Javier Vecino, entre cuchillos y artículo artesanales en su ferretería de la zona de San Agustín.

Javier Vecino, entre cuchillos y artículo artesanales en su ferretería de la zona de San Agustín. Quincemil

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Vecino, un rincón lleno de cuchillos en A Coruña: "Aquí hay mucho más que sota, caballo y rey"

Incontables navajas y cuchillos de todo tipo y utilidad se ven en el escaparate y el interior de un negocio de ferretería y bricolaje de San Agustín con tres décadas de antigüedad, donde también sobresalen artículos artesanales para el hogar

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Desde uno de los vértices de las calles Varela Silvari y Plaza, en la zona del mercado de San Agustín en A Coruña, se propagan los reflejos de los productos que un negocio exhibe en su escaparate. En un lateral hay decenas de utensilios de cocina hechos de aluminio, y al otro lado de la entrada, cuchillos de acero: cientos de cuchillos que también se encuentran en el recogido interior del establecimiento, de todo tipo, tamaño y utilidad.

Vecino da nombre a este comercio de bricolaje y ferretería, en el que su especialidad principal son los cuchillos, pero que también se dedica con esmero a ofrecer diversos artículos para el hogar fabricados artesanalmente: potas, sartenes, cestos, peneiras, cubiertos de madera, calzado...

El responsable del negocio es Javier Vecino, quien en los últimos treinta años ha vivido en diferentes barrios de la ciudad el progresivo cierre de tiendas como la suya y otros comercios característicos de barrio (fruterías, carnicerías, papelerías) que han cerrado debido a la variedad de productos similares que también ofertan las cadenas y las grandes áreas comerciales.

Expositores con cuchillos y calzado artesanal en Vecino.

Expositores con cuchillos y calzado artesanal en Vecino. Quincemil

Vecino empezó en el sector de las ferreterías hace tres décadas. Primero cogió un negocio que cerraba en Eirís, en un bajo donde hoy solo mantiene el almacén para su local de la calle Plaza, y después tuvo otras dos tiendas en Monasterio de Caaveiro y avenida Peruleiro, ya cerradas. La de la zona de San Agustín es heredera del traspaso de otra ferretería muy próxima y longeva, Saavedra, y allí su dueño apostó por la comercialización singular de cuchillos sin olvidarse de multitud de productos de ferretería y hogar.

"El mercado cambia, pide especializarse. Hay mucha gente que usa los cuchillos: para caza, pesca, hogar, cocina, hostelería... Ha crecido la afición por cocinar y hoy muchos jóvenes compran cuchillos variados para preparar platos especiales, cortar carne o castañas, untar queso...", comenta Vecino.

Cestos artesanales en Vecino.

Cestos artesanales en Vecino. Quincemil

Aclara que las grandes superficies, plagadas de gamas distintas de productos, no siempre cuentan con todo lo que el cliente precisa, por ejemplo en el segmento de los cuchillos. En su negocio sí: "Aquí hay mucho más que sota, caballo y rey, hay todo tipo de referencias y cuchillos que no se encuentran en cualquier sitio".

De Asturias a Japón

El 70% de las navajas y cuchillos que se ven en el escaparate y en el interior de Vecino son fabricados en España, en Cantabria, Asturias y Albacete, una parte de ellos rústicos, muy artesanales. El resto procede de Italia, Francia, Alemania, Suiza o Japón. "Al buen cuchillo lo caracteriza una buena adherencia en el mango y un sólido acero", dice el propietario, que al fondo en su local de unos 70 metros cuadrados tiene un pequeño taller con dos máquinas afiladoras.

Escaparates de Vecino, con cuchillos a la izquierda y utensilios del hogar a la derecha.

Escaparates de Vecino, con cuchillos a la izquierda y utensilios del hogar a la derecha. Quincemil

El arsenal de cuchillos que muestra la fachada de Vecino, así como los artículos de cocina, no escapan de la atención de los transeúntes. Los turistas también se han dejado seducir por esa visible oferta, asegura el propietario, y son buena parte de su público, así como "gente de casas rurales".

"Cuando un cliente de siempre o un vecino me dice que le gusta el escaparate y el negocio no puedo sentirme más contento", confiesa Javier Vecino un sentimiento que comparte con su empleada, Mónica. "Dicen que prefieren comprar aquí porque lo que tenemos ya no se ve en todas partes, y nos piden que negocios como estos no deben cerrar".