Letizia y el nuevo rol de la mujer en la monarquía: las reinas consortes ya no son floreros sino protagonistas

Este viernes 15 de septiembre, Letizia celebra su 51 cumpleaños, discretamente, sin actos oficiales como es su costumbre aunque siempre hay fiesta privada. Hace casi una década que se ciñó la corona y en este tiempo ha desempeñado su papel con determinación e imprimiendo su propia personalidad a su agenda. Las actuales reinas consortes nada tienen que ver con las del pasado, tienen su propio peso en la Institución y, en muchos de los casos, juegan un papel fundamental en la Monarquía.

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Entre los temas que más preocupan a Letizia y que son el pilar de su labor oficial está la salud mental (en 2022 fue nombrada Defensora para la Salud Mental de la Infancia y Adolescencia por Unicef), las enfermedadas raras -donde su implicación personal es muy fuerte-, la defensa de la igualdad, contra las violencias machistas, el liderazgo de la mujer y también los proyectos de cooperación.

El carácter feminista de su agenda ha ido in crescendo. Las palabras que pronunció en una entrega de premios en 2015 mostraban claramente sus intenciones: "En el mundo de la mujer hay muchas cosas que se pueden hacer de otra manera. Hay muchas cosas que deben mejorar y cambiar. Por mencionar algunas: las tasas de analfabetismo, los matrimonios de niñas menores de edad, el paro femenino, la desigualdad en los salarios y en el tiempo que hombre y mujer dedican a la casa y a los niños". 

Los Reyes, en Mallorca este verano. Gtres

En MAGASIN hemos contactado con varios expertos en la materia para analizar con detalle la figura de la esposa de Felipe VI, su labor como reina consorte y su evolución. Lo primero a destacar es cómo ha cambiado el papel de las esposas de Reyes a lo largo de la historia para entender mejor el contexto. Moisés Ruiz, experto en Liderazgo y Comunicación, lo explica así: "Las reinas consortes actuales quieren ser un reflejo de la nueva sociedad. El papel de la mujer ha cambiado, es más protagonista, más emprendedor y la Monarquía no puede exhibir roles de otra época, porque eso le haría alejarse del afecto popular. Las reinas del siglo pasado remarcaban su condición de madres, esposas y educadoras del futuro Rey. Las reinas del siglo XXI toman iniciativa, marcan su propia idiosincrasia".

Incide en esta idea la escritora Ana Polo, autora de libros sobre realeza como La Reina: La increíble vida de Isabel II: "El principal problema que tienen hoy en día las reinas consortes como Letizia o Máxima de Holanda y también las princesas es que lo que se espera de ellas no tiene nada que ver con lo que se esperaba hace unos años. Antes era una persona escogida por pedigrí y capacidad de tener hijos, hoy esta visión es anacrónica y se espera muchisimo más de ellas. El problema está en definir si es un mero acompañamiento del Rey que se dedica a hacer obras más benéficas o si debe tener un mayor peso. En la actualidad deben ser madres y esposas y también tener un papel mucho más ejecutivo, que lideren una gran causa".

Refiriéndose a Letizia en concreto, Moisés Ruiz considera que "un ejemplo del nuevo rol de la mujer en la monarquía. Desde el minuto uno quiso crecer en su rol de reina marcando su estilo propio, su personalidad. Es consciente de la nueva era audiovisual, de lo importante de su presencia en eventos. Podría ser perfectamente una reina influencer porque ha entendido lo que se espera y lo que puede dar una reina a la corona y a la nación".

Precisamente su imagen pública en ocasiones sirve de hilo conductor perfecto para lo que quiere decir, sin necesidad de decir nada. El vestido de Ulises Mérida, confeccionado en colaboración con la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida, que lució en 2021 durante una reunión de trabajo con el Patronato de la Fundación de Ayuda Contra la Drogadicción en Madrid es un ejemplo. Apostar por firmas de moda sostenible también manda un mensaje de protección del medioambiente, como los colores o los estampados que elige para un acto determinado. Su blusa con bordados del folclore ucraniano que llevó en marzo de 2022 en la entrega de las Ayudas a Proyectos Sociales de la Fundación Mutua Madrileña supuso una condena implícita a la guerra.

La Reina es consciente de que su función no es ir a la cabeza, porque a la cabeza está su marido, pero sí quiere ejercer su liderazgo y de hecho lo ejerce escribiendo sus propios discursos e incluso ayudando al Rey con los suyos. Carmen Duerto, autora del libro Letizia. Una mujer real, así lo explicaba en declaraciones a EL ESPAÑOL: "Letizia ha ayudado al Rey a mejorar su forma de comunicar. La dicción de Felipe es ahora mil veces mejor, sus discursos están mejor desarrollados. Tener a una periodista en casa con una visión tan estupenda como la de Letizia Ortiz le ha hecho ganar mucho". Ha aportado su sello personal incluso en Zarzuela, transformando los menús y fomentando el uso de productos ecológicos y de kilómetro cero y ecológicos. 

Letizia es Defensora de la Salud Mental de Unicef. Gtres

Para algunos expertos en la materia como Ana Polo, el papel de la Reina consorte aún tiene una asignatura pendiente: liderar con fuerza alguna gran causa que se convierta en uno de los ejes principales de sus deberes oficiales y una mayor apertura a nivel de comunicación. "Letizia es una mujer muy espabilada e inteligente. El problema de Letizia no es Letizia, sino la comunicación de Zarzuela, que es muy antigua. La Reina, por su carácter, necesita algo mucho más dinámico, Se la intenta encasillar en el papel que tenía la emérita Sofía en cuanto a la naturaleza de su agenda, pero sin que nada tenga realmente impacto a nivel mediático. Eso hace que al fina se acabe hablando más de su ropa".

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En su opinión, la esposa de Felipe VI "tiene que concentrarse en una gran causa, como ha hecho Kate Middleton con la salud mental y la infancia. Tendría que liderar algo así. Además, Letizia se siente cómoda con temas de mujeres, por lo que deberían encontrar algún hueco más para ello. Que una reina hable de feminismo y de los derechos de la mujer es normal". Los viajes de cooperación han tomado mucho peso en los últimos años, aunque se "echa en falta más discursos con mensaje en ellos. Los viajes de cooperación quedan algo diluidos por su falta de declaraciones". 

Letizia, en un viaje de cooperación y en la final del Mundial de fútbol femenino. Gtres

Otro de los focos de la madre de la Princesa de Asturias dentro de sus deberes es apoyar y dar visibilidad al deporte femenino. Su presencia en la final del Mundial en Sidney (Australia), junto a la infanta Sofía fue un auténtico triunfo que Letizia apuntó para la Corona. Se convirtió en protagonista absoluta con su apasionada celebración, saltando mientras las campeonas españolas gritaban: "Leti, Leti, que bote la Reina" acaparó la atención de la prensa nacional e internacional. Un gesto más de apoyo a las mujeres deportistas con el que ha hecho historia.