Tramo más transitado de la calle Barcelona de A Coruña, esta semana.

Tramo más transitado de la calle Barcelona de A Coruña, esta semana. Quincemil

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La calle Barcelona de A Coruña: un "motor comercial" adaptado a la convivencia de culturas

La arteria peatonal del Agra concentra más de 120 locales comerciales en su tramo más transitado, con variedad de negocios y propuestas para satisfacer al barrio con mayor densidad de población, donde coinciden vecinos de distintos países

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Cada barrio de A Coruña tiene su calle comercial, aquella en la que se concentran el mayor número de tiendas y negocios que a diario proporcionan alimento, abrigo y otros servicios cotidianos. Unas calles son más largas que otras, acumulan más o menos comercios y atraen distinto tránsito de población, según las características de la zona.

En el Agra do Orzán, el barrio de la ciudad con mayor densidad de residentes, hay comercios repartidos en la red viaria con tráfico rodado y en torno al mercado de As Conchiñas, pero la vía comercial por excelencia es peatonal, la calle Barcelona.

En su tramo comprendido entre la avenida de Finisterre y Villa de Negreira hay 122 bajos comerciales: 27 son locales de hostelería o alimentación, 23 venden ropa o calzado, 49 son oficinas o albergan variedad de negocios (un banco, dos bazares chinos, telefonía, compra de oro o peluquería y estética, entre otros) y 13 están vacíos, alguno en obras para una próxima apertura.

A estos hay que añadir los bajos comerciales del inmueble del mercado de As Conchiñas y un garaje. La calle tiene otro tramo también peatonal con muy poca actividad comercial, de Villa de Negreira hasta Páramo, donde hay tantos negocios cerrados como el resto de la calle y sedes de algunas asociaciones, y por el que solo circulan vehículos para entrar y salir de casi una decena de garajes.

"Un centro comercial abierto"

"La calle Barcelona es el motor comercial del Agra, generalmente con el tendero de siempre y al que se han sumado nuevos comerciantes. Esto fue un centro comercial abierto en los noventa y a comienzos de este siglo".

Foto Cruz, uno de los negocios más antiguos de la calle Barcelona que siguen abiertos.

Foto Cruz, uno de los negocios más antiguos de la calle Barcelona que siguen abiertos. Quincemil

Es una evidencia que manifiestan los vecinos y que rubrica quien durante 25 años en dos etapas fue presidente de la asociación de comerciantes de la calle, José Manuel Castro. Tras su jubilación, la entidad carece hoy de representantes.

Antes y después de su peatonalización, culminada en septiembre de 1998, la calle Barcelona fue y es ese corazón del comercio en el barrio. A los coches aparcados a ambos lados de la calzada y a la circulación rodada sucedió un pulso urbano más relajado, con espacio amplio salpicado por vegetación, bancos para descansar y terrazas de hostelería en lo que antes era asfalto.

Desaparecieron comercios pero abrieron otros. Bajaron la persiana antiguos bares y la levantaron otros con diferente oferta culinaria, para satisfacer los paladares de vecinos de muchas nacionalidades que en los últimos años se han instalado en el Agra.

"Hay momentos del día y del fin de semana en los que la calle está llena, con gente que va de un lado a otro. También se ve bastante gente mayor, vecinos que llevan toda la vida en el barrio", ha advertido Fernando Rodríguez, un coruñés que hace un año se mudó a la calle Barcelona.

Adaptación y multiculturalidad

Castro destaca que la calle y el barrio "se han adaptado a la convivencia de culturas" que han convertido el Agra en una de las zonas de A Coruña con mayor población migrante.

El mercado funciona "muy bien", asegura, y tanto los extranjeros como los gallegos retornados en los últimos años han relevado a quienes en el pasado construyeron comercio en el barrio y se marcharon a otras zonas o se jubilaron.

Paseantes en la calle Barcelona, en el barrio del Agra do Orzán.

Paseantes en la calle Barcelona, en el barrio del Agra do Orzán. Quincemil

"Creo que el entorno ha sabido adaptarse a las culturas residentes y en general estas se han acoplado bien. Se respira una vida más tranquila que antes. Es una zona en la que se pasea, se hace calle, pero se consume menos", repasa José Manuel Castro, que durante 40 años estuvo al frente de la tienda de moda Mustang.

Fue una de las veteranas hasta que cerró, como hoy lo son Confecciones Arena y Foto Cruz. La calle, en su tramo de más tránsito, solo tiene 13 locales sin uso, mientras que en las adyacentes se cuentan más candados y verjas bajadas.

Ronda peatonal

La arteria peatonal del Agra, más de un cuarto de siglo después de su transformación, formará parte del conjunto que abarcará la llamada ronda peatonal de A Coruña.

Este es un proyecto del Gobierno local que vertebra distintos barrios desde San Diego hasta el Observatorio. Tras diversas obras en los últimos cinco años falta por completar un tramo en la Sagrada Familia que enlazará con un extremo de la calle Barcelona y otro en el Agra hasta la calle Canceliña, junto al parque del Observatorio que abrirá al público tras el demandado derribo de sus muros, próximo a ser ejecutado.