Ingresan a su bebé en el hospital y se encuentra con una habitación a 45 grados: “Hemos hecho lo que hemos podido”

En la ola de calor que azotó España con temperaturas que, en algunas zonas, llegaron a elevarse por encima de los 40 grados, algunos de los grandes afectados fueron los pacientes de los hospitales.

Varios se quejaron de que sus habitaciones alcanzaban temperaturas extremadamente altas, principalmente porque no había aire acondicionado y entraba el sol directo en las horas más calientes de la tarde.

Uno de los que denunció esta situación fue Javier Frías, padre de una bebé de 10 meses ingresada en Sevilla por una herida en la cabeza. No obstante, contó en el programa Y Ahora Sonsoles, en Antena 3, que llevan desde el 9 de junio en esta situación.

"Todos los años es el mismo problema"

El padre explicó con visible frustración que este problema en los hospitales no es algo puntual de este año, sino que es algo que ocurre todos los años con el calor del verano que, además, es mucho más intenso en esta zona de España.

"Hemos estado indagando a los compañeros de aquí del hospital y han estado comentando que esto no viene de ahora, no es de este año. Es decir, que todos los años hay el mismo problema", comentó.

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Agregó Javier que la situación se vuelve aún más inaguantable a las horas en las que el sol da directamente en la habitación que puede llegar hasta los 45 grados. "Ahora estamos a 37 grados en la habitación y con una niña en cama, además".

Respecto a alguna respuesta por parte del hospital para remediar dicho problema, comentó que "la solución que nos han dado ha sido ponernos aquí unas máquinas, unos pingüinos".

Imagen de la habitación de la hija de Javier Frías con un pingüino y cartones en la ventana. Antena 3

Sin embargo, varios familiares de pacientes han optado por otros métodos para evitar que se calienten las habitaciones, además de un pingüino: "Los padres de aquí hemos tenido que hacer algún trabajo y mejorarla como hemos podido con cartones".

Cabe recordar que con cartones en las ventanas y un pingüino, la habitación en la que se encuentra Javier con su hija sigue estando a 37 grados. De hecho acotó que en el momento de la entrevista "está dando el sol de pleno en la misma ventana".

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"Es que no lo entiendo, vamos, mi hija tiene una una heridita y por el calor, como tiene plásticos y tal en la cabeza, pues ese calor, temperatura y esa humedad que tiene provocan los parches estos, que no le dejan cicatrizar bien la herida", estalló.

La hija de Javier, como fue expuesto anteriormente, tiene "10 mesecitos" y se encuentra en dicho hospital ingresada "porque tiene una heridita abierta en la cabeza".

Así, añadió que "estuvimos hablando con nuestro neurocirujano y nos estuvo comentando que con las temperaturas, el plástico que tiene y todo, pues hace que no avance porque llevamos aquí tres meses en el hospital".