La "biblioteca de género" que ha llamado la atención de Pérez-Reverte

Arturo Pérez-Reverte no tiene que complicarse la vida para dar en el clavo con sus críticas en las redes sociales. Si bien es cierto que los mejores zascas los lanza cuando afila sus propias palabras, en ocasiones le basta con un retuit para avivar a sus seguidores, como ocurre con el caso que nos ocupa hoy.

El escritor ha compartido en su cuenta de Twitter el sarcástico mensaje de una usuaria criticando la implantación de una "biblioteca de género" en un local acondicionado con dinero público de la Junta de Andalucía:

En concreto, la imagen se trata de un bajo situado en el municipio de Chiclana de la Frontera. En mayo de 2018 la concejala de Turismo del municipio, Ana González, anunciaba varios proyectos que el Ayuntamiento presentaba al Gobierno regional con cargo a una subvención de 373.565 euros que otorgaba la Consejería de Turismo y Deporte. En total, el acondicionamiento de las instalaciones para la biblioteca costaría un total de 41.689,84 euros.

Una reivindicación de Vox

Este mismo mes de septiembre, el grupo parlamentario de Vox registraba una pregunta en el Parlamento Andaluz para que la Consejería dé explicaciones sobre esta ayuda cuando entienden que "no tiene relación alguna con la actividad turística". A todas luces, poco o nada tiene que ver la implantación de cualquier biblioteca en un edificio que no es patrimonial con los reclamos turísticos.

Además, a juzgar por los comentarios de los seguidores de Pérez-Reverte, todavía no está muy claro qué es una "biblioteca de género" ni para qué sirve:

No obstante, hay que decir que en el marco de la celebración anual del Consejo de Cooperación Bibliotecaria -el órgano que canaliza la cooperación bibliotecaria entre las administraciones públicas-, se presentó el III Plan Estratégico de Bibliotecas y uno de sus puntos contempla la creación de una Comisión de Igualdad que se encargará de promover la lectura de obras feministas y formar a los profesionales en este aspecto.

El documento, que se presentó el pasado mes de febrero en Madrid, recoge que se pondrán en marcha medidas que visibilicen la diversidad de género y a las propias escritoras a través de actividades, adquisición de fondos bibliográficos y la creación de un Mapa de Autoras en las bibliotecas. Eso sí, en ningún momento se habla de abrir nuevas bibliotecas únicamente "de género".

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