Alma Ezcurra, vicesecretaria de Coordinación Sectorial del PP, durante la entrevista.
Alma Ezcurra: "La polarización no deja ver que Feijóo y Sánchez están de acuerdo en que en Gaza se violan derechos humanos"
"El modelo del 78 no está pensado para un ataque interno como el de Sánchez, habrá que reforzarlo" / "El Gobierno más feminista y social desprotege a las mujeres y arroja a los menas a las CCAA como paquetes" / "La España de Sánchez se está convirtiendo en la Hungría de izquierdas, con la pasividad de la UE".
Los políticos de profesión (y las políticas) suelen tener mala fama en España. Así, eligiendo al montón como en unos saldos de liquidación, te sale que al peso deberían ser desechables.
Y repasando la experiencia laboral de Alma Ezcurra (Madrid, 1986), es cierto que apenas hay registros de empleos en el sector privado, con tres años en el ámbito de la consultoría, justo durante la etapa de Pablo Casado al frente del partido.
Claro que ella reconoce ser "política por vocación", y debemos convenir en que si el ser humano inventó la cosa pública y la democracia representativa fue, en parte, para huir del despotismo de los aristócratas. Y eso debe valer tanto para fresadores sindicalistas como para licenciadas en derecho.
Tanto como que lo que promueve la democracia es que todos puedan gobernar, a base de convencer con argumentos y debatir con principios y tolerancia. Porque muchas veces ocurrirá que el poder esté en manos del rival ideológico, y hace falta que las minorías no sean aplastadas por el rodillo de las mayorías.
De Ezcurra nos dijeron muchas cosas antes de conocerla. Suele ocurrir con un personaje emergente de lo desconocido: que a todo el mundo le apetece presumir de conocerlo (porque emerge y tiene poder) mientras que, en realidad, nadie sabe mucho (porque viene de las filas de atrás).
Nos dijeron que es "dura", que "pisa demasiado fuerte", que "es más ayuser que Isabel Díaz Ayuso", y que ha sabido "hacer carrera con todos en el PP"... lo que debería ponerle a uno en prevención. Sobre todo, si regresamos al falso mantra del currículo.
A un mes y medio de ser madre por cuarta vez, Ezcurra ha elegido EL ESPAÑOL para darse a conocer, como nueva jefa de contenidos de Alberto Núñez Feijóo. Y en este periódico presumimos de rigor, una gran palabra que resume bien lo que debe ser el periodismo: para contar algo (o contar a alguien), primero hay que tocarlo.
¿Es dura? Es clara. ¿Pisa fuerte? Digamos que sorprende atornillando consensos donde otros ven sólo bronca.
¿Es un peón de la presidenta madrileña en la Ejecutiva de Génova? Lo cierto es que, al final de la entrevista, demuestra que eso no opera en su cabeza, recurriendo a un argumento muy propio para disolver la supuesta dicotomía.
Y si ha sabido hacer carrera en el PP con todo eso, al periodista le corresponde someterla a examen, y al lector (o lectora) decidir si la desecha o merece la pena invertir en ella.
Alma Ezcurra: "Sánchez es entre un lacayo o esbirro de Zapatero"
Empecemos por aclarar qué es ser la vicesecretaria de Coordinación Sectorial. La cosa suena a que usted tiene mucho poder, de hecho, se sienta cerca del jefe en las fotos. Manda usted mucho, pero ¿sobre qué?
Coordinación de materias. El presidente, en el último congreso, creó una nueva estructura en la que todas las secretarías atendieran a una misma estrategia política. Ésa es mi labor: el impulso político de las iniciativas de las diferentes vicesecretarías, la coordinación de contenidos, contribuir a un mayor diálogo.
Muchas veces, desde política social se habla de familia y desde la fiscal se están haciendo propuestas en ese mismo sentido... se trata de hacer el match, y que todo atienda al gran proyecto político de Alberto Núñez Feijóo.
Pasemos ese proyecto a examen, pues. Tienen ustedes enviadas a Moncloa una decena de propuestas de pactos de Estado sobre todo tipo de políticas. Sin embargo, cala el mensaje de que estos señores del PP sólo insultan, y no tienen propuestas.
Al Gobierno le interesa alimentar la crispación, es algo deliberado. Utilizan un lenguaje grandilocuente, un tanto maniqueo, para hacer ver que el contrario está generando un problema que ellos mismos tienen.
El PP puede decir, con todas las letras, que con este PSOE, no se puede. Sí que nos gustaría tener conversaciones con otro PSOE, uno que en este momento no existe. Pero las propuestas están ahí, enviadas a La Moncloa. Son públicas, las repetimos, a veces hasta la extenuación... no sé si siempre con mucho éxito. Pero las pueden juzgar los ciudadanos sin pasar por el filtro ideológico del Gobierno.
Dicen por los pasillos de Génova que no hay propuesta que saquen ustedes que no haya pasado por el despacho de Juan Bravo, para que el vicesecretario de Hacienda le ponga el sello de 'sí, se puede pagar'...
...el PP es la corrección económica. Eso está bien, da seriedad. Una, en su casa, no lo hace de una manera muy diferente.
Aclárame, por ejemplo, tres medidas para abordar la principal preocupación de los españoles, según el CIS: la vivienda.
Venga... expulsión automática, en un plazo de 24 o 48 horas cuando las viviendas sean ocupadas. Segundo, liberalización de suelo, junto con una reducción radical de los plazos de tramitación para los cambios de uso. Porque hoy no bajamos de los 10 o 12 años, y la idea es, como mínimo, recortarlo a la mitad.
Y por salir un poco del marco habitual... puesta a disposición de inmuebles de titularidad pública en desuso, para destinarlos al alquiler social o a precio asequible.
¿Tienen ustedes localizados esos inmuebles en desuso?
Hay un inventario de esos inmuebles del Estado en las Comunidades Autónomas y en los ayuntamientos, por supuesto.
Ahora, el asunto que llena los titulares: la inmigración. Hace algo más de un año, el PP votó a favor de tramitar la ILP para la regularización masiva de quienes llevan una serie de años sin papeles en España. Pero ahora, Feijóo proclama que ser irregular no debe dar ningún derecho. ¿Con qué nos quedamos?
¡Es absolutamente compatible! Vamos a ver, era una cuestión de democracia aceptar la toma en consideración de la Iniciativa Legislativa Popular con más apoyo presentada en la historia. El objetivo era, en el trámite de enmiendas, debatir e introducir los cambios que nos parecieran convenientes para mejorar el texto.
Nosotros no nos oponemos a la regularización de inmigrantes, nos oponemos a la regularización sin control.
"Con los menas, pensamos en el interés superior del menor; otros piensan en el interés superior de Sánchez"
Explique eso, porque el discurso de Feijóo se ha endurecido en este año...
Feijóo dice que 'contribuir tiene que ser condición para permanecer'. Dice que 'la irregularidad no puede generar más derechos que a un nacional'. Y lo que dice también es que 'la inmigración es absolutamente necesaria, pero tiene que ser legal, segura y ordenada'.
No es ninguna insensatez decir que los españoles deben tener la capacidad de decidir quién, cómo y para qué viene a este país. Una inmigración legal, segura y ordenada da garantías para el nacional y para el inmigrante.
Los titulares se llenan de menores no acompañados, pero más los centros de acogida de Canarias, donde están hacinados. Si hacemos caso al Gobierno, es culpa de las CCAA del PP, pero según el PP es culpa del Gobierno, que no pone el dinero...
Hay dos cuestiones previas. La primera es que hay que ponderar el problema de los menores. El término 'menas', que se ha acuñado por una parte del espectro político, tiene la virtud de ser simbólico. Pero no representa el grueso del problema de la inmigración irregular. No son tantos, no pasan del 10% o el 15%. Es icónico, pero no es el gran problema.
La segunda cuestión previa...
Muchas veces me preguntan '¿qué vais a hacer para cambiar el modelo migratorio?' Y yo siempre respondo: 'Lo primero que vamos a hacer es tener uno'. Esto va a sonar pelota con mi jefe, pero es una frase brillante de Feijóo: 'No hay política migratoria más inhumana que la que no existe'.
No llegamos a ningún sitio, sólo criticando al Gobierno. Le pregunto por la política del PP.
Ahí voy. En este momento, las vías de entrada legal en España están prácticamente colapsadas. Es decir, que la irregularidad es un incentivo. Para quien huye de situaciones de desigualdad, de represión, y está en una situación de necesidad, si puede no elige el cayuco, que es la más minoritaria de todas las opciones. La gente normalmente entra por Barajas o por El Prat.
Si entras, pides visado de turista, una vez dentro del país, te intentas buscar la vida. Si permaneces dos años, puedes pedir la residencia legal, en el caso de los latinoamericanos, o pedir un Ingreso Mínimo Vital, que ya te sirve para demostrar el arraigo. Y de ese modo, puedes solicitar la reagrupación familiar.
Termine el diagnóstico...
...a esa persona no le compensa hacer todo el trámite de un contrato legal de entrada, que es prácticamente imposible hoy en día. Esta vía es, desde luego, más segura y más rápida. Por tanto, lo que tiene que haber es un modelo migratorio estable, que dé garantías para todos.
Alma Ezcurra, vicesecretaria de Coordinación Sectorial del PP, en su despacho de la sede de Génova.
¿Y con los menores, qué hacemos?
Es interesante empezar por saber si son menores o no. Necesitamos mejorar los mecanismos de determinación de edad. Porque garantizar ese interés superior de los menores significa darles una tutela rápida y justa.
El Gobierno debería empezar por cumplir las sentencias. El Tribunal Supremo le ordenó hacerse cargo de mil niños con derecho a asilo que todavía no han sido distribuidos a centros de acogida y que están en una situación de limbo legal...
...perdone que le interrumpa. Pero las Comunidades no están ayudando. Sin ir más lejos, Madrid acaba de cerrar el centro en el que iban a ir 400 de estos chicos, según la intención de Moncloa, aduciendo que no tiene licencia. El mismo centro que, hasta ahora funcionaba con total normalidad.
Hombre, tengamos en cuenta cómo se ha determinado el reparto. Seamos honestos, porque si es consensuado con las CCAA, que son las competentes en atención a menores, es una cosa. Pero si lo decide el Gobierno atendiendo a un criterio que, no se sabe muy bien cómo, casualmente excluye a dos autonomías donde radican los cuatro partidos políticos de los que depende la coalición, la cosa ya plantea dudas.
Y por eso, las CCAA, del PP y no del PP, han recurrido este decreto ante los tribunales. Así que parece lógico que los procedimientos vayan a ir un poco más lentos, para ser más garantistas. Más aún cuando este Gobierno envía a los chavales y sus expedientes sin determinación de edad, sin anunciar la procedencia, sin asignar recursos ajustados a la protección que van a tener que recibir.
Entretanto, los chavales se quedan hacinados en Canarias.
Y lo estarán en Canarias o en otras Comunidades Autónomas. Le aseguro que en este país nadie está a favor de actuar contra los seres humanos. Hay muchos consensos que, por la polarización, no vemos. Todos estamos a favor de hacer las cosas bien, pero unos anteponemos el interés superior del menor, y otros trabajan por el interés superior del político, o del partido político del Gobierno.
Me dice usted que hoy el incentivo está en entrar de manera irregular, y que el PP sostiene que la irregularidad no puede generar más derechos. ¿Un Gobierno del PP cortará el acceso al Ingreso Mínimo Vital a los 'sin papeles'?
Con el migrante, algunos dibujan víctimas, y otros dibujan verdugos. A mí me parece un ser humano y, como tal, digno y libre. Por tanto, titular de derechos y de obligaciones. La primera obligación en democracia es cumplir la ley. Así que el que entra tiene que hacerlo cumpliendo la ley, o tendrá que marcharse.
Y tenemos que buscar una solución para que la gente deje de entrar incumpliendo la ley, poniendo más fáciles las vías de entrada legal, arreglando el sistema para que, de verdad, no haya situaciones de desprotección que se queden sin cubrir una vez que están dentro. Son capaces de la mayor prosperidad conforme a su propio trabajo y esfuerzo, y serán ayudados siempre que lo necesiten.
Pasemos a otro gran problema. Hoy, el sueldo medio de los menores de 35 años es inferior a la pensión media contributiva en España. ¿Está mal repartido el Estado del bienestar?
Yo creo que el Estado del bienestar tiene una crisis importante, y que la política española, a izquierda y a derecha, ha mirado al censo y no al futuro. Y se le ha hecho bola el problema.
Vaya, ahora es cuando usted me da la receta que todos ocultan.
El Estado del bienestar es un hecho diferencial de España con respecto a otros países, y es motivo de orgullo. Por eso, no hay cosa que me moleste más que un político tirando de chequera en campaña electoral, porque la mayor parte de las veces no puede cumplir esas promesas.
Yo creo que, durante el Gobierno de Mariano Rajoy, se hizo una reforma de las pensiones que garantizaba un poco la sostenibilidad, y que fue una de las cosas que más rápidamente cambió el de Pedro Sánchez. Fue un horror...
"¿Una reforma de la Constitución? Debemos abrir el debate y que los españoles entiendan lo que nos tocará hacer"
¿Un horror?
Un error, quería decir. Aunque también un horror, sí. Yo creo que hay que ir introduciendo reformas que mejoren la sostenibilidad y la eficiencia del sistema, porque efectivamente hay una brecha enorme.
Estos datos que me ha dado son de un informe de la Fundación Juan de Mariana, que yo también he leído, y que habla de una diferencia de riqueza de un 20% entre generaciones. Eso es insostenible.
Vaya, la receta...
Los jóvenes han hecho todo lo que tenían que hacer y tienen dos certezas. Una, que no van a vivir mejor que sus padres. Y dos, que no van a cobrar una pensión. Entonces, hace falta una reflexión conjunta, sin ideologías, sobre las pensiones.
Este país tiene una de las mayores esperanzas de vida de Europa. Y un sistema de bienestar que contribuye a ello. Habrá que pensar cómo afecta eso a los servicios de salud, por ejemplo. ¿Introducimos criterios de renta para distribuir mejor el esfuerzo? Yo, para empezar, volvería a la reforma del Gobierno Rajoy.
Eso es un titular.
Eso haría yo.
La cuestión territorial tiene muchas aristas, y más con este Gobierno, que depende de socios independentistas. Empecemos por lo básico. ¿Hay que fijar constitucionalmente qué sí y qué no se le puede traspasar a las CCAA?
Ya está fijado, pero se podría fijar mejor.
¿Me está diciendo que merece la pena una reforma constitucional?
España merece una reflexión sobre si hay que hacerlo. Pero no sólo para eso, sino para reforzar muchas cosas de lo que constituye el modelo del 78. Estuvo muy bien pensado, pero no estaba previsto para una reacción autoinmune como ésta.
¿A qué se refiere?
A que estaba pensado para amenazas externas, pero no para amenazas internas. El gobierno de Pedro Sánchez ha estirado las costuras constitucionales muy por encima de nuestras posibilidades, y eso ha generado tensiones y problemas.
Por tanto, hay que reforzar los mecanismos de pesos y contrapesos y aclarar todo aquello que suscita dudas. Porque ya sabemos que allá donde hay duda, nos abren las interpretaciones. Mi opinión es que, por lo menos, debemos abordar un debate sosegado. Es verdad que en este momento es imposible...
...con 'este PSOE'.
Con este Gobierno, con este juego de mayorías, no es posible. Pero al mismo tiempo, creo que renunciar a plantear el debate es renunciar a resolver el problema. Ahora no puede ser, pero tiempo que ganamos para pensar cómo lo vamos a arreglar, llegado el momento.
Esta entrevista se hace un jueves, día en que Zapatero se reúne con Puigdemont en Ginebra. Si usted se paseara hoy al lago Leman, y se encuentra al expresidente, ¿le preguntaría por su reunión con el fugado, le pediría el teléfono de Maduro... o le pediría un teléfono de Huawei?
Es verdaderamente sorprendente lo que está ocurriendo con Zapatero. Pero reconozco que siento cierta satisfacción personal al ver cómo las cartas se ponen boca arriba. Hace mucho tiempo que me pregunto dónde termina el zapaterismo y dónde comienza el sanchismo. Y particularmente este verano, todas las cartas se han empezado a poner boca arriba. Usted es muy joven, no sé si se acuerda de aquello de la Alianza de las Civilizaciones... pues no era un proyecto internacional de paz.
Explíquemelo.
Era el retiro político de Zapatero, que se iba a hacer un tour por narcodictaduras, por regímenes comunistas, y a sueldo. Él es el operador político de la izquierda actual, el que interviene en lo de Plus Ultra, el que está en Ginebra negociando con Puigdemont, y es el tipo que está allá donde el mal está intercediendo.
¡Qué pensará un ciudadano no español al ver a un expresidente del Gobierno de España con un prófugo de la Justicia que probablemente sería condenado por golpismo con un mediador internacional!
"Lo de Huawei empezó con Zapatero, Sánchez es su lacayo y, más pronto que tarde, responderán de su colaboracionismo con Maduro"
¿Es tan malo malísimo Zapatero? Parecía Bambi...
Bueno, lo sigue pareciendo, envejece estupendamente. Pero creo que tiene las ideas políticas equivocadas y lo único que hace es ser coherente con ellas.
Cualquier persona de derechas puede decir eso de una persona de izquierdas. Lo que me ha dicho antes es otra cosa.
La izquierda se llama progresista, y dice perseguir el ideal jacobino de la igualdad y la libertad. ¿Qué defiende Zapatero en Venezuela?
Él dice que trata de mediar.
¿La situación ha ido a mejor o a peor?
Vaya, las preguntas las hacía yo. Entiendo que usted diría que a peor.
Los ideales que dice defender no son coherentes con las consecuencias de sus actos. España acaba de ser amonestada por la UE por su contrato con Huawei. ¿De dónde vienen las relaciones entre España y China?
La primera vez que se contrata a Huawei lo hace el Gobierno de Zapatero. El director de seguridad de Huawei era el director de seguridad en Moncloa con Zapatero. Entre la cartera de clientes de la empresa de comunicación de las hijas de Zapatero está Huawei. Huawei contrató a Víctor de Aldama. ¡Es que es todo increíble! ¿Quién le lleva el lobby a Huawei?
José Blanco...
...secretario de Organización de Zapatero, que fundó una consultora. ¿Con quién? Con Antonio Hernando.
Bueno, y con uno de los suyos, Alfonso Alonso.
Cierto, pero Hernando... luego fue director adjunto del Gabinete de Sánchez. Y que ahora es... ¡vaya hombre! el secretario de Estado de Telecomunicaciones, el que suscribe contratos con Huawei para alojar las escuchas judiciales. Nada más y nada menos. Así que viene Europa y te llama la atención. Es decir, se van uniendo los puntos.
¿Me está diciendo que Sánchez es una marioneta de Zapatero?
La palabra 'marioneta' me parece condescendiente. No sé, estoy entre lacayo y esbirro [risas].
Ya tenemos otro titular.
Es lo que me pasa por ponerme a hablar.
Este periódico ha publicado que Koldo viajó a Venezuela para informar a la 'número dos' de Maduro de que Aldama dejaba de ser el interlocutor para los pagos a líderes del PSOE. ¿El 'caso Delcy' es el que une los puntos de la trama de Cerdán, el fuel, Zapatero… y el cambio de política española con la tiranía chavista?
Delcy tenía contacto con Koldo, Ábalos y Aldama. Venía a España a verse con Sánchez. Zapatero lleva años defendiendo públicamente a Maduro... no podemos extrañarnos ahora de que el PSOE se niegue en el Parlamento Europeo a reconocer al Cártel de los Soles, que es el Cártel de Maduro, como organización terrorista.
Lo que está claro es que el colaboracionismo con dictaduras tiene que tener consecuencias, y que, más pronto que tarde, todos ellos tendrán que dar explicaciones y asumir responsabilidades por sus vínculos, por sus silencios y también por sus decisiones políticas.
Prometió Feijóo, en el congreso en el que la aupó a usted a este cargo, que levantará las alfombras y que 'todo se sabrá'. ¿Incluso si eso implica que Pedro Sánchez acabe en un juzgado como, hace diez días, le sugirió él mismo al presidente en la sesión de control?
Yo conozco a Alberto Núñez Feijóo, y estoy convencida de que lo va a hacer. Pero además, es que creo que es una necesidad democrática, incluso para la propia supervivencia del sistema. Los ciudadanos han sido tratados, durante muchos años, no como adultos... como si hubiera que contarles sólo una parte de la verdad, porque a lo mejor es muy dura o no la van a entender.
Yo creo que los ciudadanos deben entender la gravedad de lo que nos vamos a encontrar para que, juntos, salgamos adelante. Para que protejamos lo que tenemos que proteger, abriendo ese debate del que hablábamos antes.
Lo de la Constitución...
...o les decimos la verdad de lo que hay, para poder cambiarlo, o nadie va a entender las profundas reformas que el presidente Núñez Feijóo está planteándose.
Pero eso va a ser muy duro, si ustedes de verdad lo hacen. Pondrán no sólo en riesgo al otro partido sistémico, sino quizás al propio sistema.
Yo es que creo que el riesgo lo tiene el sistema. Si no tratamos con verdad a los ciudadanos y somos honestos...
Están a un paso de ser un poco salvapatrias.
No salvapatrias. Pero la situación es muy complicada. Antes, España funcionaba a pesar de sus políticos y ahora las cosas empiezan a no funcionar. Los transportes no funcionan. En las encuestas, la gente, por ósmosis, dice que la economía va bien... pero no la suya. Luego, ves el contexto internacional y los que somos padres pensamos 'vaya mundo'...
¿Dónde está mi España de los 2000? Cuando la preocupación era si un piso o el otro; si cambiar de coche... es que ahora el horizonte es pesimista. Por eso creo que, como en una enfermedad grave, uno ya quiere la verdad y ponerse a trabajar en cómo solucionarlo. No tenemos que conformarnos con esta España irreconocible.
La eurodiputada y dirigente del PP Alma Ezcurra, antes de su entrevista con EL ESPAÑOL.
Otra cosa que prometió Feijóo es que no incluirá a Vox en su Consejo de Ministros. ¿Nos lo creemos, porque Sánchez también dijo que no dormiría con ministros de Podemos?
Hombre, es que Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez no tienen nada que ver.
Me pide usted que me crea eso para que me crea lo otro. Eso no vale.
Yo trabajo en política por vocación. Y quizá lo que más me gusta del líder es la arrogancia del líder. Feijóo aspira a gobernar con la mayor diferencia y con la mayor holgura, para aplicar un programa sin chantajes y sin sometimiento a nadie. Y yo no votaría un líder que no aspirara, como mínimo, a eso. Luego ya veremos si cualquier líder lo consigue.
Además, Feijóo es un hombre de palabra. A mí, todas las veces que me ha dicho una cosa la ha cumplido. Y tiene el proyecto político para hacerlo. Hay que desinflamar la política española, y él representa al adulto en la habitación. Llevamos demasiados años en una suerte de reality show, y él ofrece esa cosa contracultural del sosiego y la moderación.
¡Caray! El miércoles estuve con Illa en la recepción por la Diada en Madrid, y eso es lo que nos vendía su gente: 'El sosiego, la moderación'.
Vaya... ¿eso dijeron? Pues yo lo retiro [risas]. ¡Pues claro, hombre! Hay un montón de elementos que nos unen y que no somos capaces de ver.
En todo caso, y volviendo a Vox, las encuestas últimamente no ayudan a que la promesa de Feijóo sea más creíble. ¿Y si Santiago Abascal les dice que o vicepresidente o nada?
Pues que haga presidente a Pedro Sánchez. ¡Si no hay ningún problema!
Ya pasó con Pablo Iglesias. Dijo eso y Sánchez contestó lo mismo: 'No vas a darle una oportunidad a las derechas de que ganen'. Y lo hizo.
El señor Abascal, aunque a veces le veamos titubeos e histrionismo, no sería capaz de castigar a España con una nueva legislatura de Sánchez.
¿Están ustedes preparados por si mañana Pedro Sánchez va y disuelve?
Hombre, lo haría en martes, para que las elecciones fueran en domingo. Aunque le encanta hacer cosas disruptivas. Siempre puede decir 'voy a ir a ver al Rey' el martes, y que luego sea para pedirle azúcar, como hizo cuando la carta del enamorado [risas].
Ahora en serio...
Por supuesto que estamos preparados. En el congreso de julio se demostró. Primero, nos agitamos el polvo de las ideas, retomamos debates, hicimos pelea ideológica y priorizamos las cosas.
La ponencia está ahí, y creo que dibuja un horizonte de país ilusionante y de consenso. Hay un nuevo equipo, una nueva tensión, tensión ganadora... y hay una palabra que robó Ayuso para sus elecciones: hay 'ganas' [gesticula].
"Es insostenible que los pensionistas ganen más que los jóvenes, yo empezaría por volver a la reforma de Rajoy"
Se lo pregunto también, porque sigue ahí Carlos Mazón. Queda poco para que se cumpla un año de la dana, y su nombre sigue haciendo ruido.
Normal que haga ruido. Fíjese en los incendios de este verano. Han sido duros, ha habido fallecidos... pero yo no recuerdo una tragedia similar en España como la de la dana de Valencia. Hay mucho dolor de muchas familias, de mucha gente que ha perdido muchas cosas.
Y muchos ascensores que siguen sin funcionar...
Es terrible. Por eso entiendo la situación. Ya me conocerá, yo no soy una persona que justifique nada.
Pues adelante.
Hay una responsabilidad concurrente del Gobierno de España y del autonómico en términos de asunción de responsabilidades. Hubo ausencias de unos y de otros. A veces, se puede no ponderar bien la magnitud de lo que va a venir, de acuerdo. Pero en el Gobierno de España, hasta donde yo sé, nadie ha asumido una responsabilidad. Y Mazón ha cesado a dos consejeros, ha puesto un vicepresidente para la reconstrucción.
Se anunciaron ayudas del Gobierno de España, que no se están ejecutando. Las del autonómico, sí. Incluso pagando impuestos al Estado por esas ayudas. Han pasado 11 meses y, como usted dice, muchas cosas siguen sin funcionar. Pero si yo analizo quién ha hecho algo, desde luego no diría que fue el Gobierno de España.
Olvidemos la comparación y vamos a la responsabilidad personal del 'president'... él no dijo la verdad de inicio.
Hay una investigación judicial. Yo lo emplazo hasta que termine y veamos los hechos probados. Y con ellos le expreso mi opinión.
El asunto es que la instrucción terminará después de que haya otras elecciones. ¿El PP está dispuesto a sostener a Mazón?
A lo mejor es Carlos Mazón el que no quiere continuar. No lo sé.
También hay otro problema. Sánchez ha logrado que todos hablemos de Israel y Gaza. Y parece que eso los ha dejado a ustedes a rastras del PSOE y algo divididos internamente.
No me gusta mucho eso de 'a rastras del PSOE', porque el tablero está inclinado. Es decir, cuando el PSOE y sus terminales deciden introducir un elemento en el debate público, no hay fuerza de la naturaleza que lo pare.
El que gobierna tiene el BOE y marca la agenda. Deberían saberlo.
El que gobierna tiene el BOE. Pero Pedro Sánchez tiene el BOE, el INE, el CIS, TVE...
Ya les tocará a ustedes, seguro. Pero hablemos de Israel.
De acuerdo. Yo en estos días he reflexionado mucho sobre este tema. No sé si por madre, por tradición familiar o porque el mundo me ha hecho así, todo lo que tiene que ver con víctimas humanas, a mí me toca mucho.
Una de mis primeras reflexiones es qué pasó entre el lunes del anuncio de las nueve medidas del presidente y tres meses antes para que todo el Gobierno haya decidido que hay un genocidio. Si lo hay, ya lo había hace tres meses.
Eso es así.
Pero empezaré por lo moralmente correcto. Me parece que se están violando los derechos humanos en Gaza de una manera atroz. Lo condeno. Creo que es una masacre. Y que gran parte de mi partido ha dicho esto, por no decir todos.
De la misma manera, condeno los brutales ataques que se produjeron el día 7 de octubre. Y cada día pienso 'Dios mío, hay personas que todavía están retenidas'. Creo que Israel tiene derecho a defenderse. Y creo que Israel es un Estado democrático. Pero precisamente porque lo es, en la medida en la que yo defiendo la democracia liberal, mis parámetros morales de exigencia son mayores. Y que Netanyahu tiene una obligación mayor: garantizar la seguridad de su país y hacerla compatible con los derechos humanos y con la paz.
Esta semana, la Fiscalía ha abierto una investigación en España.
Esos excesos me gustaría que fueran investigados, sí. Por un organismo internacional, independiente, sobre hechos probados y contrastables.
Pero...
¿Por qué Sánchez salió ese día? Creo que no le preocupa el conflicto de Gaza. Le preocupa el conflicto en su coalición de Gobierno. Y creo que no le preocupan los derechos humanos, sino la situación procesal de su señora, la suya propia, la de su partido, y la de su Gobierno.
A mayor debilidad institucional, más ruido en la calle. Así que salgo, hablo de 'genocidio' y ya tengo el tinglado armado. Mando a que haya saboteo y follón en La Vuelta y hablo sobre esto.
La dirigente del PP Alma Ezcurra, entrevistada por Alberto D. Prieto, subdirector de EL ESPAÑOL.
Perdone, pero Sánchez lleva mucho tiempo clamando por los gazatíes...
...le preocupaban muchísimo los derechos del pueblo saharaui, hasta que llegó Marruecos y dijo 'a callar'. Y se calló. Le preocupaban muchísimo los derechos humanos en Venezuela y ha bajado el tono. A lo mejor es que ha llamado Zapatero...
Le preocupan mucho las mujeres, pero por las afganas yo no he visto ningún sabotaje en ningún sitio.
Que utiliza el conflicto, me dice.
Forma parte de una estrategia de polarización total. A mayor debilidad del Gobierno, mayor nivel de hostilidad introduce Sánchez en el debate público para llenarlo todo de ruido.
Y me da mucha pena porque, vuelvo al principio, diría que todos los partidos del espectro político español creemos que con las víctimas, compasión; y con los verdugos, condena. Y estando de acuerdo en esto, al PP lo acusan de falta de contundencia alrededor de un debate semántico.
No me negará que el discurso de Feijóo el miércoles en el Congreso fue muy distinto al de Isabel Díaz Ayuso, pocas horas después. Ustedes tienen un debate interno, y Sánchez lo está aprovechando.
De quién se está aprovechando Pedro Sánchez es de las víctimas civiles inocentes en la Franja de Gaza. Y si luego, además, quiere ver una debilidad en el PP, de acuerdo. Pero la inmoralidad reside en lo primero y no en lo segundo.
¿Tienen ustedes clara la posición? A veces, no lo parece.
Pongamos un poco de orden en los hechos. Cuando se produjeron los atentados del 7 de octubre, Alberto Núñez Feijóo convocó una reunión de expertos, con diplomáticos, exministros... a la que yo acudí. Ahí se fijó una posición que ya decía lo que yo le acabo de decir.
A veces, lo sensato y moderado es menos sexy, menos binario o menos polarizador. Pero me niego a aceptar, aunque eso parezca, que el PP va a rebufo. O que el tema de Israel y Gaza sea un conflicto de izquierdas y derechas.
En eso último, las encuestas le dan a usted la razón.
Es una cuestión sobre liberales e iliberales, sobre muertes de civiles. Y la vulneración de derechos, más allá de la polarización y de las etiquetas, es un hecho incontestable. Y en tanto se da eso, a nosotros no nos van a encontrar en otro punto.
Israel es una democracia, como dice el presidente Aznar, que hay que defenderlo porque es un muro de contención frente a la barbarie. Yo digo eso mismo y aún más. Precisamente, por ser un Estado democrático de Israel espero un estándar moral superior al de un régimen teocrático, del que no espero escrúpulos. El matiz de Aznar, y el de la presidenta Ayuso, es que si hay responsabilidades, no son del Estado, son del Gobierno. Y desde luego, no son del pueblo de Israel, como algunos pretenden hacer ver.
Todos los días hay acampadas y manifestaciones en la puerta de la casa de Netanyahu, diciéndole ¡Basta ya!
Bien hecho.
"En Gaza se están violando los derechos humanos de una manera atroz, y a Israel, como democracia, le exijo más"
Olvidándonos del debate semántico, Feijóo y Sánchez están 95% de acuerdo sobre esta guerra. ¿Génova no lo puede reconocer en alto porque Pedro Sánchez 'es el mal'?
No es un problema de Génova, de verdad. Es el filtro de la ideología, la polarización total en la que está metida la sociedad española. Y que si las palabras nacen de la boca de un político sufren distorsión.
¡Pues claro que están de acuerdo! Es que es sorprendente la cantidad de puntos de acuerdo. De lo que más me duele de este Gobierno es que se ha cargado dos cosas: una, reconocer la legitimidad del rival y dos, el derecho a la discrepancia política. Ahora hay un relato oficial y luego, todo lo demás. ¡Dios mío, estamos de acuerdo!
Todo lo demás, que siempre es 'fascismo'.
[Risas] O racismo, o machismo, o negacionismo. Todo termina en ismo.
El PP Europeo mantiene un discurso muy agresivo contra Pedro Sánchez. Lo acusan de poner en riesgo el Estado de derecho y la democracia. ¿De verdad es para tanto la percepción que hay del presidente en la UE? Usted es eurodiputada...
Cambiemos 'agresivo' por 'contundente'. Viniendo de hablar de lo que venimos, prefiero 'contundencia'. No quiero comprarle ese relato a la izquierda de que todo lo que no son ellos es 'agresividad'.
Como usted quiera.
Llegué hace año y medio a Bruselas, y una de las cosas que más me sorprendió es la barrera cognitiva de los Pirineos, con perdón de los portugueses. Cosas que para nosotros eran clamorosas, como el asalto al Tribunal Constitucional o a RTVE, o como los ataques del Gobierno a los jueces, que pondrían los pelos de punta a cualquiera de los Pirineos para arriba... ¡allí no llegaban!
¿Y ahora sí? A eso iba...
El PP ha ganado peso, somos la segunda delegación, y nos hacemos escuchar. Tenemos un discurso unificado, explicando muy claramente las cosas que pasan en España, promoviendo misiones de investigación, cada uno en su comisión, para que vengan y lo vean.
También estuvo todo el proceso de confirmación de Teresa Ribera. Hay que recordar en qué contexto se produjo, en mitad de la dana. Era la ministra del ramo, y no estaba en su lugar de trabajo, sino preparando el 'hearing' del Parlamento que, por cierto, es muy complicado.
¡No respondió a las preguntas! Todo lo que se ha conocido en los informes de la UCO sobre Villafuel y las licencias de hidrocarburos, que también tenían que ver con ella. Lo que implicaba que su marido estaba en Competencia... todo eso en Europa se ve muy mal.
El PP no es que haya sido agresivo, es que ha puesto negro sobre blanco una serie de hechos y lo ha traducido a todos los idiomas que se ha considerado pertinente.
Tienen ustedes a la presidenta de la Comisión. Si esto es así, ¿por qué Bruselas no actúa, como actuó en Hungría, en Polonia, o en Rumanía?
Hasta donde yo sé, las instituciones europeas nunca se han caracterizado por la agilidad.
Con Bucarest fueron rapidísimos. Ni siquiera se llegó a aprobar aquella Ley de Amnistía.
Yo se lo dije al comisario Reynders cuando entré, que vino a presentar el Informe sobre el Estado de Derecho. Le dije 'España se está convirtiendo en la Hungría de izquierdas, con la pasividad de las instituciones europeas'. Y lo sigo pensando.
Fue mi primera intervención allí, y me llamaron exagerada. Pero es que venía de la Asamblea de Madrid, tenía que decir las cosas como son [risas]. Europa tiene que dejar de mirar para otro lado. No puede prescindir de un país como España, ni el PPE puede prescindir de una delegación como la española, que es la segunda más importante.
"Es normal que la dana de Valencia siga haciendo ruido, no recuerdo una tragedia mayor en España y muchas cosas siguen sin funcionar"
¿Tiene usted un ranking de cuál es la peor de nuestras corrupciones? Las amigas de Ábalos, la amnistía a cambio de votos, la cárcel de Cerdán, el fiscal general bajo fianza, el cupo catalán y la quita de deuda, el 'caso Begoña', lo de Koldo en Venezuela con Delcy, el 'caso hermano'...
¿Hay que elegir?
Haga lo que quiera...
Yo creo que la peor es la corrupción moral. La hay en intercambiar impunidad por votos, mucha. Y es corrupción moral meterte en la vida de la gente. ¡No nos diga lo que tenemos que comer o beber, lo que tenemos que sentir o a qué Dios rezar! Ni a las mujeres cómo tenemos que vestir.
Y luego tengo un dolorcito personal, de corazón, con todo lo que tiene que ver con Venezuela.
Le agradecerá al fiscal general, al menos, que gracias a su memoria nos hemos enterado de que las pulseras VioGén estuvieron meses sin funcionar.
Es terrible. Lo del fiscal general es terrible.
Y la cuestión de las pulseras, también. Lo del sí es sí era incompetencia legislativa, pero esto es insolvencia política. Se han presentado como el Gobierno más social de la democracia, y han hecho paquetes de seres humanos que han tirado a las CCAA, condenando a esos niños a la delincuencia o a la indigencia. Se dicen el Gobierno más feminista y hay agresores sexuales en la calle, otros sin controlar y algunas conductas bastante reprobables en el seno del partido.
Pues me la pone perfecta para terminar. ¿De verdad hacía falta que Feijóo le mentara los burdeles y las saunas a Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados?
Pues mire, es una reacción humana. Con esto me ocurre lo mismo que con el 'me gusta la fruta'. Todo el mundo se centra en quién reacciona, pero no es sólo un político, es un ser humano.
[Ayuso] tiene una trayectoria, unos sentimientos, y estaba en un sitio en el que no podía contestar mientras le llamaban fascista, asesina, corrupta y hablaban de su padre, de su hermano, de su pareja... que no tienen ninguna sentencia firme. Dijo algo para sí, lo resolvió no queriendo ser explícita y todos ponemos el grito en el cielo. ¡Eso es polarización! Pues es lo que ocurrió con el presidente Feijóo.
A ver, él lo hizo desde el estrado.
Sí, sí. Pero es que hay que revisar el discurso de Pedro Sánchez. Todas las personas tienen un límite.
A Simeone lo expulsaron este miércoles porque un señor le estaba insultando todo el partido y él se revolvió. Pero es que en su sueldo va, oiga.
¿Lo que dijo Feijóo es verdad o no es verdad?
Sí, en este periódico lo hemos demostrado.
¿Y por qué recibimos lecciones de moral de gente que tiene eso en su entorno familiar? Es que en algún momento había que decirlo. No fue ningún insulto. No, dijo la verdad.
¿Hemos vivido de los burdeles o no hemos vivido de los burdeles? Es que yo no soporto más esta superioridad moral de la izquierda, que nos dice lo que tenemos que hacer, hasta en nuestra vida personal, y como nosotros somos moderados, aguantamos y callamos.
Se puede entender el hartazgo personal de que le sacaran por enésima vez la foto con Marcial Dorado. Pero es Feijóo el que dice que hay que salvar la institucionalidad.
Esta mesa se sostiene con cuatro patas, ¿no? ¿Cree que se sostendría sólo con una? Porque oiga, no puede recaer siempre la institucionalidad sobre uno solo. Los políticos somos seres humanos y a veces se dicen cosas que, en otras circunstancias, no se dirían.
Me parece bien que nos exijan más. Nosotros también nos exigimos más, pero éstas son las reglas del juego.