Cuando tenía no más de 5 años había una canción que se llamaba Feria. En estos días estivales de descanso, no quiero ofreceros sesudas reflexiones sobre tecnología, innovación y los deberes pendientes. No quiero denunciar que el rey sigue desnudo. Relajémonos un poco. Vivamos el momento. Disfrutemos de nuestra comunidad y nuestra cultura, de nuestros valores, del intenso Carpe Diem que nace en ese Mediterráneo que nos baña a tantos pueblos una vez visitados por jábegas fenicias. Me he querido imaginar a Málaga invitando a Sevilla a su Feria.

Vente a la Feria de día

que hoy el calor no se nota.

Vente a la feria, mi niña

que sin ti Málaga es otra.

¡Vámonos!, que en el Aranda

los churros son tejeringos.

¡Vámonos! que en mi caseta

las patatas son las papas,

caldillo de pintarroja ,

un gazpacho bien fresquito,

un plato de berenjenas,

con miel de caña del río.

Vente a la feria, mi reina,

que yo tengo cien casetas

que aquí todos son compadres

que aquí tú eres una hermana .

Veremos las novilladas

y fumaremos un puro

con mi amigo Antonio Urda

un granaíno de cuño.

Viviremos en la calle

como buenos percheleros.

Dormiremos al sereno

sobre las playas del Bulto.

Pediremos al Nereo

jábegas fenicias de remos.

Y con la Virgen del Carmen

remaremos al sereno

desde la Playa de El Dedo.

Vente niña sevillana

que aquí somos malagueños.

Vente a Málaga esta feria

la del barrio y la alegría,

la Virgen de la Victoria,

y la cerveza bien fría.

Gentes del Limonar

descamisaos de un cerro,

niñas de la Trinidad,

señorines del “Candao”,

alpargatas de San Juan,

havaianas trasnochadas,

naúticos del señorín,

y chanclas del “descamisao”.

Rebujito, Cartojal, moscatel y manzanilla,

el Pimpi no es lo que era,

Casa Guardia y pajarete

gambas blancas y cerveza.

Vente a Málaga, Triana

que del pueblo eres hermana.

Yo te traigo tu biznaga

tú agua del Guadalquivir.

Yo te canto verdiales,

tú soleares serranas.

Vente a Málaga , Gitana,

que tenemos cien casetas

todas abiertas a todos.

Vente al pueblo y a la fiesta.

¡Vente a tu casa, Gitana!

Aquí donde en el Chinitas

puso el poeta a Paquiro:

Soy más valiente que tú

más torero y más gitano”.

Aquí donde Federico
puso a Paquiro y Frascuelo:
«Soy más valiente que tú,
más gitano y más torero»

No hay lugar más abierto, hospitalario y feliz que la Feria. Acabamos el curso con el disfrute de la amistad, compartimos, reímos y nos olvidamos de que el curso que viene vamos a volver a darlo todo. Feliz Feria.