Los trabajadores de Extel en A Coruña conocieron la venta de la filial por una nota en el tablón
Los casi 650 trabajadores de la oficina de Extel en A Coruña conocieron a través de una nota en el tablón de avisos el pasado jueves que esta filial de Adecco ha sido vendida a ABS con fecha de 1 de enero. Por el momento, la plantilla desconoce en qué medida le afectará el cambio de propiedad.
"Sobre las 10 de la mañana nos enviaron un correo electrónico convocándonos a una conferencia. Por parte de Adecco alegaron que no tenían centrado el negocio en empresas de telemarketing y que habían tomado la decisión de la venta. Por parte de ABS insistieron en que ellos quieren seguir creciendo en el sector, que están comprando empresas", relata Inés Papín, responsable de la sección de CC.OO. en el comité de Extel en A Coruña.
A través de un altavoz, en multiconexión con las otras oficinas de Extel en España, comunicaron la venta de Extel a ABS a las 21 personas que componen el comité de empresa. "Simultáneamente, mientras nos hablaban a través del telefonillo, colgaban la notificación en los corchos explicando que ABS había comprado Extel".
"Nos dijeron que la venta ya era un hecho desde el 1 de enero y la verdad es que nos han pillado con el pie cambiado, ni siquiera sabemos nada de la empresa ABS". El interlocutor por parte de la nueva empresa propietaria de Extel fue José Ignacio Salán, director general de ABS y con anterioridad de Digitex.
No ocultan que existe una cierta preocupación sobre cómo podría afectarles y en la plantilla, que en buena parte está de vacaciones, reina la expectación. "Hay más de 100 de casos judicializados con Adecco y para muchos de ellos ya se habían alcanzado acuerdos entre los trabajadores y la empresa, hay incertidumbre sobre lo que pasará con ellos".
"Teníamos un plan de igualdad y beneficios que nos daba Adecco, por nacimiento de hijo, por boda... pero ahora entendemos que nos los pueden quitar, porque lo único que sabemos es que nuestra nómina seguirá pagándose con el CIF de Extel, aunque la propiedad haya cambiado", detalla Inés sobre otras de las inquietudes en estos momentos.
"Esperamos que la próxima semana podamos ir planteando algunas de las muchísimas dudas que tenemos. Pediremos una reunión y veremos si la intención por su parte es actuar de buena fe y aclararnos posibles cambios", señala Papín, a la expectativa de conocer más detalles de las implicaciones.
