Este miércoles se ha celebrado el I Encuentro de branding organizado por EL ESPAÑOL de Málaga con la colaboración de la Diputación Provincial y la participación de Sigfrido Molina, fundador de Sigfrido Fruit, y Borja Adrián, director comercial de Finca La Torre. En este primer encuentro también ha estado presente la responsable de la marca Sabor a Málaga, Leonor García Agua.

Durante el coloquio, los tres protagonistas han discutido sobre la importancia del branding en cada uno de sus ámbitos. En este sentido, García Agua ha recordado que la enseña creada hace más de una década por el ente provincial reúne actualmente a más de 500 socios.

Así, esta es una marca de procedencia que promueve una certificación de calidad: "Hemos tenido casos de empresas que han llamado a la puerta para conseguir el sello de Sabor a Málaga, pero para eso hay que generar riqueza en la provincia", asegura García Agua. De hecho, una gran empresa de producción de bebidas "abrió una planta y nos pidió formar parte, pero les pedimos que para conseguirlo tenían que producir una parte en Málaga. Y lo hicieron", asegura. Aunque Sabor a Málaga también incluye a comercio de alimentación, hostelería e, incluso, alojamientos, lo más importante son los productos agroalimentarios. 

En ese sentido, Borja Adrián, de aceites Finca La Torre, recordaba cómo en su caso han ganado durante años el premio por la calidad de su óleo: "Han sido muchos años llevándonos el premio y llegamos a pensar en no presentarnos al concurso. Sin embargo, creemos que cuanta más competencia haya, mejor". De hecho, este año ha sido otro productor el que se ha llevado el galardón.

"Es muy complicado, yo recuerdo que tardé más de un año en conseguirlo", afirma Sigfrido Molina. "Lo acabé consiguiendo, pero no es algo fácil. Hay que tener unos requisitos de calidad" y sus productos lo consiguieron rápido. Además, Sigfrido recuerda cómo "hace no mucho nosotros éramos una de las empresas pequeñas, porque ahí está el beneficio de Sabor a Málaga, como marca nos ayuda a crecer y mejorar".

En ese sentido, García Agua confirmó que tanto Sigfrido como Finca La Torre "han pasado a ser empresas importantes dentro de Sabor a Málaga, hoy en día podemos decir que son parte de la locomotora que mantiene la enseña arriba".

Uno de los valores que aporta la marca Sabor a Málaga a sus asociados es el de mantenerlos organizados en la presencia en las distintas ferias del sector. Sin ir más lejos, hace unos días se clausuraba el Salón Carrefour y allí acudió una buena representación de productores. Así, Sigfrido Molina apuntó hacia el importante papel que juega García Agua en este sentido: "Cuando vemos que hay una feria y no nos hemos enterado por ella, le preguntamos". 

Las ferias de gastronomía y hostelería se convierten en una oportunidad de negocio a la que los pequeños productores acuden bajo la enseña común: "Yendo juntos no hay diferencias de tamaño y todos salen ganando", según García Agua. Este fin de semana, también han estado presentes en el Salón de la Alimentación del Atlántico. 

"Para una marca hay algo muy importante, que es la estrategia", recuerda García Agua. Así, Sabor a Málaga tiene una estrategia clara desde su nacimiento: "Cuando se creó, el presidente de la Diputación de entonces, Elías Bendodo, propuso crearla para ayudar al sector agroalimentario".

Anecdóticamente recuerda los inicios, con un horizonte claro desde la institución: "Cuando empezamos con las mesas sectoriales y dimos voz a los productores había quien no se creía que iba a salir adelante. Pensaban que era una reunión más con políticos". Al tiempo, afirma "ha quedado claro que la apuesta era real".

De este modo, una enseña pública ha conseguido en una década reactivar el sector agroalimentario gracias a un objetivo común. La creación de los mercados de Sabor a Málaga ha llevado a toda la provincia a los productores que, por pequeños que sean, tienen acceso a los canales de distribución que se le brindan desde el ente provincial.