Alberto Núñez Feijóo durante la jura del cargo de Mar Sánchez Sierra.

Alberto Núñez Feijóo durante la jura del cargo de Mar Sánchez Sierra.

Reportajes

Mar Sánchez, la sombra de Núñez Feijóo que "nunca miente" ni "filtra" pero sí es "crítica" con su jefe

El lider gallego llega a la sede de Génova 13 acompañado de su jefa de prensa, su asesora de mayor confianza que siempre ha estado a su lado. Ahora será su responsable de proyección e imagen.

28 febrero, 2022 00:56

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El día que estalló todo, Mar Sánchez Sierra (1969) despedía a su madre, de 92 años, que acababa de morir en su domicilio de A Coruña. A casi 600 kilómetros de distancia, la sede del Partido Popular ardía. La caja de los truenos acababa de abrirse por unas informaciones que apuntaban a que la cúpula del partido había espiado a su mejor activo del momento, la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso.

En ese momento Mar no lo sabía, pero aquella bomba le acercaba más que nunca de vuelta a Madrid, tal y como ha confirmado este domingo Alberto Núñez Feijóo cuando ha dado a conocer a su equipo en la capital. Esta coruñesa de nacimiento y periodista de profesión es una de las colaboradoras más desconocidas para la opinión pública del nuevo presidente nacional del PP. Ahora será su responsable de proyección e imagen del presidente.

El efecto dominó que provocó el espionaje a la familia de Ayuso produjo un seísmo con consecuencias medibles en la planta séptima de la sede de Génova 13: las cabezas de Pablo Casado y su equipo, con Teodoro García Egea al frente, fueron decapitadas.

Casado ha conseguido resistir hasta este fin de semana, cuando se ha celebrado el XX Congreso del PP. Ha sido este fin de semana cuando se ha dado carpetazo a su etapa en el partido, y todo apunta a que será Feijóo el que lo sustituya. Así lo pidieron los barones conservadores en una reunión de urgencia que se extendió hasta altas horas de la madrugada el pasado 23 de febrero.

El gallego, ganador cuatro veces de las elecciones autonómicas por mayoría absoluta, siempre ha sonado para liderar su formación a nivel nacional. En 2018, cuando Casado ganó en las primarias, su nombre ya se perfilaba para hacerlo, pero no se atrevió a dar el paso. Ahora parece que tendrá que buscarse piso en la capital. Y nadie duda de que con él vendrá Mar Sánchez.

El presidente de Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, a su llegada a la reunión con Pablo Casado.

El presidente de Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, a su llegada a la reunión con Pablo Casado. Efe

Vidas de la mano

Las carreras de ambos han trazado líneas paralelas. Desde que Feijóo llegó a Madrid para formar parte del Ministerio de Sanidad, Sánchez Sierra ha estado a su lado. El político siempre ha contado con un grupo reducido de colaboradores, pero ella siempre ha estado a su lado. En cada cargo que ha tenido, como si fuesen cogidos de la mano.

“Feijóo confía ciegamente en ella. Cuando hablas con ella sabes que el presidente ya ha dado el visto bueno. Es lo más parecido a tratar con él”, explica un conocedor de su figura que se dedica a los medios de comunicación, a lo que añade que es “trabajadora como ninguna”.

Sánchez es más que una jefa de prensa, que también. Cada vez que Feijóo da unas declaraciones, ahí está ella para grabarlo con su móvil y distribuirlo después entre los periodistas. “No deja sin contestar a nadie, es una de sus virtudes. Nunca miente, pero tampoco filtra nada. A mí no me ha dado una noticia nunca”, afirma un periodista de una cabecera gallega que lleva años tratando con ella.

Precisamente una filtración es lo que ha acabado con la carrera política de Casado y la que puede aupar a Feijóo a la cabeza de los populares. De alguna manera, el uso de espías para esclarecer si el hermano de la presidenta de Madrid había cobrado una cuantiosa comisión por mediar en la entrega de material sanitario durante los momentos más duro de la pandemia llegó a los periódicos.

En los mentideros de Madrid, en las porterías de los edificios nobles, que es donde todos los rumores son verdad, se comenta que esa información viene de las filas de la propia Ayuso. En concreto de su jefe de Gabinete, del director de orquesta que la ha hecho ser quien es: de Miguel Ángel Rodríguez.

¿Mar vs MAR?

Hay muchas diferencias entre Mar Sánchez y Miguel Ángel Rodríguez. Aunque comparten nombre (a él se le conoce como MAR), sus formas están muy lejos de parecerse. Rodríguez no duda en, por ejemplo, pasar información de un tipo u otro a los periodistas. Sánchez no lo hace. “Si hay una palabra para definir a Mar Sánchez es la de discreta, siempre está en un quinto plano”, cuentan todas las fuentes consultadas para este reportaje.

Rodríguez dirige las líneas políticas de la Comunidad de Madrid. Lo que dice Ayuso, como viste, adónde va, tiene su firma. Sánchez, por su parte, prefiere un trabajo más en la sombra. Va allá donde tenga que acudir Feijóo, pero es muy celosa de su intimidad, de su vida privada. No hace declaraciones públicas. Por eso se hace tan difícil escribir sobre ella.

Mar Sánchez Sierra.

Mar Sánchez Sierra.

Se reúne con todos los directores de periódicos de Galicia, todos con los que el presidente no se puede ver”. Además, es la que reparte el pastel de la publicidad institucional. “Se entiende a izquierda y derecha, por eso Feijóo puede salir en Salvados o ser entrevistado por Federico (Jiménez Losantos)”, explica otra fuente.

La relación entre ambos tiene más de 25 años. En los 90, ella trabajaba en La Voz de Galicia. No fue hasta seis años después que sus caminos se cruzaron. Feijóo se trasladó en el 96 a Madrid de la mano de Romay Beccaría para ser secretario general de Asistencia Sanitaria en el Ministerio de Sanidad y Consumo. Entonces se la llevó, ya que ella formaba parte del gabinete de comunicación del hospital de Santiago. Desde entonces son inseparables. 

Cuando el político ejerció de director de Correos, la periodista siguió a su lado, y cuando en 2003 regresó a Galicia para formar parte del último Gobierno de Manuel Fraga, ella hizo la maleta y volvió a la tierriña. En 2005, aunque el PP volvió a ganar las elecciones, la coalición del PSOE y el BNG sacaron de la Xunta al fundador de Alianza Popular. La meteórica carrera política de Feijóo no había hecho nada más que empezar.

Ganando elecciones

Desde 2009 lleva encadenando mayorías absolutas. Como una máquina bien engrasada, funcionando con la perfección de un reloj, Feijóo ha revalidado el cargo elección tras elección. Hay cosas que nunca cambian, y una de ellas es que Mar Sánchez siempre ha estado a su lado.

El líder gallego es muy reservado con su equipo de trabajo. Su círculo de confianza siempre ha estado reducido a una quincena de nombres que han ido entrando y saliendo. Ella nunca se ha movido del mismo sitio. Hasta ahora.

“Es su mano derecha, le acompaña a todos los actos. Si ella dice algo, al 90% es lo que dice él, eso por seguro”. Pero sus palabras nunca se producen en público. Sánchez podría decirse, de alguna forma, ejerce de portavoz en la sombra para los medios de comunicación.

“Son como un tándem, siempre a la par. Es lo más parecido a la serie El ala oeste de la Casa Blanca”, resume una de las fuentes consultadas que conoce a Mar desde hace años. Sin embargo, explican todas las personas con las que ha hablado EL ESPAÑOL, no suele entrar en cuestiones de línea política. No decide qué se hace o cómo se hace. Sólo cómo se transmite. Es la responsable de la imagen de Feijóo y su relación con la prensa, no de sus políticas.

Crítica con su jefe

“Una de las cosas que tiene Mar es que es crítica con todo. A Feijóo no le gusta que le bailen el agua ni que le aplaudan sin más. Quiere a gente que le diga cuándo las cosas se hacen mal”. Sánchez es implacable y no duda en hacerlo, algo que le ha granjeado la confianza y el afecto personal de su jefe.

Sánchez se licenció en Ciencias de la Información de la Universidad de Navarra. Su currículo ha estado siempre relacionado con Galicia: trabajó en el gabinete de prensa del Instituto Gallego de Vivienda y Suelo y se encargó del gabinete de Comunicación en el Complejo Hospitalario de Santiago de Compostela, de la Consellería de Sanidad y Servicios Sociales; del Ministerio de Sanidad; de Correos y de la Vicepresidencia primera y Consellería de Política Territorial, Obras Públicas y Vivienda de la Xunta.

Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP gallego y de la Xunta, en San Cibrao (Orense).

Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP gallego y de la Xunta, en San Cibrao (Orense). Efe

Fue consejera, a propuesta del Grupo Parlamentario Popular, del Consejo de Radio Televisión de Galicia y directora general de comunicación. Desde febrero de 2013 es secretaria general de Medios de la Xunta.

De su vida privada poco se sabe. No está casada, no tiene hijos. En algún confidencial de poca reputación se la ha relacionado con el Opus Dei, algo que no ha podido confirmar este periódico.

“Es una persona muy seria en su trabajo, de la que te puedes fiar. Si a algo dice que sí es que va a ser así, si te dice que no es que no se puede. No engaña. Se dedica al completo a su trabajo, no sé si tendrá tiempo para su vida privada”, ríe en tono de broma una de las personas que se han prestado a hablar sobre ella. Todas han hablado bien.

En A Coruña tiene su vivienda muy cerca de la de Feijóo, “a no más de 100 o 150 metros”. En los próximos días le tocará volver a buscar piso en Madrid, como cuando lo hizo en 1996 por primera vez de la mano de su jefe. Habrá qué localización elige, aunque será a la vera del próximo líder del PP. Eso nadie lo duda.