mes, hoy en día? Estamos hablando de casi un sueldo completo que pierde para siempre. Una parte suya que se ha ganado y merece”, remarca.

Y a Gerard Vázquez también le duele que “otros colectivos con menos años cotizados tienen jubilaciones anticipadas sin penalización”. Mientras tanto, su padre ha buscado trabajo durante más de un año, sin resultado positivo.