Nochevieja "express" en A Coruña: el reloj de María Pita, cinco minutos adelantado
Una Nochevieja para el recuerdo. A Coruña daba la bienvenida al 2020 con cierta antelación, al menos eso es lo que reflejaba el reloj del Palacio Municipal de María Pita, que a medianoche marcaba las "doce y cinco". Todo fue fruto de un "desajuste" en las agujas del reloj municipal, que iban adelantadas al sonido de las campanadas.
"La gente tomó las uvas a las 12, pero el minutero marcaba y cinco", ha explicado a Quincemil Carlos Sánchez, el gerente de Dans Relojeros, empresa encargada del mantenimiento de los relojes públicos en A Coruña.
¿Significa que los coruñeses tomaron la uvas por adelantado? No. En realidad, tal y como señala Sánchez, aquellas personas que se acercaron hasta la plaza de María Pita para tomar las uvas al son de las campanadas de la Casa Consistorial lo hicieron en hora.
Las campanadas sonaron a su hora
Cuando sonaron las campanadas eran las 12 en punto, aunque en realidad si uno echaba un vistazo al reloj veía que este marcaba las doce y cinco.
Seguro que más de uno se llevó alguna sorpresa, pero todo quedó en una anécdota. Un recuerdo que seguro que queda en la memoria de todos aquellos coruñeses que despidieron el 2019 ante la atenta mirada de María Pita. ¡Vaya entrada de año!
Ajuste manual
Este péndulo, al igual que el resto de relojes de la ciudad, se inspeccionan de manera diaria, según nos cuenta Carlos Sánchez. De cara a las campanadas de Nochevieja, se revisa con mayor precisión si cabe. "Son máquinas con más de un siglo de antigüedad", por lo que todos sus ajustes "se realizan de manera manual", explica Sánchez.
En este caso parece que hubo un fallo de sincronización entre agujas y sonido. Fue una Nochevieja "apurada": la gente engullía las uvas al ritmo de unas campañas en hora, pero con la vista puesta en un reloj adelantado.
