El secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, reacciona mientras testifica en una audiencia del Comité de Relaciones Exteriores del Senado sobre la solicitud de presupuesto del Departamento de Estado, EEUU, el 20 de mayo de 2025.

El secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, reacciona mientras testifica en una audiencia del Comité de Relaciones Exteriores del Senado sobre la solicitud de presupuesto del Departamento de Estado, EEUU, el 20 de mayo de 2025. Reuters

EEUU

Un impostor suplanta la voz y el estilo de escritura de Marco Rubio con IA y logra contactar con altos funcionarios de EEUU

El intento de estafa se llevó a cabo a través de Signal, la plataforma que utiliza la cúpula de Trump para asuntos oficiales. 

Más información: La cúpula de Trump incluyó por error a un periodista durante días en un chat en el que se decidió el bombardeo de Yemen

J. Atienza
Publicada

La ciberseguridad sigue siendo una de las asignaturas pendientes de la Casa Blanca. En marzo, se supo que un periodista —ni más ni menos que Jeffrey Goldberg, redactor jefe de The Atlantic— fue añadido por error a un chat grupal secreto donde altos funcionarios discutían un ataque en Yemen. Ahora, un impostor ha logrado contactar con varios funcionarios gubernamentales haciéndose pasar por el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, gracias a un deepfake de su voz.

En concreto, según ha destapado el Washington Post, el estafador, que usó la inteligencia artificial para imitar la voz y el estilo de escritura de Rubio, llegó a intercambiar mensajes con varios ministros de Relaciones Exteriores, un gobernador y un miembro del Congreso. En total, cinco personas. Las autoridades todavía no saben quién está detrás de esta suplantación de identidad, pero creen que intentaba manipular a los funcionarios para "acceder a información o cuentas", recoge el informe al que ha accedido el diario estadounidense.

El intento de estafa se ha llevado a cabo a través de una plataforma que la Administración de Donald Trump conoce bien. Se trata del servicio de mensajería encriptado Signal. A mediados de junio, el impostor creó una cuenta falsa con el nombre de la mano derecha de Trump: Marco.rubio@state.gov. Con ella, contactó con diplomáticos y políticos estadounidenses, pero también extranjeros.

"El individuo dejó mensajes de voz de Signal a por lo menos dos personas y, en un caso, envió un mensaje de texto invitando a la persona a comunicarse por Signal", señala el informe. El documento, de hecho, sugiere que otros empleados del Departamento de Estado fueron suplantados por correo electrónico. Al parecer, al ser preguntados por el Washington Post, el Gobierno se limitó a responder que "llevaría a cabo una investigación exhaustiva y que continuaría implementando medidas de seguridad para que eso no vuelva a ocurrir".

Esta no es la primera vez que alguien intenta suplantar la identidad de un alto cargo del Gobierno de EEUU. En mayo, alguien logró entrar en el teléfono de la jefa de Gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, y comenzó a llamar y a enviar mensajes a senadores, gobernadores y empresarios, según informó entonces el Wall Street Journal. Más tarde, el incidente del chat de Signal desembocó en la destitución del entonces asesor de seguridad nacional, Michael Waltz.

Ante estos episodios, el FBI envió y publicó un aviso a los funcionarios estadounidenses de que desde abril habían detectado una campaña maliciosa de mensajes de texto y de voz para hacerse pasar por altos funcionarios estadounidenses. "Si recibe un mensaje que dice ser de un alto funcionario estadounidense, no dé por sentado que es auténtico", recoge la advertencia.

Lo cierto es que en los últimos meses, la difusión de deepfakes con intenciones políticas se ha multiplicado a través de las redes sociales, evidenciando la facilidad con la que se puede suplantar a un personaje público. Durante la campaña presidencial de EEUU, por ejemplo, algunos ciudadanos de New Hampshire recibieron un mensaje de voz que imitaba al expresidente Joe Biden pidiéndoles que no votaran. Luego, el magnate Elon Musk, uno de los mayores defensores de Trump hasta su reciente divorcio, compartió en su red social X un vídeo falso de Kamala Harris.