Imagen generada por IA representando una herencia y una imagen de Luis Ignacio Irigoyen.

Imagen generada por IA representando una herencia y una imagen de Luis Ignacio Irigoyen. Gemini

Sociedad

Luis Ignacio Irigoyen, consultor financiero, sobre las herencias: "Estamos yendo hacia el modelo de bonificación del 99%"

El experto explicó cómo funciona el sistema de impuesto de sucesiones y de donaciones en España.

Más información: Julio, inspector de Hacienda: "El impuesto de sucesiones se calcula según lo recibido y los bienes del último año"

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Las claves

El Impuesto de Sucesiones y Donaciones provoca discusiones en España por su variabilidad regional, afectando a quienes reciben herencias o donaciones.

Luis Ignacio Irigoyen destaca que la bonificación del 99% en herencias se está extendiendo en muchas comunidades autónomas, pero no es uniforme en todo el país.

El sistema fiscal actual genera competencia entre comunidades autónomas, ya que los impuestos sobre herencias y donaciones varían significativamente según la región.

El impuesto es criticado por causar doble imposición sobre bienes heredados, mientras que los defensores argumentan que ayuda a redistribuir la riqueza y financiar servicios públicos.

Si hay una serie de impuestos que generan bastante discusión en España son aquellos relacionados con las herencias, es decir, los de sucesión y donación que afectan a aquellos que reciben algún tipo de bien o derecho a través de herencia, legado o título sucesorio.

Al fin y al cabo, son impuestos que se pagan en función de la comunidad autónoma, por lo que los residentes de unas regiones tienen mayores beneficios que los de otras únicamente por residir ahí.

Así, el consultor financiero Luis Ignacio Irigoyen señaló el funcionamiento de estos impuestos en España y la manera en que se reparten en las regiones del país.

Impuestos por recibir

El Impuesto de Sucesiones y Donaciones grava la transmisión de bienes y derechos cuando una persona recibe una herencia o donación. Su objetivo es que parte del patrimonio transmitido a los herederos pase a las arcas públicas, aunque en la práctica su aplicación y cuantía generan polémica.

La base imponible depende del valor de los bienes heredados, las deudas pendientes y la relación entre el heredero y el fallecido, de manera que familiares directos suelen tener reducciones significativas frente a herederos lejanos o no familiares.

Uno de los elementos más controvertidos del impuesto es que varía notablemente según la comunidad autónoma en la que resida el heredero.

Mientras algunas regiones aplican reducciones y bonificaciones que pueden acercar el gravamen a cero para familiares directos, otras comunidades mantienen tipos más altos que pueden superar el 30% en herencias de alto valor.

Esta disparidad genera un efecto de "competencia fiscal" interna, con ciudadanos que planifican su residencia o su herencia en función de la legislación autonómica más favorable, complicando la equidad y la percepción de justicia tributaria.

De tal manera, Espejo Público trató este tema planteando un escenario: Una persona que recibe una donación en vida de 300.000 euros, lo que tenga que pagar de impuestos variará según la comunidad autónoma.

Por ello, mientras en Oviedo pagaría 25.500 euros, en Barcelona serían 17.000 euros, en Canarias 55 euros y en Santander la friolera cifra de 0 euros.

El consultor financiero Luis Ignacio Irigoyen estuvo en plató para tratar este tema y señaló la gran variedad de porcentajes y cuantías según la región.

"Depende del código postal donde has nacido, pues pagarás unos impuestos u otros", aseguraba el experto. "Es triste porque a nivel fiscal todos los españoles deberíamos tener igualdad, pero bueno, este es el sistema que nos hemos impuesto de cesión de impuestos a las comunidades autónomas".

"Que cada una de las comunidades autónomas pueda regularlos. El impuesto de donaciones es uno de ellos y depende de cada comunidad autónoma", indicaba.

Sin embargo, dio una reflexión bastante importante sobre la manera en que se plantea este impuesto en las comunidades.

"Coges la legislación de las comunidades autónomas y es 17 países dentro de un país", apuntaba Irigoyen.

"Evidentemente, en la mayoría de ellas estamos yendo al modelo de bonificación del 99%, pero es cierto que en Andalucía lleva tiempo con esa bonificación. Es una doble imposición igual que estamos hablando con las herencias".

Estas diferencias han dado lugar a intensas controversias. Por un lado, se critica que el impuesto penaliza a quienes heredan legítimamente bienes que ya han sido gravados previamente, generando doble imposición.

Por otro, los defensores argumentan que sirve para redistribuir riqueza y financiar servicios públicos esenciales.

Además, el desconocimiento sobre los beneficios fiscales disponibles y la complejidad del cálculo han provocado conflictos legales y sanciones inesperadas, lo que mantiene al Impuesto de Sucesiones como uno de los más debatidos y sensibles del sistema tributario español.