Cómo hacer espetos de sardinas en casa como un auténtico chiringuito malagueño
El sencillo truco para hacer espetos de sardinas en casa: al estilo de un auténtico chiringuito malagueño
Este plato es seña de identidad del buen tiempo en la costa malagueña, pero puedes aprovechar la temporada de este pescado para hacerlos en casa con el mismo sabor.
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El espeto de sardinas es una de las señas de identidad gastronómica de Málaga. Esta técnica de cocinado, que consiste en ensartar sardinas en una caña y asarlas al fuego, tiene sus raíces en la tradición pesquera malagueña de hace siglos.
El término espeto proviene del verbo "espetar", que significa atravesar. Originalmente, los pescadores malagueños utilizaban cañas para ensartar las sardinas y cocinarlas directamente sobre brasas encendidas en la arena, normalmente en una barca llena de arena cerca del mar. Hoy en día, esta imagen sigue siendo una postal típica de los chiringuitos malagueños, especialmente en verano.
Tanta es la importancia de este plato que en 2006 se erigió una estatua dedicada al espeto en la ciudad de Málaga, y hasta Google homenajeó esta tradición con un doodle con forma de barca espetera.
Para preparar espetos de sardinas en casa, se necesitan algunas herramientas esenciales. Lo ideal es disponer de cuatro espetos, ya sean de caña o de acero inoxidable, aunque también pueden utilizarse brochetas metálicas como alternativa. Es importante contar con una sartén amplia o una plancha que permita cocinar las sardinas sin que queden amontonadas. Además, si se opta por fabricar los espetos de forma artesanal con cañas naturales, será necesario utilizar un cuchillo afilado para darles forma con precisión.
Ingredientes
Cómo elaborar espetos de sardinas en casa (4 personas)
- 1 kg de sardinas medianas (5 o 6 por persona)
- Sal gruesa
- Aceite de oliva virgen extra
- Agua fría y hielo
- Papel de horno
Paso 1
Paso 1: Limpiar las sardinas con un paño suave, sin quitar cabeza ni vísceras. Sumergir en agua con hielo durante media hora.
Paso 2
Paso 2: Ensartar cada sardina cuidadosamente en un espeto, introduciendo la caña por debajo de la espina. Alinear todas en la misma dirección.
Paso 3
Paso 3: Salpicar con sal gruesa por ambos lados.
Paso 4
Paso 4: Engrasar un papel de horno con aceite de oliva virgen extra. Colocar las sardinas espetadas sobre el lado engrasado, doblar el papel como un sobre ligero (sin cerrar herméticamente).
Paso 5
Paso 5: Calentar una sartén amplia a fuego alto. Colocar el "paquete" con las sardinas con el lado de la espina hacia abajo. Cocinar 2-3 minutos por lado.
Paso 6
Paso 6: Abrir el papel y sirve las sardinas al instante. Acompañar con un buen pan rústico y una copa de vino blanco o tinto joven.
Para conseguir unos espetos de sardinas perfectos en casa, hay varios trucos que marcan la diferencia. Lo ideal es no eviscerar las sardinas, ya que asarlas enteras ayuda a conservar toda su jugosidad. Antes de cocinarlas, se recomienda sumergirlas en agua con hielo durante unos 30 minutos, lo que las endurece ligeramente y facilita su manipulación.
Para evitar el humo y el olor fuerte a pescado en la cocina, es útil emplear papel de horno engrasado con un poco de aceite de oliva. Las sardinas deben salarse generosamente por ambos lados justo antes de cocinarlas, y siempre se deben colocar con el lado de la espina hacia el fuego primero, ya que esto ayuda a que no se rompan ni se caigan del espeto durante la cocción.
Pescado saludable
Las sardinas son uno de los pescados más saludables y asequibles que existen. Están cargadas de ácidos grasos omega-3, vitamina D y proteínas de alto valor biológico, lo que las convierte en un alimento muy completo desde el punto de vista nutricional. Su mejor momento es el verano, cuando su carne alcanza una mayor concentración de grasa, lo que las hace especialmente jugosas y perfectas para asar.
Aunque no se esté frente al mar Mediterráneo ni se tenga una barca espetera al alcance, con esta receta es posible recrear en casa el sabor auténtico de los chiringuitos malagueños. Los espetos de sardinas caseros son una excelente opción para una cena informal, una comida veraniega entre amigos o simplemente para disfrutar de un pequeño capricho con esencia andaluza, sin salir de casa.
