Hacer fotografías por debajo de las faldas se convierte en delito en Reino Unido.

Hacer fotografías por debajo de las faldas se convierte en delito en Reino Unido.

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Hacer fotografías por debajo de las faldas, nuevo delito de hasta 2 años de cárcel en Reino Unido

El delito de 'upskirting', catalogado ahora como delito sexual, podría acarrear hasta dos años de cárcel y figurar en la lista de agresores sexuales.

12 abril, 2019 12:59

Reino Unido y Gales acaban de incluir en su código penal un nuevo delito sexual: el 'upskirting'. Esta práctica acaba de entrar en la lista de delitos sexuales en la legislación británica, y quienes sean condenados por esta práctica podrían enfrentarse a hasta dos años de cárcel.

El 'upskirting', que podría traducirse como 'levantar faldas', consiste en hacer fotografías a mujeres por debajo de la falda, con la intención de "ver los genitales o las nalgas".

La propuesta de convertir esta práctica en delito se comenzó a tramitar después de recibir el 'consentimiento real' el pasado febrero. Ademas, los condenados por este delito figurarán en la lista de agresores sexuales.

El pasado lunes 12 de abril culminó la "incansable campaña" de Gina Martin y otras víctimas del 'upskirting', y demás agentes que han trabajado para conseguir crear esta nueva ley para proteger a las mujeres que han sufrido y podrían sufrir esta práctica.

Martin, cuando tenía 27 años, sufrió un episodio de estas características cuando se encontraba en un festival de música en Hyde Park (Londres). Un hombre se acercó a ella y tras entablar conversación tomó una foto con su teléfono móvil por debajo de su falda para, posteriormente, enviar la imagen por Internet.

La activista ha dicho que está "muy feliz de que esto se lleve a cabo. Finalmente tenemos una ley adecuada que proteja ante cualquier acto de 'upskirting'". Martin ha añadido que, a pesar de este logro, "solo es el principio, por favor alza tu voz y denuncia si te ocurre esto".

"Pretende obtener un beneficio sexual"

Hasta ahora, esta práctica era catalogada y perseguida dentro de la ley británica de Decencia Pública, que podía acarrear multas e incluso cárcel, pero que no era suficiente para este delito, pues ya no solo supone un delito de escándalo público, sino que atenta contra una persona en concreto. Por eso se ha creado esta ley concreta.

Y es que esta práctica tiene lugar con el objetivo de obtener "beneficio sexual" o para causar "humillación" a la víctima. Ahora, esta ofensa se engloba en la ley de delitos sexuales de 2003, creando dos nuevos apartados concretos para el 'upskirting'.

La ministra de Justicia Lucy Frazer ha dicho que "no hay excusa para este comportamiento y los que lo hagan deberán sentir el peso de la ley", dice. "Desde hoy, lo harán".