Nicolas Sarkozy y su mujer, Carla Bruni, fotografiados este martes antes del ingreso en prisión del expresidente galo.

Nicolas Sarkozy y su mujer, Carla Bruni, fotografiados este martes antes del ingreso en prisión del expresidente galo. Sarah Meyssonnier Reuters

Europa

Sarkozy, primer expresidente francés entre rejas: ingresa en la prisión de La Santé para cumplir su condena de 5 años

El exmandatario galo abandonó su casa acompañado de su mujer, Carla Bruni, y fue despedido por un pequeño grupo de seguidores.

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D. Barreira
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Las claves

Nicolas Sarkozy, expresidente francés, ingresa en la prisión de La Santé para cumplir una condena de cinco años por financiar ilegalmente su campaña presidencial de 2007 con fondos del régimen libio de Muamar el Gadhafi.

El traslado de Sarkozy a la prisión fue escoltado por un pelotón de motos de la Policía y periodistas, mientras su esposa Carla Bruni le acompañaba hasta el vehículo.

El tribunal condenó a Sarkozy por "asociación ilícita", imponiéndole también una multa de 100.000 euros y privándole de derechos civiles por cinco años, aunque ha presentado un recurso de apelación.

Nicolas Sarkozy, condenado a cinco años de cárcel por financiar ilegalmente la campaña que le llevó al Elíseo en 2007 con dinero del excéntrico dictador libio Muamar el Gadafi, ya se encuentra en la prisión de La Santé, donde cumplirá el dudoso honor de ser el primer jefe del Estado francés desde la instauración del régimen republicano en ser encarcelado.

El expresidente de la República francesa (2007-2012) abandonó su casa, en el distrito 16 de París, pocos minutos después de las 9:00 horas de la mañana de este martes, agarrado de la mano de su esposa Carla Bruni y en compañía de sus hijos y sus hermanos. Antes de subirse al coche dedicó saludos y agradecimientos a las personas que se habían congregado para aplaudirle y transmitirle su apoyo cantando la Marsellesa.

El vehículo en el que Sarkozy, que no hizo ninguna declaración, fue trasladado a la cárcel iba escoltado por un pelotón de motos de la Policía y de periodistas y ha cruzado algunas de las zonas más populares de París. Pocos minutos después el convoy alcanzó el complejo de la prisión.

Sarkozy entra en la prisión parisina de La Santé

"No es un expresidente de la República quien está siendo encarcelado esta mañana, sino un hombre inocente", afirmó Sarkozy en un mensaje publicado en su cuenta de X cuando se dirigía a la cárcel. "Seguiré denunciando este escándalo judicial, este via crucis que he sufrido durante más de diez años (...) La verdad triunfará, pero el precio a pagar será devastador", auguró.

El exmandatario fue considerado culpable de "asociación ilícita" por haber permitido "a sus próximos" que buscaran financiación ilegal en el régimen libio. Según el tribunal, se trata de "hechos de una gravedad excepcional cuya naturaleza alteraría la confianza de los ciudadanos en quienes les representan".

Nicolas Sarkozy, acompañado de Carla Bruni, despidiéndose de sus partidarios.

Nicolas Sarkozy, acompañado de Carla Bruni, despidiéndose de sus partidarios. Benoit Tessier Reuters

La sentencia impuso además a Sarkozy una multa de 100.000 euros y lo privó de derechos civiles y cívicos durante cinco años, periodo para el que se estableció su inelegibilidad. A pesar de que la condena no es firme, ya que ha presentado recurso de apelación, debía entrar en prisión al haber añadido el tribunal la "ejecución provisional".

Según informa el diario Le Monde, los abogados del exmandatario galo han presentado un escrito solicitando la libertad inmediata para su representado. El tribunal tendrá en torno a un mes para decidir el recurso y el futuro del antiguo líder conservador. Mientras tanto, Sarkozy permanecerá en la unidad de aislamiento en una celda individual de unos diez metros cuadrados y no mantendrá contacto con otros reclusos durante las actividades en el exterior por razones de seguridad.

El diario Le Figaro ha detallado que el expresidente se ha llevado consigo tres libros, incluyendo un ejemplar de El Conde de Montecristo de Dumas, la clásica novela de aventuras en la que un hombre es injustamente encarcelado y trama su venganza contra los que le traicionaron. Por un precio mensual de 16 euros también tendrá acceso a la televisión.

Christophe Ingrain, uno de los abogados de Sarkozy que estuvo presente en el traslado, explicó a la cadena BFMTV que el encarcelamiento "refuerza su determinación y su rabia para demostrar que es inocente". "Objetivamente no hay ninguna razón para que el tribunal de apelación rechace esta liberación, pero existe incertidumbre jurídica y la afrontaremos", señaló el letrado, quien adelantó que "no habrá trato preferente" para él y que "su solicitud se examinará dentro del plazo habitual".

El abogado adelantó que Sarkozy pasará "entre tres semanas y un mes detenido antes de que se pronuncie el tribunal" sobre su demanda de puesta en libertad, que de ser aceptada le permitiría comparecer libre en el juicio en apelación previsto para marzo de 2026. Durante el tiempo que pasará en La Santé, el exjefe del Estado tiene intención de aprovechar para "escribir sobre su experiencia, sobre la injusticia de la que es víctima".

Sarkozy, no obstante, no es el primer jefe del Estado galo en ser condenado: ese deshonor le corresponde al difunto Jacques Chirac (presidente de la República entre 1995 y 2007), que recibió una pena de dos años de cárcel por desviar fondos públicos. Enfermo, no asistió a su proceso, no apeló y, evidentemente, no pasó una sola noche entre rejas.