
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, durante una visita al frente en la región de Donetsk, en junio de 2023. Reuters
Trump rebaja la falsa deuda de Ucrania a 350.000 millones para sacarle la mitad de sus minerales sin garantizarle la paz
Zelenski viajará este viernes a Washington para rubricar un acuerdo que no contempla garantías de seguridad.
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Hay trato. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, anunció este miércoles que la cesión del 50% de los rendimientos futuros de sus recursos naturales a Estados Unidos forma parte de un “acuerdo marco” que no contempla garantías de seguridad cuyo cumplimiento dependerá en última instancia de la disposición de Donald Trump a ofrecerlas más adelante.
El mandatario ucraniano aterrizará en Washington este viernes para suscribir lo pactado, según la Casa Blanca. “El presidente Zelenski llegará el viernes, ya está confirmado. Y vamos a firmar un acuerdo, va a ser un gran acuerdo”, avanzó Trump, que acusó a la Administración de Joe Biden de colocar “en muy mala posición” a EEUU. “Pero hemos podido llegar a un acuerdo mediante el cual recuperaremos nuestro dinero y obtendremos mucho dinero en el futuro. Y lo más importante para hoy es que vamos a llegar a un acuerdo con Rusia y Ucrania para que dejen de matar gente”, añadió el mandatario republicano sin aportar más detalles.
De acuerdo con el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, los emisarios del Kremlin y de la Casa Blanca volverán a verse las caras este jueves en Estambul para discutir la reapertura de sus respectivas embajadas, uno de los múltiples asuntos discutidos durante su primera toma de contacto en Riad. El segundo encuentro bilateral entre las delegaciones rusa y estadounidense es una muestra de que el denominado “acuerdo del subsuelo” alcanzado este miércoles con Kyiv no pone tierra de por medio entre Trump y Putin.
“La clave para mí fue que no somos deudores. Y a pesar de lo que dicen los medios no hay deuda de 500.000, 350.000 o 100.000 millones de dólares en el acuerdo, porque eso sería injusto para nosotros”, se justificó Zelenski en rueda de prensa. “La cuestión de los fondos también está resuelta; veo que se menciona a los socios”.
El presidente ucraniano hizo referencia a las cifras con las que Trump ha especulado estas últimas semanas. El inquilino de la Casa Blanca exigió inicialmente 500.000 millones de dólares a Ucrania en forma de tierras raras y minerales críticos. Un número redondo. Una cantidad que, según las cábalas de la Administración estadounidense, Washington ha prestado a Kyiv desde que diera comienzo la invasión rusa de febrero de 2022.
Trump rebajó el martes sus exigencias maximalistas sin motivo aparente. “Hemos gastado 350.000 millones. Acabamos de darles, si son 300.000 o 350.000 millones, nadie lo sabe realmente. Ni siquiera pueden decirme la respuesta a eso, significa probablemente más que eso”, apuntó. No obstante, los cálculos del mandatario republicano son falsos. Del total de 182.000 millones de dólares comprometidos en estos tres últimos años con Ucrania por parte de las distintas agencias e instituciones de EEUU, sólo se han desembolsado 83.400 millones, según se desprende de los datos oficiales. Además, en términos absolutos, EEUU sólo ha gastado el 0,19% de su PIB en ayuda militar a Ucrania, de acuerdo con el Financial Times.
“Este acuerdo puede ser un gran éxito o pasar desapercibido”, deslizó este miércoles Zelenski. “El gran éxito depende de la conversación con Trump”, resumió.
“Este acuerdo está directamente vinculado a las garantías de seguridad. Ni el presidente de Ucrania ni el Gobierno de Ucrania considerarán este acuerdo y su firma al margen de las garantías de seguridad para Ucrania”, indicó por su parte el primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal, que aludió a la décima cláusula del acuerdo que se ha hecho público este miércoles. Matizó Shmyhal que el documento íntegro consiste en un acuerdo preliminar sobre la creación de un fondo de inversión para la reconstrucción de Ucrania. Un fondo conjunto al que Kyiv aportará “el 50% de todos los ingresos obtenidos de la futura monetización de todos los activos de recursos naturales pertinentes de propiedad del Gobierno de Ucrania”. Se trata, recoge el tercer apartado del acuerdo, de “los yacimientos de minerales, hidrocarburos, petróleo, gas natural y otros materiales extraíbles, y otras infraestructuras pertinentes para los activos de recursos naturales”.
¿Qué recibe Ucrania a cambio? Otros “350.000 millones de dólares, equipamiento militar y el derecho a seguir luchando”, respondió Trump el lunes desde el Despacho Oval.
La Administración estadounidense se limita a recoger en el documento que “desea invertir junto a Ucrania en una Ucrania libre, soberana y segura”. Nada que cumpla las pretensiones de los de Zelenski. “Más adelante nos ocuparemos de la seguridad general de Ucrania. No creo que eso vaya a ser un problema. Hay mucha gente que quiere hacerlo, y hablé con Rusia sobre ello. No parecían tener ningún problema. Así que creo que entienden que no van a volver. Y una vez que lo hagamos, no van a volver”, añadió Trump.
“En primer lugar, se trata de un acuerdo marco, en el que Ucrania y EEUU establecen su intención de colaborar en la extracción de minerales críticos. Los aspectos técnicos del fondo de inversión se abordarán en el segundo acuerdo, más detallado”, resume Marianna Fakhurdinova, investigadora asociada del New Europe Center, en conversación con EL ESPAÑOL. Vitlaiy Yarmolenko, consultor jefe del Instituto Nacional de Estudios Estratégicos, considera que el pacto “será ambiguo y, en ocasiones, incluso controvertido para Ucrania. Aunque parece más justo desde el punto de vista financiero y económico que los borradores previos”.
“Ucrania podría recibir una base sólida para una recuperación posterior a la guerra debido a una mejor gestión de la extracción de recursos minerales, que potencialmente no sólo concierne a los minerales de tierras raras, sino también al gas, minerales de metales ferrosos, carbón, etcétera”, traslada Yarmolenko a este periódico. “Esto conduciría a una reestructuración dinámica de la economía ucraniana y a la desaparición definitiva de los grupos oligárquicos”, anticipa el analista, que subraya un factor clave: “La guerra en curso no permitiría llevar a cabo un acuerdo de este tipo sin al menos un acuerdo de alto el fuego entre Ucrania y Rusia y garantías de seguridad concedidas por los propios EEUU y las misiones militares de los países europeos”. Ese es precisamente el argumento que esgrime Trump para no hacer más concesiones a Zelenski.
La presidenta de la Kyiv School of Economics, Nataliia Shapoval, considera que el acuerdo preliminar “confía en la estrategia de negociación de Trump y establece el compromiso de Ucrania de contar con Estados Unidos como principal actor en la recuperación”.
“Desde un punto de vista puramente económico, el acuerdo parece prometedor: un fondo cogestionado invierte en nuevos proyectos sobre minerales críticos y tierras raras y infraestructuras, canalizando miles de millones de inversión estadounidense. Esto también abre instrumentos de financiación más flexibles, creando oportunidades para la reinversión a gran escala en el sector de las materias primas de Ucrania”, escribe en la red social X.
“Sin embargo, a los ucranianos —esa es mi sensación— les preocupa que el acuerdo no ofrezca garantías explícitas de defensa. Desde el punto de vista político, es una apuesta”, añade Shapoval. “El Gobierno de Zelenski confía en que el estrechamiento de los lazos económicos se traduzca en mejores compromisos en materia de seguridad”. “Por ahora, yo diría que Ucrania procede con un optimismo cauteloso”, condensa. Pero Trump no da muestras de querer ir más allá. “Estaremos en el terreno, y de esa manera habrá seguridad automática porque nadie se va a meter con nuestra gente cuando estemos allí”, añadió el mandatario estadounidense en ese sentido.
“El Gobierno de Zelenski tendrá que seguir adelante con una buena estrategia de comunicación para explicar a la población los beneficios del acuerdo”, añade por correo Fakhurdinova. “Al mismo tiempo, la inmensa presión política sobre Ucrania por parte de la Administración estadounidense, así como los intentos de convertir la ayuda irrevocable de subvención a Ucrania en préstamos trajeron muchas turbulencias a las relaciones entre Ucrania y EEUU. Las amenazas abiertas del presidente Trump a Ucrania sobre el acuerdo, así como las cifras claramente inexactas sobre la ayuda estadounidense proporcionada a Ucrania durante tres años de guerra causaron mucha frustración en Ucrania”.
Antes incluso de la invasión rusa a gran escala, esto es, sin contar con la mutilación territorial infligida por la guerra, Ucrania figuraba entre los diez mayores productores de titanio, circonio, grafito y manganeso del mundo, indica Shapoval. El país cuenta con depósitos de 22 de los 34 minerales críticos que tanto la Unión Europea como Estados Unidos consideran estratégicos para el desarrollo de tecnologías de última generación. Una suculenta baza de negociación que Zelenski tratará de exprimir lo máximo posible para llevar a Trump a su terreno.