El empresario Juan Carlos Cueto a su llegada este miércoles a la Audiencia Nacional para declarar.

El empresario Juan Carlos Cueto a su llegada este miércoles a la Audiencia Nacional para declarar. Europa Press

Tribunales

Cueto, el cerebro oculto, se presenta como benefactor: "Traje mascarillas a 2,5€ cuando costaban 3,5€"

El dirigente del grupo empresarial limita a 1,8 millones los ingresos percibidos "en precio de mercado" y niega que él pagara comisiones ilegales.

29 febrero, 2024 02:43

El empresario Juan Carlos Cueto, al que los investigadores sitúan en una posición central en el caso Koldo, ha asegurado este miércoles ante el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno que los contratos con el Ministerio de Transportes y otras administraciones para traer a España mascarillas en las primeras semanas de la pandemia de la Covid-19 no solo fueron legales sino también provechosos para las arcas públicas.

Cueto dijo que lograron traer 22 millones de mascarillas KN95 fabricadas en China "a 2,5 euros la unidad", cuando el precio medio de ese producto en aquellos momentos fue de 3,52 euros.

Solo en el caso del contrato adjudicado por el Ministerio del Interior el 20 de abril de 2020 por importe de 3,4 millones de euros el precio se elevó a 2,7 euros por mascarilla debido a que hubo que transportar el material hasta los depósitos indicados por el departamento, en lugar de que el personal del Ministerio acudiera a recogerlo al aeropuerto de Barajas, como ocurrió en los demás contratos.

['Caso Koldo': Cueto, cerebro de la trama, niega las mordidas y el juez le prohíbe salir de España]

Cueto, pendiente de juicio en el caso Defex por la presunta venta irregular de armas a Angola a cambio de sobornos, proceso en el que la Fiscalía pide para él 50 años de cárcel, quedó este miércoles en libertad provisional, con la única medida cautelar de no poder salir de España sin autorización del juez.

El directivo del Grupo Cueto no se encontraba en España cuando el pasado día 20 fueron detenidos Koldo García Izaguirre, antiguo asesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos, y otras 19 personas relacionadas con la investigación de una presunta trama criminal que se habría lucrado gracias al amaño de contratos públicos en los peores momentos de la pandemia.

Con gafas de sol y cubierto por un gorro de lana, el hombre cuya imagen no había podido ser captada hasta ahora acudió al Juzgado en compañía de su abogado, Alfonso Trallero, para una breve comparecencia en la que solo contestó a su defensor.

Contradiciendo a los investigadores de la UCO y a la Fiscalía Anticorrupción, Cueto negó ser el verdadero dueño de Soluciones de Gestión, la empresa que resultó adjudicataria de los ocho contratos que son objeto de investigación.

Comisiones

Con un objeto social ajeno al sector sanitario y prácticamente inactiva hasta que en 2020 consiguió esos contratos por importe de 54,5 millones de euros, los ingresos de Soluciones de Gestión volvieron a desplomarse hasta los 846.000 euros en 2021. En julio de ese año Koldo García abandonó el Ministerio de Transportes debido al cese de Ábalos como titular del departamento.

Los investigadores sospechan que García influyó para que Soluciones de Gestión fuera la adjudicataria de esos contratos a cambio de comisiones ilegales.

Cueto, sin embargo, ha negado "tajantemente" haber pagado mordidas, señalan fuentes jurídicas.

- ¿Alguien, que no fuera usted, las pudo pagar?, preguntó Trallero

- No lo sé. Pero yo no, contestó el empresario.

Según su versión, el Grupo Cueto intervino como proveedor de servicios a Soluciones de Gestión, que fue la contratista principal y la mercantil que asumía al riesgo de la operación. Según el empresario, su grupo y Soluciones tienen relación desde hace años porque han trabajado en UTE en varios proyectos.

Comercial Cueto y Cueto Internacional desplazaron a sus empleados hasta China para recepcionar las mascarillas en un 'hub' de Shenzhen, contarlas, examinar la documentación y embarcarlas en vuelos hacia Madrid.

Por este trabajo Cueto aseguró haber percibido 900.000 euros.

Otra empresa del grupo, Sisgral, aportó la financiación necesaria para que la operación arrancara. Fue un préstamo de casi cinco millones de euros.

Las cuentas de Sisgral estuvieron embargadas en el proceso Defex-Angola, pero el Juzgado levantó la medida cautelar tras comprobar que no tenían nada que ver con ese asunto, dijo Cueto para subrayar la legalidad de los fondos aportados.

Según el empresario, Soluciones de Gestión devolvió íntegramente ese préstamo.

El contrato entre ambas mercantiles incluía una prima de éxito por la participación de Sisgral en el riesgo de la operación. El grupo empresarial de Cueto ingresó, de este modo, otros 900.000 euros.

Retribución

Los ingresos totales obtenidos se situarían, así, en 1,8 millones, muy lejos de los 5 millones que le atribuye la UCO de la Guardia Civil.

Sí cuadran más con las apreciaciones de los investigadores las cifras percibidas por Víctor de Aldama, que, según Cueto, fue clave en la operación.

Aldama era quien tenía los proveedores de las mascarillas y el que consiguió los vuelos de Air Europa para que el material pudiera venir a España.

Cueto manifestó durante su comparecencia ante el juez que entre finales de marzo y junio de 2020 fletaron 44 vuelos cuyo precio total ascendió a 7 millones de euros.

Añadió que fue Aldama el que, mediante una rebaja de los precios, logró un ahorro de 18 millones de euros en la operación.

Aldama percibió casi seis millones de euros a través de sus empresas MTM 180 Capital y Deluxe Fortune.

"Era precio de mercado", aseguró Cueto en referencia tanto a las retribuciones de Aldama como a las suyas propias. A este respecto, se basó en una auditoría de la operación realizada en noviembre de 2021 por KPMG y que, según manifestó, garantiza la trazabilidad del dinero.

Soluciones de Gestión, por su parte, obtuvo un margen del 14% de la operación (más de siete millones de euros), por debajo de los márgenes que tuvieron otras operaciones similares en esa época, sostuvo Cueto.

Fue una operación "para salvar vidas", aseguró el empresario. También para ganar dinero, "como hace cualquier empresario". Pero no para lucrarse en cantidades desmesuradas.

Cueto enfatizó que en aquel momento, con una necesidad dramática de material sanitario y con los mercados colapsados, era una operación "de máximo riesgo" en la que participó con el "ánimo de ayudar" al país.

Según fuentes jurídicas, el defensor no preguntó por la relación entre Cueto y Koldo García y el papel del exasesor de Ábalos en la operación.

Los investigadores han acreditado, a través de seguimientos y escuchas telefónicas, una fluida relación entre ambos hasta fechas recientes.