Europa

Macron saca blindados a las calles para evitar una nueva noche de violencia tras la muerte de Nahel

El Gobierno francés se prepara para más manifestaciones en las próximas horas que "serán decisivas".

30 junio, 2023 20:19
Agencias

La muerte de Nahel, un joven de origen argelino de 17 años abatido por un agente de policía el pasado martes en el suburbio Nanterre, al oeste de París, ha desatado en Francia una oleada de violencia que no se veía desde 2005. Por tercer día consecutivo los manifestantes han prendido fuego a coches y edificios, y se han registrado enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad en distintas ciudades del país galo. 

La tensión -como el número de detenidos- no deja de aumentar, y las medidas que el Gobierno ha puesto en marcha para "calmar la situación" parecen no estar funcionando. Ni el despliegue de 40.000 policías, ni el toque de queda nocturno, ni el corte de la circulación del transporte público ni la prohibición de manifestarse en algunas zonas han logrado frenar los disturbios. Por eso, el presidente Emmanuel Macron, que se vio obligado a interrumpir su visita a Bruselas para convocar hasta en dos ocasiones una reunión de crisis con su gabinete, ha decidido dar un paso más este viernes y sacar a la calle los blindados Centauro de la gendarmería, recoge Le Monde.

Ha sido la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, la que ha anunciado el despliegue de estos vehículos, según recoge la prensa francesa. Asimismo, Borne también ha detallado que se movilizarán "fuerzas móviles adicionales" y se cancelarán "eventos a gran escala", como conciertos multitudinarios, según el diario Le Figaro

[Los 40.000 policías no impiden el caos en Francia: 500 edificios asaltados y 1.900 coches quemados]

De esta manera, Macron está cumpliendo con su promesa de adaptar el dispositivo de mantenimiento del orden "sin tabúes", aunque por el momento ha descartado convocar el estado de emergencia como sí hizo el presidente Jacques Chirac hace 18 años ante unos disturbios similares. Macron, que este año ya ha visto su carrera política en peligro en más de una ocasión por la aprobación de su polémica reforma de las pensiones, se enfrenta ahora a la peor crisis de liderazgo desde las protestas de los chalecos amarillos en 2018.

Los altercados, que empezaron en Nanterre, se han extendido ahora por todo el territorio, incluso por grandes ciudades como Marsella, Lyon, Toulouse, Estrasburgo o Lille. "Las próximas horas serán decisivas", ha confesado el ministro del Interior, Gérald Darmanin, que, en declaraciones recogidas por Reuters, ha agradecido "los impecables esfuerzos" de bomberos y agentes de policía.