Jorge Barreno

Reportajes

El boxeo también es para clases altas, abogados o famosos: 10 gimnasios donde practicarlo

Este deporte ha pasado de ser casi residual en España a ser practicado por todo tipo de personas. Ahora, "todos quieren golpear un saco".

26 marzo, 2022 03:48

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Nuestra mente dibuja la escena cuando escucha boxeo. Unos focos apuntan a un cuadrilatero, mientras del graderío, a oscuras, emana un ruido ensordecedor. Sobre la zona iluminada, dos bancos de tres patas en sendas esquinas esperan a dos rivales dispuestos a golpear al adversario hasta la victoria tras el toque de la campana. En el mejor de los casos, el árbitro levantará el brazo de uno de los contendientes mientras el otro muestra sangre en su rostro.

Quizás esta sea la imagen que se nos venga a la cabeza cuando hablamos de este deporte. Estigmatizado por la literatura y el cine —Rocky, claro—, y por algunas de las historias que hubo en cierto tiempo detrás de él, el boxeo parece ser un deporte exclusivamente destinado a hobby en los barrios marginales. Sin embargo, nada más lejos de la realidad.

Afortunadamente, de un tiempo a esta parte, esa concepción errónea de este deporte ha cambiado. Cada vez son más las personas que se acercan a conocer el boxeo. No es el deporte que practican los 'violentos' del barrio que buscan pegarse a toda costa y desfogar su rabia contra el resto. El boxeo ahora es el deporte de todos: de empresarios, trabajadores de banca, ricachones de familia, periodistas, famosos, etcétera.

Un ejemplo: Madrid, 20 horas, de un miércoles cualquiera. David Márquez, exboxeador y entrenador personal, llega a la sede de Uría Menéndez abogados. Accede por los tornos y baja al gimnasio que esta empresa tiene para sus empleados. Una de las salas tiene un saco de boxeo colgado para que quienes quieran practicar esta disciplina lo hagan con tranquilidad.

Los alumnos son Agustín Capilla, socio del departamento de procesal, de litigación, y José María Blanco, counsel del departamento de procesal, de litigación. Después de las disputas en la sala, llega el momento de repartir unos cuantos golpes en el gimnasio.

Los letrados  de Urías Menéndez antes del entrenamiento.

Los letrados de Urías Menéndez antes del entrenamiento.

Agustín empezó en este deporte hace 4 años; José María, en septiembre. El primero de ellos recuerda que acompañó a un compañero del gimnasio "y me enganchó". A José María también lo liaron los compañeros del despacho y ahora entrena hasta tres veces por semana junto a David.

"Nunca había pensado en hacer deportes de contacto en general, ninguno —reconoce Agustín—, pero es que boxeo ni siquiera se me pasaba por la cabeza". José María tampoco se lo planteó jamás, él apostaba por correr.

Reconocen que este deporte es espectacular. "Lo buno es lo desestresante que es", reconoce Agustín. Después de las inagotables jornadas, con el boxeo "sales relajado y los problemas parecen más pequeños. Sólo piensas en dar y en que no te den: ese es el punto diferencial".

José María lo recomendaría a todo el mundo. "Al menos que probasen. Es un deporte muy accesible. Es cierto que cuesta mejorar, pero se consigue".

Los letrados reconocen que antes el nicho del boxeo era más pequeño. "Ahora proliferan los gimnasios, profesores particulares y demás. Hay personas de cualquier tipo de edad, condición y género practicando".

Reconocen que otro de los condicionantes positivos que tiene este deporte es la facilidad para la autorregulación. Es decir, cada uno se pone los límites de dónde quiere llegar: Agustín se sube al ring a guantear con algunos amigos, pero José María aún no se ve, sólo hace técnica en manoplas y ejercicios en el saco.

"Lo he hecho, pero no termina de convencerme —comenta el primero de los abogados entre risas—, porque que te peguen… Subes y dices: voy despacito. Pero vas suave hasta que te entra el primer golpe. Ahí te picas. Y si te entran dos manos seguidas, ahí ya… Pero sí, lo he hecho con amigos. Ahora, subirme con desconocidos al ring, no lo haría. Me da mucho respeto".

En definitiva, lo que ha cambiado para estos abogados es la percepción que se tenía anteriormente del boxeo. 

Tras el entrenamiento con David, Agustín reflexiona. "Había un poco de miedo antes de ir a estas clases: a ver si me va a tocar con alguien que se venga un poco arriba... Pero te das cuenta de que allí van amas de casa, ejecutivas, abogados, gente de contabilidad… La gente que tiene más experiencia se esfuerza en corregirte más, tiene cuidado de que no te entre una mano. Es cierto que tenía una mala fama o un aura malo, pero para nada. Además, los profesores son majísimos".

Proliferación de gimnasios

Cada vez son más los gimnasios de boxeo que proliferan. Andrés de Manuel López es uno de los socios de la empresa GoBox, con tres gimnasios en Madrid. Explica cómo comenzó su negocio. Él había sido boxeador y, tras una etapa en Londres, se percató de que "el boxeo estaba muy de moda y veía que había ejemplos de gimnasios enfocados hacia algo más popular, que todo el mundo puede practicarlo. Idee un método, con nuestras características, y salía adelante".

Manuel de Andrés López y David Márquez.

Manuel de Andrés López y David Márquez.

Andrés de Manuel habla de cómo ha cambiado el panorama de este deporte. Antes se buscaba más la rentabilidad con el precio bajo de los locales por la estigmatización que había del boxeo. "Cuando empecé a boxear, todo eran gimnasios de barrio. Al fin y al cabo, si no es popular, está mal visto, tiene una imagen mala, el que quería montar este tipo de negocios lo que quería era dar sus clases y sacar a sus alumnos a competición, nada más. Poco a poco, los monitores y los dueños de gimnasios se dan cuenta que hay mucha gente que no quiere competir."

De ahí que ahora el negocio se haya encaminado más hacia lo lúdico que hacia lo competitivo. Tal y como explica David Márquez, uno de los monitores de GoBox, "boxear no significa que te vayas a ir de aquí con una costilla rota ni un ojo morado. El entrenamiento entre los que compiten y los que no lo hacen no es muy diferente. La mayor diferencia son los días de sparring. Alguien que no quiere sparring lo que hace es técnica, saco, físico y ya está".

—¿Llama mucho la atención el hecho de que se practique sin contaco?

—Sí, puede ser —dice Andrés—. Pero luego, el que dice que no se iba a pegar en su vida, acaba por pedirte muchas veces un bucal para subirse al ring. A la hora de introducirlo también somos muy cuidadosos. El objetivo es que el compañero con menos nivel aprenda. Es un poco de sentido común. Sin sufrir, sin llevarse el hostión de su vida en el minuto uno.

—Sí, sí —comenta David— empiezan a entrenar, lo ven y nos preguntan. Ven un sparring en el que ninguno de los dos se hacen daño. Se ponen el casco, el bucal y para adelante.

Una imagen del entrenamiento de los abogados con David Márquez.

Una imagen del entrenamiento de los abogados con David Márquez. Jorge Barreno

También se ha roto el estigma de que el boxeo es un deporte exclusivo de hombres fuertes y violentos. "Para los niños, por ejemplo, es muy beneficioso en todos los ámbitos, sobre todo porque aprenden mucha disciplina", comenta David.

Andrés, por su parte, recalca cómo personas más mayores acuden ahora a boxear, porque saben que pueden permitírselo físicamente. Las mujeres, además, han despejado la falsa creencia de que en un gimnasio de boxeo se respira una masculinidad tóxica. "Para nada —arguye Andrés—, incluso en GoBox Retiro tenemos más mujeres que hombres apuntadas".

"Nuestro objetivo es que aprendáis a boxear y estéis en forma. Si sale un campeón del mundo, perfecto, pero no es el objetivo prioritario aquí", señala David.

Fightland, los pioneros

José Luis Serrano fue el pionero en montar un gimnasio de boxeo que acaparó al gran público. Junto a su socio César Barbosa, José Luis Serrano estuvo dos años antes de abrir su primer Fightland en Chamberí. El excampeón de España recuerda cómo todos a quienes consultó le decían que estaba "completamente loco".

Les dijeron que para hacer un total de 150 socios necesitarían 1 año. Sin embargo, lograron esa cifra en apenas un mes. A día de hoy han pasado más de 9.000 personas por sus gimnasios.

"Antes todos los gimnasios estaban en barrios conflictivos y sólo acudían chicos que querían boxear. Nosotros metimos 30 sacos en un gimnasio, cuando antes sólo había tres, y creamos un método: introducimos un entrenamiento más físico y bajamos de hora y media de entrenamiento a una hora, porque los ejecutivos no tienen hora y media diaria para entrenar", comenta Serrano.

A pesar de todo, cree que el éxito radica en el hecho de que sea un deporte sin contacto. "A nadie le gusta que le peguen. Te diría que al 99% no le gusta. De todas formas, si alguien quiere hacer sparring, le damos recomendaciones de cómo hacerlo", comenta.

En este punto, Serrano difiere entre hacer boxeo y boxear. Cree que en lo segundo, en la competición, ha habido un repunte, pero no hay ese 'boom' que se vive en el boxeo recreativo. Lo ejemplifica: "Aquí vino un amigo mío campeón del mundo y entraron 30 personas en una clase y salieron otras 30. Sólo le reconoció una persona".

De hecho, destaca que el espectáculo de las veladas de youtubers es muy seguido, pero que nada tiene que ver con la competición. "Se ve muchísimo, pero eso no hace que más gente se aficione. España no es Inglaterra, allí el boxeo es una religión".

Destaca Serrano para finalizar que el boxeo siempre estará de moda. "Al final es como correr. Son los dos instintos primarios del hombre: huir y pelear. Puede evolucionar la forma en la que lo haces, pero siempre te acaba atrayendo".

Brookling Fitboxing

Cuando se pregunta a empresarios y deportistas del boxeo qué ha provocado este cambio de perspectiva sobre el deporte tan generalizado, todos suelen coincidir en que un aspecto muy positivo fue el marketing realizado por los gimnasios Brookling fitboxing

Andrés de Manuel lo tiene claro: "Brokling, aunque sea fitboxing y no boxeo, ha quitado mucho el miedo. Mucha gente que lo prueba acaba por hacer más cosas. No enseñan boxeo, pero ha quitado el miedo al contacto y lo han hecho muy bien. Luego piden un poco más. Y luego vienen a gimnasios que se adaptan a todo el mundo, donde haya el mismo buen rollo y aprenden a boxear".

El exboxeador Manel Berdonce regenta el Boxing Berdonce Studio, en Las Tablas (Madrid), y también coincide en esta argumentación. Cree que los cambios en el boxeo se dieron hace 6 años. "Brookling hizo los cambios en el boxeo. Ahí conocí un perfil distinto. El boxeo era más de barrio y empezaron a venir ingenieros, gente de la banca. Es un deporte tan bonito...".

Agustín entrena con las manoplas junto a David.

Agustín entrena con las manoplas junto a David. Jorge Barreno

Sabe que hay muchos deportistas de otros estilos que también se están apuntando al boxeo. Por ejemplo, el niño Torres o Sergio Ramos. Berdonce asegura que tiene "las tres cualidades principales para un deportista: potencia, velocidad y resistencia. Y luego la otra parte psicológica. Te da el control y autocontrol en la toma de decisiones. Te da seguridad y confianza. 

Reconoce que en este cambio ha habido muchas claves. "Antes ibas a un gimnasio de boxeo y había tres boxeadores o 20 que no boxeaban. Ese cambio tan inteligente ha sido clave, este no es un deporte de riesgo ni todo el mundo tiene por qué competir. Son dos tipos de conceptos que conviven".

Berdonce hace un resumen del fenómeno: "Hoy la gente viene a entrenar y no boxea nadie. Se hace mucho boxeo recreativo, ludico, donde tienes que mantener mucha concentración. Para hacer un ejercicio bien, tienes que tener la concentración patente y latente. Te olvidas de todos los problemas de fuera. Te olvidas de todo y al mismo tiempo sabes que no corres ningún peligro".

Recuerda cómo hace no tanto tiempo, en los sectores más pudientes de la sociedad daba vergüenza exponer que se realizaba este deporte. "Ahora presumen de ello y hasta van con los guantes por la calle", expone Berdonce, que ha llegado a entrenar a Cayetano Martínez de Irujo.

Para ejemplarizar lo estigmatizado que estaba el boxeo, el otrora campeón de España cuenta cómo un taxista llegó a sorprenderse por su forma de ser. "Me dijo que pensaba que los boxeadores no sabíamos ni hablar". Ahora, sin embargo, muchos le agradecen haberles "cambiado la vida".

Los abogados haciendo ejercicio físico.

Los abogados haciendo ejercicio físico. Jorge Barreno

"Somos gente sencilla, normal y transmitimos esos valores que muchos llevamos dentro y que te hace ampliar el boxeo", zanja Berdonce.

Inicación al boxeo

EL ESPAÑOL ha realizado una lista con 10 gimnasios en los que puedes practicar boxeo en distintos niveles en Madrid y otras partes de España. Estos son los precios. Visitando la web de cada gimnasio se pueden conocer más detalles.

Gobox 

Tienen distintos precios. Los niños de 6 a 13 años tienen una cuota de 40 euros al mes. A partir de ahí, hay tarifas de dos clases a la semana por 45 euros, tres por 55 euros e ilimitado a partir de 65 euros. Además, se pueden obtener otros descuentos o bonos para clases sueltas.

Boxing Berdonce Studio

Las Tablas, en Madrid, acoge el gimnasio de Manel Berdonce. En el Boxing Berdonce Studio los pequeños de 7 a 14 años pueden entrenar por 55 euros al mes. A partir de ahí, dos clases al mes cuestan 65 euros; tres, 75 euros; y cuatro para hacer boxeo de manera ilimitada.

Fightland

Fightland es uno otro de los clubes de boxeo que podrás encontrar en Madrid y otras capitales como Barcelona o Sevilla. El precio varía dependiendo de la ciudad y el centro en el que se apunte cada uno.

Brokling Fitboxing

No es boxeo al uso, es más un estilo propio cercano al kick boxing, pero todos lo señalan como el gran culpable de la buena imagen que tiene ahora el boxeo. Según la web de Brookling, cada centro tiene "sus precios y promociones activas". "Tenemos diferentes planes de entrenamiento, desde cuotas mensuales de dos y tres días por semana a bonos de 5 o 10 clases. Cuando hayas probado tu primera clase, en el centro te explicarán todas las promociones y podrás elegir el plan que mejor se ajusta a tus horarios y necesidades".

Morales Box

En este gimnasio tienen una cuota de 50 euros para los junior. Dos clases a la semana tienen un coste de 65 euros, tres tendrían un coste de 75 euros y las ilimitadas costarían 90 euros al mes. Hay bonos especiales.

My Ring

Con contacto o sin contacto, son muchos los niveles que se llevan a cabo en este gimnasio. A través de su web no ofrecen precios, pero para ir a probar sólo tienes que registrarte.

Sergio Ramos by John Reed

También puedes hacer boxeo en el gimnasio de Sergio Ramos. Aquí no hay una tarifa especial. El precio es de 80 euros la mensualidad, pero puedes acceder a todo tipo de actividades y entrar en otros gimnasios de la cadena de manera ilimitada.

Ninefitness

Fernando 'el niño' Torres es otro de los que se ha sumado al boxeo. En sus gimnasios se imparte esta disciplina, que se cataloga de "estrella". "Ponte en forma con este increíble deporte", aseguran. Sin duda, el boxeo ha tenido que ver con el increíble cambio físico del colchonero. El precio del mes en el gimnasio, con todas las actividades incluidas, ronda los 50 euros.

The Boxer Club

The Boxer Club es otro de los centros que puedes encontrar en Madrid. Aquí puedes encontrar entrenamientos de todo tipo, desde sin contacto hasta el de competición.

La Escuela de Boxeo

La Escuela de Boxeo es uno de los centros donde puedes entrenar en Madrid, en la que puedes entrenar con Jero García, presentador de televisión y exboxeador español.

Club Deportivo José Valenciano

Por último, también puedes disfrutar del boxeo. Este centro deportivo es gimnasio, pero en él puedes disfrutar de distintos estilos de boxeo, bien sea sin contacto o más profesional.