
Niño y abuelo comen juntos
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Parece raxo de pollo, pero es un plato gallego ideal para que los niños coman pescado alto en proteínas
Esta receta sencilla y rápida es la clave para introducir el consumo de pescado en los más pequeños gracias a la forma en la que se sirve y su sabor tan delicado
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Introducir el consumo de pescado en la alimentación de los niños puede ser un verdadero desafío, ya que muchos pequeños suelen mostrar descontento hacia este alimento. Sin embargo, existen estrategias ingeniosas, como los "trampantojos", que permiten presentar el pescado de una manera más atractiva y familiar para ellos. Una vez que logras que lo prueben, es probable que adoren este alimento, pues es un auténtico manjar que da lugar a realizar incontables recetas exquisitas.
Hoy te traemos una receta muy típica de Galicia, especialmente popular en Cedeira (A Coruña), que no solo es deliciosa, sino que también puede ayudar a que los más pequeños disfruten del pescado sin darse cuenta por su similitud a la vista con el raxo de pollo. Te contamos cuál es y cómo llevarla a cabo en tu menú semanal.
Pescado a la plancha con patatas

Marraxo de Cedeira servido en el Kilowatio
Se trata del marraxo, un tipo menor de tiburón que se consume en diversas partes de Galicia, pero que, sin duda, en el municipio de Cedeira se sirve con un estilo verdaderamente único. A simple vista, su presentación puede recordar al raxo de pollo, lo que lo convierte en una opción atractiva para los más pequeños, quienes a menudo son más receptivos a probar alimentos que les resultan más familiares.
En Cedeira, el marraxo se cocina tradicionalmente a la plancha, lo que resalta su textura firme y su sabor delicado. Se suele acompañar con un toque fresco de perejil o unas gotas de limón, que realzan aún más sus cualidades. Para completar el plato, se suele servir con patatas. El sabor del marraxo es muy delicioso e incomparable al de cualquier otro pescado. Su carne blanca y jugosa es toda una exquisitez que, además, aporta importantes beneficios nutricionales.
Su sabor suave, junto con la ausencia de espinas y su acompañamiento de patatas fritas, lo hacen muy accesible para los más pequeños. De esta forma, al introducir esta receta en la alimentación de los niños, no solo les estás ofreciendo un alimento saludable, sino también una oportunidad para disfrutar de la tradición gastronómica gallega y los productos del mar. Al carecer de espinas también es una excelente elección para aquellos que no son aficionados al pescado o que ya han tenido alguna mala experiencia con ellas.
La receta perfecta de marraxo
Este alimento se puede encontrar en cualquier pescadería, aunque por lo general la encontrarás cortada en filetes y deberás cortarlo en trozos pequeños con el tamaño que consideres. Ten en cuenta que su textura gelatinosa evita que se deshaga durante su cocinado, algo que a veces se complica con otros tipos de pescados.
Te explicamos la receta típica del marraxo al estilo de Cedeira, una absoluta delicia para todos los paladares:
Ingredientes para cuatro personas:
- 800 g de filetes de marrajo
- 2 dientes de ajo
- 1 limón
- 2 patatas
- Perejil
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
El paso a paso:
- Lava y seca los filetes. En caso de que tengan cartílago, córtalo con unas tijeras para dejarlo bien limpio. Tras esto, corta el marraxo trozos, más o menos cuadrados, de pequeño tamaño
- Coloca los trozos de marraxo en un bol. Añade los ajos muy picados, el zumo del limón, un poco de perejil picado y 80 ml de aceite de oliva virgen extra
- Mezcla todo el conjunto y déjalo reposar. Mientras tanto, prepara las patatas para freírlas en aceite (Pelar, cortar en gajos, agua para quitar el almidón). Una vez fritas, colócalas en una bandeja o plato y échales sal
- El marraxo es ideal a la plancha, así que échalo a una sartén caliente y saltéalo hasta que se dore, con cuidado para que no se queme el ajo
Valores nutricionales del marraxo
El marraxo es un pescado que destaca por su elevado contenido de proteínas de alto valor biológico, lo que significa que proporciona todos los aminoácidos esenciales que nuestro cuerpo necesita. Gracias a su textura suave y su sabor delicado, así como a su fácil digestión, es una opción ideal para personas con estómagos sensibles y que sufren de dolores estomacales después de las comidas.
Además de ser delicioso, el marraxo ofrece múltiples beneficios para la salud: contribuye al crecimiento, favorece la fertilidad y refuerza el sistema inmunológico gracias a su contenido en vitaminas A y E.