Luisa Asteggiano e Ivan Sauna.
Luisa, la italiana de 45 años hallada muerta en Formentera tras una "relación convulsa" con un importante empresario
El cadáver de la mujer fue hallado en su domicilio con signos de violencia. Su pareja estuvo detenido como principal sospechoso, pero la Guardia Civil ha descartado un crimen machista.
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Luisa Asteggiano. Así se llamaba la mujer de 45 años y natural de Bra (Cuneo, Italia) que fue hallada muerta en la mañana del 5 de octubre en su domicilio de Es Pujols (Formentera), en la avenida Miramar 112.
El cadáver presentaba signos de violencia y la Guardia Civil detuvo a su actual pareja, un importante empresario del sector turístico de 51 años y también ciudadano italiano, como principal sospechoso del caso.
Sin embargo, este martes la Guardia Civil ha descartado que la mujer haya muerto por una agresión machista después de que la autopsia haya determinado que el fallecimiento "no ha sido por un hecho violento".
Después de que fuera el propio Sauna quien llamara a las autoridades, "después de despertarse y encontrarse el cadáver", tal y como ha confirmado a EL ESPAÑOL su abogado, Michele Tortorici.
Las autoridades no quisieron calificar el caso como un homicidio y, dijeron estar estudiando "todas las vías". En la misma línea, Tortorici, pedía "paciencia" y asegura que su cliente "se ha declarado inocente desde el primer momento".
"No hay que buscar culpables con prisa, y estaremos atentos al resultado de la autopsia", decía en conversación telefónica con EL ESPAÑOL.
Pero los vecinos de la zona parecen tener otra opinión. Según han recogido varios medios locales, la relación de Luisa con Sauna se caracterizaba por "muchas idas y venidas", y la calificaban como "convulsa" y marcada por "conflictos frecuentes".
Además, estas mismas personas comentaban que la mujer había lucido en alguna ocasión moratones en su cuerpo, aunque ella los achacaba a accidentes.
Según ha confirmado Tortorici a este diario, efectivamente, esos hematomas existían, pero el abogado apunta hacia "los graves problemas de salud de Luisa" como los causantes.
Finalmente, y según ha informado este martes el instituto armado, los investigadores continúan a la espera de los resultados de otros análisis solicitados para determinar la causa del fallecimiento. El hombre italiano detenido, pareja de la fallecida, ha pasado esta mañana a disposición del juzgado de guardia de Ibiza.
El domicilio donde se encontró el cadáver de la mujer.
10 años fuera de Bra
Poco o nada saben ya de Luisa en su ciudad natal. Según ha recogido el diario italiano Corriere Torino, la fallecida habría gestionado durante varios años el bar Simpson (antes llamado bar Dino) en la via Marconi, en Bra, junto con su hermana Paola.
Pero tras el fallecimiento de sus padres, el negocio dejó de ir todo lo bien que las hermanas se esperaban, por lo que decidieron cerrar el establecimiento y abandonar la ciudad.
Tras preparar las maletas, hace ya 10 años, Luisa se trasladó a las Islas Baleares y, desde entonces, no ha vuelto a mantener contacto con sus amigos, que permanecieron en Piamonte.
En la isla, Luisa vivía con su hijo de 15 años, fruto de una relación anterior. Fue hace un año y medio cuando comenzó a mantener una relación sentimental con Sauna, natural de Busto Arsizio.
Sin embargo, todo comenzó a desmoronarse cuando, según afirma el abogado del sospechoso, "varios reveses judiciales" sorprendieron a Luisa, que acabó con una orden de alejamiento y sin poder ver a su hijo.
Una madre "rota"
Esta situación, ha afirmado Tortorici, llevó a la mujer a una "profunda depresión". "A Luisa la echaron de su casa, dejó de ver a su hijo y perdió todo. Mi cliente siempre trató de ayudarla, de atenderla en lo que pudo, pero ella ya era una madre rota", contó a EL ESPAÑOL.
Como solución, Luisa presuntamente habría encontrado refugio "en el alcohol y las perdiciones de la isla de Ibiza". "Ella vivía con su hijo en la isla y el padre de este, no teniendo casa, se metió en su domicilio y la alejó poco a poco de todo lo que tenía".
Fue ahí cuando se mudó con su pareja a Formentera y fue así como, progresivamente, su salud comenzó a empeorar.
"Consta en la documentación que su salud se quebró. Tenía depresión, ansiedad y practicaba un consumo abusivo. De hecho, en la última vista que tuvimos, el propio juez vio ya esas mismas lesiones que no son otra cosa que fruto de la mala salud de Luisa", aseguró el abogado.
Sin embargo, dice, no quiere que esto trascienda como una historia donde Luisa sea juzgada, sino como la sucesión de unos acontecimientos que la llevaron a tomar un "nivel de vida poco apropiado".
"A Luisa prácticamente la empujaron hacia esta situación. Sauna solo intentó ayudarla, su relación era buena, y tengo esperanza de que pronto nos trasladen los resultados de la autopsia que determinen de dónde provienen esas lesiones. Pero a mi cliente no hay que juzgarlo antes de tiempo", concluyó.