La publicación por parte de EL ESPAÑOL de unas páginas manuscritas de Rosalía Iglesias, en las que la esposa de Luis Bárcenas recopilaba argumentos con los que poder presionar en su día al PP, va a ayudar a arrojar luz sobre el caso y las circunstancias que lo rodean.

Las anotaciones, al margen de su valor probatorio, ponen en entredicho a varios dirigentes populares, empezando por Mariano Rajoy, al que se cita expresamente. Hay que tener en cuenta que estos papeles no fueron escritos para ver la luz, que se redactaron cuando los Bárcenas reunían información que les permitiese demostrar la existencia de una caja B en el partido y que tienen la espontaneidad de lo confidencial entre marido y mujer. Todo ello da un plus de verosimilitud a su contenido.

Las notas hablan de pagos de dinero negro a Rajoy, Rato, Arenas, Cascos y Mayor Oreja, así como de unas obras de reforma en el domicilio del presidente del PP que habrían sido abonadas por una empresa a la que el partido pagaba en B.

Las notas no se le entregaron al juez

Otro elemento que refuerza la importancia de esta información tiene que ver con las circunstancias en las que sale a la luz. EL ESPAÑOL no accede a la documentación a través de la familia Bárcenas. El ex tesorero hace tiempo que descartó tirar de la manta. Al parecer, está convencido de que incrementar la tensión con el partido en el Gobierno podría perjudicar sus intereses. Nada se ha sabido, de hecho, de las grabaciones en su poder de las que tanto se habló en su momento y que implicarían al propio Rajoy y otros dirigentes del PP.

Las notas de Rosalía llegan a EL ESPAÑOL como consecuencia de la pugna que mantienen dos sectores dentro de la Policía. Unos agentes culpan a otros de haber accedido a esa información y de haber hecho seguimientos relacionados con el caso Bárcenas no para ayudar al juez en la investigación, sino para tratar de proteger los intereses del PP. Eso explicaría que los manuscritos, que el propio Bárcenas admite hoy en nuestras páginas que fueron redactados por su mujer, no fueran entregados al juez.

Corroboran los papeles de Bárcenas

Es evidente que el valor de esos documentos policiales hubiera sido mucho mayor hace dos años, cuando se instruía el sumario de los papeles de Bárcenas, pues las anotaciones corroboran lo reflejado en la contabilidad B. Hubiera sido difícil para el instructor negarse a citar a declarar a Rajoy, al menos como testigo, tal y como hizo con Arenas y Copedal. Ya no estamos en esa fase procesal, pero aun así las referencias siguen siendo muy comprometedores para el presidente y para la dirección del PP.

Una vez conocida la existencia de los papeles de Rosalía, lo lógico es que fueran incorporados al sumario e investigados en dos sentidos: en lo que se refiere a la verosimilitud de lo que consignan, y en lo tocante a la forma en que fueron obtenidos por la Policía y mantenidos al margen de las diligencias judiciales.